Capítulo 26

"Tan fácil que es enamorarme
Y tan difícil olvidarte"

—Entonces

—Entonces.

Aiden aparcó frente al edificio donde vivía su hermano y apoyó su codo del volante para girarse hacia mí, ninguno de los dos quería bajarse del auto porque eso significaba volver a la realidad.

—Hablaremos con Nancy y Rupert juntos, luego tengo que ir a atender algunos asuntos pero cuando me desocupe te llamo, ¿sí?

—Está bien

—¿Que harás tú?

Me encogí de hombros

—Llamar a mi madre, soportar el interrogatorio de Ethan, quizá empiece a buscar casas por internet con Nancy, el otro día me dijo que no quería seguir en el apartamento que compartía con Bodric, que le gustaría que cuando mi madre y Alicia vengan, nos mudemos juntas.

Aiden ladeó su cabeza, intrigado

—¿Y tú entras en ese plan?

—Claro. Nancy va a necesitar ayuda con el bebé

—Pensé que tú y yo nos mudaríamos juntos.

Era demasiado irreal para mí todavía estar así con él, formando planes de un futuro juntos, cuando hace una semana pensaba que lo había perdido para siempre.

—Nos mudaremos, sí, pero en un futuro.

Una mueca se formó en su rostro

—No quiero esperar más para que vivamos juntos. Me gustaría que lo hiciéramos pronto. La casa está apta para que nos mudemos y luego vamos finiquitando los detalles de la decoración, he pensado en algunas cosas que estoy seguro que te gustaran, ¿Qué te parece?

¿Ahora si tenía ideas para la decoración?

—Todavía no podemos mudarnos. —comenté porque aunque me había encantado estar todos estos días con él, a solas, la realidad es otra.

Aiden se apoyó del asiento del coche y suspiró

—¿Por qué no?

—Nancy. ¿Se te olvida mi tía con embarazo de riesgo? No puedo dejarla sola.

—Ella puede venirse a vivir con nosotros también hasta que nazca el bebé

Me encantaba como sonaba el nosotros en su voz, sin embargo, sacudí mi cabeza en desacuerdo.

—Apenas está ajustándose a esta casa y a la compañía de Rupert, otra mudanza es mucho ajetreo para ella y tú sabes lo que significa para Rupert tener a Nancy aquí. Además, este departamento está más cerca del hospital en caso de una emergencia.

Aiden se frotó su sien

—No quiero seguir teniéndote lejos, menos ahora que estuvimos juntos estos días

—No vamos a estar lejos.

Apoyó su codo del volante y su barbilla de su puño

—¿Y cuándo llegue tu madre y tu hermana? ¿Qué va a pasar?

Recosté mi hombro del asiento, girándome hacia él.

—Tengo que estar con ellas, mi familia es lo primero, lo sabes muy bien. Nancy va a tener el bebé y Alicia va a pasar por un cambio muy grande al mudarse de país, a otro idioma, otra cultura, quiero estar con ella todo el tiempo posible para ayudarla a adaptarse y si voy a estar en mis clases de la universidad, mi tiempo será limitado.

—Por eso mismo lo digo, pronto empezarás el postgrado y...

Tomé su mano y la apreté.

—Hay que tener un poco de paciencia ¿no? Fuiste tú quien lo dijo

—No uses mis palabras en mi contra

—Solo estoy resaltando un hecho. No estoy diciendo que no nos mudaremos, solo que no será ahora.

Seguía con gesto desganado en su rostro

—Solo porque es Alicia puedo aceptarlo pero solo por un tiempo... reducido

—Tú dijiste que hay que estar bajo perfil, si alguien se da cuenta que te mudaste con otra mujer...

—Ya, ya, tienes razón. —Aiden suspiró— pero puedes dejar cosas en mi apartamento y puedes quedarte conmigo algunos días.... Podemos ir amoblando la casa y...

Apreté su mano, haciéndolo callar y sonreí.

—De todas formas pienso que... quizá deberíamos tomarnos las cosas con calma. Apenas regresamos y mudarnos de una vez, tan pronto, es precipitado, ¿No crees?

Aiden frunció el ceño y sacudió su cabeza

—No me parece precipitado, sé que quiero estar contigo y no quiero seguir esperando.

Lamí mis labios, enfocando mi atención en nuestras manos unidas, no era una persona con miedo al compromiso pero no iba a negar que mudarme y empezar una vida de pareja tan pronto, me generaba un poco de duda, para mí lo mejor era volver a conocernos. No pensaba igual que Aiden y de alguna forma tendríamos que llegar a un consenso.

—Vamos viendo —respondí y ante su expresión me incliné hacia él para darle un beso en sus labios — Quita esa cara, gruñón. Vamos, hablemos con Nancy y Rupert.

Cuando ingresé al apartamento de Rupert casi caigo desmayada al ver a mi tía, de pie, caminando, frente al estante de objetos raros de Rupert.

—¡¿Por qué estas levantada!? —chillé caminando hacia ella.

Mi tía se giró hacia mí y la expresión en su cara me hizo detener

—Pero mira quien apareció. ¡Tú y... Tú! —Miró a Aiden detrás de mí— ¿Les parece que es justo que ni un mensaje reportándose envíen?

Rupert sentado en el sofá, cerró el libro en su regazo antes de colocarlo a su lado.

—Dejé mi celular aquí —me excusé.

—Tu madre me tiene angustiada, que por qué no respondes, que donde estas. ¿Crees que es justo que yo pase por este estrés?

Rupert se levantó y frotó el brazo de mi tía con su mano

—Tranquila, Nancy. Respira

—Pero mírala, tienes la misma ropa que hace días. —Sus ojos se detuvieron en Aiden— ¿A ti no te da vergüenza traerme a mi sobrina así? ¡Con la misma ropa!

Aiden abrió la boca pero lo interrumpí

—Pensé que te daría gusto ver que estamos juntos

Estábamos juntos. Aiden y yo. Decirlo en voz alta, decírselo a otras personas era como.... Era como si me cayera un golpe de realidad, él y yo en una misma frase, era tan bonito que no pude evitar sonreír a pesar del regaño de mi tía.

Aiden colocó una mano en mi cintura, acercándome a él, queriendo decir en un gesto que sí, que él y yo estábamos juntos. Que éramos una pareja.