Devuélveme el corazón

Empieza el juego

El encuentro con Mateo me ponía los nervios de punta. Mi madre había actuado de forma muy extraña últimamente, insistiendo en que no saliera de casa. ¿Qué estaría tramando? Sacudí la cabeza para despejar esos pensamientos. Tenía que concentrarme en el presente. Necesitaba ese dinero, así que había decidido darle una oportunidad a Mateo.

Al llegar a la facultad, me encontré con una sorpresa inesperada. Allí estaba ella, la chica con la que me había chocado el primer día. Estaba hablando por teléfono, pero al verme, interrumpió la llamada y me dirigió una sonrisa escalofriante. Antes de que pudiera reaccionar, se acercó a mí.

-Tu otra vez me dice

-Que te sorprende (estoy fingiendo una sonrisa y conteniéndome para no responder de mala manera)

-Pensé que en esta institución se aceptaban personas, pero veo que no es así hasta aceptan gatas

-Pues tú eres el claro ejemplo de ello, como es que ahora recién te diste cuenta querida (jaque mate, en insultos e ironías esta no me va ganar)

No me llames querida, maldita zo…

-Es un lugar de estudio, que son esas palabras cariño, le interrumpe un chico

-Hola, si nos disculpas no vamos (me dice, como que este chico me recuerda a alguien)

-Hola, un gusto volver a vernos (le digo mirando a la chica)

Se alejan, pero porque siento que conozco al chico, no se ve para nada pobre, en realidad la única en ese estado esconomico soy yo, al menos en esta universidad. Me estaba hundiendo en pensamientos, hasta que de la nada alguien me toca el hombro, voy a admitirlo me asustó.

Las escena de muchas películas de terror, ya no debo mirar más películas de terror me vuelvo paranoica.

-Hola, me estabas esperando (con esa sonrisa seductora me estaba mirando de nuevo, no caigas Arai tu eres fuerte, es solo una chico con la sonrisa más sexy que eh visto)

-Hola, claro que no, bueno si, es que te dije que te daria mi respuesta a tu propuesta (que te pasa por que respondes como tonta, deja de mirarle los labios mira a los ojos)

Se ríe a carcajadas

-Qué te pasa, mejor me voy, digo indignada por sus burlas

-No espera, tranquila, no me estaba riendo de ti, si no de la forma en que lo dijiste, disculpa, pero es muy gracioso (trata de retenerme)

-No sé ni por qué te hablo, adiós

-Ya, ya, está bien no volveré a reírme lo prometo, ¿pero dime es un sí? (levanta una mano como promesa)

-Así es, pero tengo condiciones

-Si? De verdad, dices que si

-Si, digo con la voz más baja que podría salir de mi boca

Sus brazos me rodearon con una fuerza inesperada, y por un instante me perdí en la calidez de su cuerpo. Mi corazón palpitó con violencia contra mis costillas, y un rubor intenso tiñó mis mejillas. La cercanía era embriagadora, pero al mismo tiempo, una oleada de nerviosismo me paralizó, tantos sentimientos solo por un abrazo.

-Pero repito tengo condiciones, lo digo mirando a sus ojos y al mirarlos sentí un cosquilleo que no se como explicarlo fué una sensación tan diferente.

No puede ser que me haya enamorado con tan solo días de conocerlo, es que realmente no me esperaba que sea asi de manera tan repentina

-Lo que quieras, lo que tu quieras hermosa

Mis mejillas arden, aich porque soy así, ya caí rotundamente y no pude evitarlo.

Odio lo tímida que soy a veces.

- Número uno: solo vamos a aparentar ser novios cuando haya mucha gente alrededor, dos no quiero que mi familia sepa por ningún motivo, ni fotos en redes sociales, tres cuando esto acabe no vamos a ser amigos, solamente conocidos, okey

-Está bien como tú digas, preciosa y puedo darle un beso a mi novia?

-Que dices, claro que no

-Pero como seremos novios sin besarnos osea no tiene sentido

-Solo si es estrictamente necesario, solo en el caso de que nos estén obligando básicamente

-Okey comprendo, pero

-Pero nada

Trato de cortar el sentimiento que me esta generando estar junto a él, solamente porque necesito este dinero lo hago, porque estoy arriesgando el corazón estando a su lado.

Narra Mateo

El reloj marcaba segundos de oro que se escapaban entre mis dedos. Si no aceleraba el paso, llegaría tarde otra vez. ¡Y hoy era el día! El día en que finalmente me vería con Arai. No era una simple cita, era... ¡nuestro encuentro! La idea me ponía nervioso, pero también ilusionado. Ojalá todo saliera bien y pudiera dejar de una vez por todas de escuchar los comentarios de [la innombrable]. Al llegar, casi la hago enojar con mi torpeza. ¡Qué comienzo más prometedor! Pero si todo funcionaba como esperaba, valdría la pena cualquier tropiezo

-Esto es lo que debes saber de mí y tu tendrás que darme el tuyo, (le paso un papel en donde se encuentra todo lo es mi vida )

-Muy bien mañana te traigo todo lo que debes saber de mí

-Empezaremos hoy después de salir, iremos de compras si te parece

- ¿De compras para qué? Estoy muy bien con esta ropa

-No digo que no estés bien así con esa ropa, pero al ser mi novia tendrás que vestirte como tal, no te preocupes será divertido (trata de no ofenderla menso, ¿ya se, pero como le digo de forma sutil?)

-Okey, estoy cansada vamonos de una buena vez a la clase, y no me hables porfavor

Aceptó, que bueno eso fue muy fácil

Demasiado fácil, raro

O no tanto.

Mateo Jovik, Lucía Alcaraz harán grupo

Arai González y Pedro Medina otro grupo

La profesora va citando nombres todos son parejas de dos, al terminar dice lo siguiente

Chicos ustedes va a simular una venta, y les daré su tema producto a cada uno y me tienen que vender el producto en sí, si me convencen tendrás cinco puntos para extras para el exámen final.

Empezó la competencia por esos puntos al final ganaron dos chicos que a mi parecer yo estaba vendiendo mejor pero bueno, lo intetamos con mi compañera.

-Mateo, este es mi número por si te interesa hablamos me dice Lucia, me estaba incomodando un poco pues esta chica es muy linda pero siento que estoy traicionando a Arai, ya que ella es mi novia, ficticia pero mi novia



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En el texto hay: amor, amistad y tristeza, celos humor

Editado: 09.12.2024

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