PÁGINA VII: QUIEBRE Y AMOR

Entrada Desconocida; Fecha Desconocida.

Hoy besé a la chica que me gusta.

Esto puede tener tres interpretaciones posibles, así que iremos paso a paso. Todo comenzó esa tarde de sábado. Desde ese fatídico día.

Hace dos semanas.

-Creo que deberías saber… Como me iré en una semana, supongo que te contaré todo ahora -Sí, tenía algo importante que decirme-… Es una historia algo complicada, ¿no te molesta?

-Supongo que no hay problema…

-Bien -tomó una profunda bocanada de aire y plantó la vista en la fuente de piedra caliza que teníamos frente nuestro-. Pasó más o menos así.

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Fue hace como tres años. Mi hermano mayor, teniendo diecisiete, salía con una chica de catorce. Era una relación muy inapropiada donde él tomaba el control de todo lo que sucedía en la vida de su pareja, y ella, inexperta y con un pensamiento de supuesto amor, jamás protestó de nada de lo que le hizo.

Mi hermano era muy bueno; no sé qué le pasó ni qué lo llevó a hacer que todo sucediera de esa forma.

Para no hacer la historia larga, mi hermano convenció a su novia de perder su virginidad con él, y ella accedió. Afortunadamente los padres de la chica llegaron antes de que ocurriera una locura, ya que incluso había insistido en no usar protección.

Así, los padres de la chica pusieron una orden de alejamiento a mi hermano y él fue transferido a una casa de retiro por tiempo indefinido. Estará en controles por el tiempo que los doctores consideren necesario, y la chica fue enviada a terapia.

Durante todo ese tiempo, no tuvo a nadie quien la apoye. Sus amigas dejaron de juntarse con ella y la tacharon de fácil y ofrecida y los chicos no la molestaban porque le tenían miedo al chico mayor que tenía de novio.

Por obvias razones, ella sufrió muchísimo el alejamiento de mi hermano, ya que ella desarrolló un trastorno de obsesión y dependencia emocional, sin mencionar el acoso que recibió en la escuela antes de ser transferida a la preparatoria.

Me dolió mucho verla así.

La razón por la que conozco de cerca esta historia es, aparte de que era mi hermano, que la chica que solía ser su pareja es una compañera nuestra… Emilia.

Se saben ciertas cosas sobre ella, pero jamás contaron la historia completa por motivos de privacidad. Para encubrir todos los problemas causados, solo dijeron que rompieron como cualquier pareja normal; sin embargo, ella quedó muy traumatizada.

Vamos a visitar a mi hermano unas seis veces por año, ya que le tienen prohibidas las visitas de fuera. Solo podemos verlo en su cumpleaños, navidad, año nuevo y tres otras fechas que el hospital nos lo permite.

Aquel evento golpeó muchísimo a mi familia.

Yo, obviamente, no sabía nada de su pareja ni que era nuestra misma compañera de salón, así que cuando me habló luego de clases y se puso a llorar, me sentí terriblemente mal… No tengo suficientes palabras para disculparme por todo…

Emilia es una chica amable. Dijo que no tengo de qué preocuparme, y que poco a poco ya lo ha superado, pero que no quiere saber nada relacionado al amor.

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-Wow… Eso es muy… Intenso -¡¿Cómo carajos se reacciona luego de escuchar una historia tan demente y profunda?! ¡¿Existe una respuesta correcta para esto?! ¡Porque quiero saberlo ahora mismo!

-Lo sé, ¿cierto? -sonríe como si no fuera la gran cosa y toma mi mano-. También hay otra cosa… No sé si deba contártelo, pero creo que debes saber…

-¿Qué? ¿Qué sucede?

-Tiene relación con tu amigo… ¿Cómo se llama?

-¿Isaac?

-¡Sí, él! -hace una pequeña pausa para estructurar sus pensamientos y aprieta mi mano con más fuerza-. ¿Recuerdas que te dije que nadie acompañó a Emilia durante ese tiempo?

-Eso dijiste… ¿Qué tiene que ver Isaac con todo esto?

-Bueno… Emilia me dijo que ese chico siempre estuvo detrás de ella. Nunca le habló directamente, pero estuvo cerca en todo momento. De hecho, se dice que él y mi hermano pelearon a golpes antes de que se lo llevaran al hospital.

-¡¿En serio Isaac hizo eso?!

-No sabemos con certeza. Nadie estuvo presente y ninguno quiere decir nada de lo que realmente pasó.

-Creo que es demasiada información que procesar…

-Así que… esa es la razón por la que me iré. Visitaremos a mi hermano con toda mi familia. Estaré fuera por al menos unos tres días.

-Dudo mucho que pueda sobrevivir sin ti.

-¡Descuida, hablaremos todo el tiempo! Por fortuna, tienen internet para invitados, así que siempre estaremos en contacto.

-¿Lo prometes?

-Es una promesa -hace una maniobra algo extraña y nuestros meñiques terminan entrelazados-. Después de todo… Te amo…

-¿Qué…?

-¡¡¡Olvídalo!!! ¡¡No dije nada, lo juro!!