capitulo 3 "James"

me encontraba caminando por las calles de mi barrio, con los auriculares puestos y la música a todo volumen, Wolves de Selena Gomez retumbaba en mis oídos mientras imaginaba que esas calles en realidad eran los corredores de Norbridge. 

Me sumergí en un mundo paralelo, en el que no pasaba de desapercibida, donde me veían, me escuchaban y sobre todo, no hablaban de mi mal apariencia.

De repente, veía a lo lejos a los tres chicos que levantaba la mirada de cualquiera que estuviera cruzando por su camino, y lo mejor de todo, ellos me veían a mi.

Ian, Ander y James abrieron paso hasta donde me encontraba, y al unísono Hablaron

-Tengamos una cita esta noche-Los 3 apuestos chicos se miraron entre sí algo confundidos-que!? -volvieron a coincidir otra vez.

no tenía idea de lo que estaba pasando entre ellos, no musite ni una palabra, por que de mi nada salía, pero cuando quise hablar...

-Pense que les había quedado claro que este es mi territorio-Habló entre dientes Ian

-Lo siento amigo, pero esto no se trata de un territorio, se trata de una chica-Ander respondió

-Territorio o no, la que decide es ella-Dijo James y los tres dirigieron la mirada hacia mi dirección.

-yo... no entiendo de lo que están hablando-susurre 

-Sabes bien de lo que estamos hablando, Gianna-Ander se acercaba lentamente hacia mi

-Muy en el fondo,lo sabes-Ian repetía el mismo movimiento que Ander

-O simplemente.. en cualquier momento lo sabrás-James acaricio mi mejilla suavemente- solo escucha tu corazón Gianna, Escuchalo.

y luego, todo se puso oscuro, Wolves volvía a sonar a todo volumen y mis ojos repentinamente se abrieron. Todo había sido un sueño, un sueño bastante extraño.

Al parecer estaba tan cansada que cuando llegue de la escuela caí rendida en mi cama con los auriculares puestos, al menos eso explica parte del sueño. 

Me quité los auriculares y me dispuse a mirar la hora en mi despertador. Al parecer por mi sueño, que  prácticamente era un  fantasía, me desperté cinco  minutos antes de que el maldito despertador sonara, al menos ahora no iba a caer de la cama al tratar de apagarlo.

-GIANNA!-mi madre entro gritando  bruscamente a mi habitación haciendo que rodara al suelo envuelta de las sabanas.

esto era el maldito colmo de los colmos

-Mamá!-rezongue-puedes por favor tocar la puerta al menos? 

-Tal vez-se paro en frente de mi y comenzó a desenvolverme-si no te quedaras dormida para ir a tus clases de danzas.

-CARAJO!

 Me pare de inmediato y fui  directo hacia mi armario para buscar mi ropa de ensayo, la cual no encontré por ningún lado. 

Mamá- llamé sin recibir respuesta, al mismo tiempo que me paseaba por toda la casa buscando en cada rincón mi ropa- ¿sabes dónde está mi ropa de ensayo? 

-En tu armario Gianna-al fin habló mi madre

-ya he buscado y ahí  no está -grite para que me escuchara, pero no recibí respuesta alguna, así que me dirigí nuevamente hacia mi habitación para optar por otro atuendo.

me paré en seco cuando vi a mi madre sacando lo que estaba buscando justamente del mismo lugar en el que había buscado antes. 

EN MI MALDITO ARMARIO

-tal vez si buscaras mejor las cosas las encontrarias mas rapido-se dibujó una sonrisa burlona en su rostro mientras se dirigía hacia mi cama para estirar mi ropa.

-Al diablo-me largue a mi cama exhausta de buscar por toda la casa para nada-mierda tengo que ducharme-me pare inmediatamente para caminar rápidamente hacia el baño y darme  una ducha rápida.

-solo quedan 40 minutos Gianna-hablo mi madre a través de la puerta.

al terminar de ducharme, sali rapidamente para dedicarme a secar bien mi cabello, en la academia no estaba permitido ir con el cabello mojado, ya que perdía el movimiento

-30 minutos- volvió a hablar mientras veia esa novela turca que tanto le gustaba

corrí escaleras arriba hacia mi cuarto para secarme y vestirme, me puse la ropa interior más cómoda que encontré, mis shorts deportivos y el top con el nombre de la academia de danzas "Infinity" y una chaqueta para taparme un poco al salir a la calle.

-15 minutos-nuevamente hablo mi madre 

-MALDITA SEA!- corrí escaleras abajo para buscar mi maquillaje y cepillo para el cabello

puse una sombra color verde oscuro sobre mis ojos y un fino delineado, ademas de un discreto brillo en los labios. peine mi cepillo en dos medias trenzas y por fin estuve lista.

-Ya estoy lista-me pare enfrente del televisor para que mi madre me viera.

-Guau!-miró su reloj-has batido el récord chica!

-EN SERIO!?

-Claro que no, han pasado 25 minutos asique sube al auto ahora mismo.

al llegar a la academia, me lleve un sermón de mi profesor por llegar 20 minutos tarde, lo que significaba que, al finalizar la clase, tendría que quedarme ensayando yo sola para recuperar esos estúpidos 20 minutos. 

Al finalizar la clase, mi madre no podía recogerme, ya que después de dejarme aquí, iba de compras con Jennifer,  su mejor amiga, de la cual, nunca se separó desde que terminaron la preparatoria. Puede decirse que su amistad se mantenía como si de hierro se tratara, los años pasaban entre sus vidas, pero la amistad era inquebrantable, jamás se separaron. 

Mucho menos cuando papá nos abandonó. Yo tenia solo 10 años cuando se fue y nunca regresó, mi madre entró en una gran depresión, el era el amor de su vida, o eso es lo que ella decía.

-Estoy bien cariño, ve a descansar, hoy has cuidado mucho de mi- tomo el ultimo sorbo de té para después dejar su taza en la mesilla, me miro con cara de satisfacción,aunque  se que lo hacía para no preocuparme.

ver a mi madre las veinticuatro horas del dia acostada me partía el alma, no comía, solamente dormía y apenas se levantaba para ir al baño. prácticamente se había convertido en un muerto viviente.