Nuestros ojos se encontraron en siete ocasiones antes de dirigirnos la palabra. Teníamos tanto en común que al final olvidamos cada una de esas cosas. Luché para mantenerte a mi lado, pero no tardé en perderte. Te dije todo lo que sentía, pero nunca lo llegaste a comprender. Esperé escuchar una palabra hacia mí, pero tus labios se mantuvieron cerrados.
Nuestros ojos se encontraron siete veces antes de todo terminara.