BEVERLY CALVERT
Estaba regresando a la casa de Mateo con una bolsa de hielo que compre por el camino, en el momento en el que entre por la puerta algunos de los presentes se me quedaron viendo, ignore sus miradas y camine hacia donde esta Mateo.
—¿donde estabas?—me dice en el momento en el que me ve
—fui a comprar hielos
—¿para que hielo?
—para las bebidas y pues te caíste también para tu cabeza— le digo entregando un trapo con hielo
—vaya hasta que haces algo bien
maldito idiota, deberías agradecer que tienes a alguien tan maravilloso como yo, cálmate Beverly, finge ser feliz.
la fiesta continua y veo a Mateo muy feliz, se que esto solo era para encubrirse pero conozco a Mateo y sabía perfectamente que se sentiría feliz y cómodo con una fiesta, quiero a Mateo pero no se como quiero a este idiota.
la fiesta continúa y yo solo estoy sentada, no me dan ganas de divertirme como los demás pero al maldito de Mateo no le conviene que su novia se la pase sentada así que se dirigió hacia mi y me tomo de la mano para ir en donde están las demás personas.
—te invitaría a bailar pero no puedo con las muletas
—me encantaría ver como intentas bailar
—¿si?
—si
—pues vamos
me tomó de la mano y caminamos a donde esta la pista de baile, deja las muletas de un lado y lo ayudó a sostenerse
—te quiero Beverly
—yo también te quiero Mateo
me da un beso y sigue intentando bailar, soy muy mala bailando y mi pie chocó con el de el provocando que este se cayera.
—¡agh maldita seas Beverly!— me grita desde el piso
ayudó a que se levante y lo siento en una silla, dispuesta a caminar me giro pero el me detiene agarrandome del brazo
—¿a donde vas, mierda?— me dice en un tono bajo para que nadie se de cuenta de lo que pasa
—a donde yo quiera
—eres mi novia, eres mia. ¿a donde piensas que vas, mierda?
—no maldito idiota, yo no soy tuya ni de nadie y aquí la única mierda eres tu, asi que suéltame si no quieres que te rompa tu estúpido brazo.
y pensé que ignoraba mis palabras pero no fue así, me soltó el brazo y yo salí de su casa, por dios me defendí y funcionó, después de todo Col es buen maestro.
quiero decirles que también es bueno en otras cosas pero eso será una sorpresa para mas adelante.
Después de unos minutos llegue a mi casa, en el momento en el que entre me encontré con mi madre, genial lo que me faltaba.
—¿donde estabas?— me dijo cuando me vio
—en la fiesta de Mateo
—mentir es un pecado
—no estoy mintiendo
—fui a la fiesta y tu no estabas ahí
—seguramente fuiste en el momento en el que yo fui por hielos
—¿por que salías de la casa del tal Col?
—¿me espías?
—eso a ti no te importa
—dije que fui por hielos
ella no dijo nada más, solo se comenzó a acercar y lo siguiente que sentí fue el golpe en mi cara.
—¿eso por que?
—porque tu no debes andar metida en la casa de alguien que no sea tu novio
—¿me puedo ir?
—si
no digo nada mas y subo las escaleras para entrar a mi cuarto, cierro la puerta y me quedo unos minutos mirándola.
—¿por que miras tanto la puerta? ¿Qué tiene de especial?— dice una voz masculina detrás de mi.
me giro al instante y doy un pequeño grito al verlo.
—¡mierda!—grito al ver quien es
el pone su mano en mi boca y me empuja suavemente contra la puerta
—shhh no seas tan ruidosa o tu madre se dará cuenta— me dice para después quitar su mano
— ¿Qué haces aquí?
— te estaba esperando
— ¿a mi?
— esta es tu casa ¿no?— dice para sentarse en mi cama
—si
— entonces si te estaba esperando a ti
— ¿para que?
— quería saber como te fue en la fiesta
— bien
— ¿Mateo causó problemas?
— Mateo es un idiota
— ¿Qué hizo?
— nada importante, lo importante fue que me defendí
— ¿en serio?— me dice con una sonrisa en su cara
— si— le digo con algo de emoción
El no dice nada, solo me ve de pies a cabeza, ¿Qué le pasa ahora?
— ¿te golpeo?— en el momento en el que dijo eso se le borró la sonrisa de la cara
—no
—entonces ¿Quién te hizo el golpe en la cara?
— fue mi madre
— ¿tu madre te molesta?
— si
— ¿quieres que haga algo con ella?
— no, a mi madre no la tocas
— okey ¿Mateo te causa problemas?
— Mateo siempre causa problemas
— ¿me puedo encargar de el?
— si, pero nada grave
— bien
— ¿qué más necesitas?
— vengo a informarte que mañana saliendo de la escuela iras a mi casa
— ¿por qué?
— porque empezaran tus entrenamientos
— ¿en serio Sley me golpeara?
— si
— ¿no hay otra forma?
— no, asi nos enseñaron a nosotros
— ¿me va a doler verdad?
— y mucho
— Col
— ¿Qué?
—¿quién eres?— le preguntó,tal vez la pregunta no tenga mucho sentido pero el entendió lo que quería decirle
— soy el chico que llegó para cambiar tu vida
— ¿para bien o para mal?
— eso lo vas a tener que descubrí tu
— lo voy a descubrir
—lo se, bueno me voy
claro que el maldito sabía que lo iba a descubrir
Col se levanta de la cama y camina hacia la ventana
— una última pregunta— me dice antes de salir
— ¿cual?
— ¿aun te estas tomando tus pastilla?
— solo a veces, claro sin que mamá se entere que no las tomo
—vale, sigue asi— me dice y ahora si se va de mi casa.
Col es un chico misterioso, un chico que no logras descifrar. ¿Qué es lo que escondes?
y hasta el momento sigo sin saber descifrarlo.
Editado: 07.03.2022