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La batalla

La batalla

 

 Pasaron unas semanas casi sin cruzarse, se sentía extraño estar sin Juan Pablo en la parada de colectivo, o en la casa de tía Pupe escuchando el martillar mientras el joven hacia algún arreglo.

Abigail todas las tarde llamaba a Bautista, ella era una prima presente con el mas pequeño de la familia, hablar con Bauti le hacia bien, era un niño que siempre tenia algo que contar y algo que preguntar,  cuando pasaba a ver a la pichoncita, le  llevaba antes los recortes de la tira de ·Clemente· que guardaba para el cada vez que en su casa compraban el diario. Esta semana había preguntado por Juan Pablo y Bauti contesto directamente.

 

-Esta llendo mas seguido de Don Mingo, esta ahorrando para mi cumpleaños parece-

 

-y como lo ves vos bauti, sigue enojado con Bambi?- Abi había preguntado directamente varias veces por el tema, con Bautista se podía hablar directo sin dar vueltas

 

-Ni habla de uds, ni de ella..., creo que si, que sigue triste, no creo que enojado, triste-

 

-y que pensas que pasaría si voy esta tarde a tu casa, llevo mas tiras de Clemente que guarde y hablo con el-

 

-Sos sorda vos ?, no te dije que va de Don Mingo casi todos los días?- dijo con tono burlón el niño - y no voy a estar tampoco voy al dentista con papa-

 

-Pues deja de masticar caramelos enano así el tío no gasta en dentistas- se rio Abi- ¿Bueno Bau, te llamo mañana?

 

Y así pasaban los días, sin Juan Pablo en el grupo a las chicas le faltaban recursos, ideas, acciones. Así que esa tarde se sentaron en el monumento de la plaza a pensar.

Estaban en eso, mirando el movimiento de alumnos pasar enfrente de ellas cuando comenzó la batalla.

Por la derecha una bandada de jóvenes con guardapolvos azules caminaban hacia el centro de la plaza, esto no les hubiera pareció extraño si por la izquierda no vinieran marchando también Juan Pablo y sus compañeros con gesto adusto, y apretando las reglas T.

 

En el medio entre las escalinatas quedaban las chicas y algunas resagadas del San Pio que juntaron sus mochilas y partieron indignadas, otra vez un quilombo en la plaza , dijo una, no van a dejarnos estar mas por acá.

 

Del grupo de los azules se adelanto un pibe alto y lleno de granitos, y como era de esperarse del los dueños de las reglas T se adelanta Juan Pablo.

 

Las chicas permanecieron en las escalinatas, Silvina mastico su sanguche sin inmutarse, Abigail se puso de pie y pego un grito

-¡Juan Pablo!- se quiso adelantar y encararlo, pero Silvina la sostuvo del cinto de su guardapolvo y la obligo a sentarse de nuevo.

 

-¿Que pasa Bombón?- dijo el muchacho-¿Ahora tenes mamita que te cuida?-

 

La risa de J. Pablo se escucho en toda la Plaza

 

-Que gracioso que sos, sos tan gracioso que me hacer reír el trasero- acto seguido y sin esperar respuesta continuo -lo que no me pareció tan gracioso fueron las pintadas al instituto, eso no me pareció tan gracioso- y se cruzo de brazos tirando un poco la cabeza para atrás mostrándose aun mas algo ante su enemigo.

 

-Que pasa muñeca, no voy a negar que me parecieron pinturas interesantes, pero no fuimos nosotros- también se acerco a J Pablo y con el todo su grupo- nosotros no queremos problemas con tu instituto y no nos interesan mas sanciones-

 

Se hizo un silencio en la Plaza, el murmullo de la calle ocupaba el ambiente, el muchacho continuo

 

-el nuestro tiene las mismas pintadas-

 

Juan Pablo miro a sus amigos.

 

-Eso tendremos que verlo “papiro”- dijo el joven-Tampoco queremos sanciones este año por pelear con uds por Boludeces, tenes idea...-

 

-..de quien fue?...no no tenemos idea... sugiero que nadie acuse a nadie con sus directivos...tengamos una tregua hasta saber quienes fueron- y extendió la mano

 

Juan Pablo estrecho la mano y asintió

 

-Sera una Tregua...Una semana.. ni un día mas ni un día menos, pasado el plazo nosotros vamos a nombrarlos y sobretodo a vos “Papiro”, vos y tus amigos tienen antecedentes y sanciones...-

 

-Lo se como olvidar aquella obra de arte sobre la canchita- y se largo a reír junto a sus compañeros- fueron las mejores 10 amonestaciones de la vida- 

 

Por en medio de los grupo pasa Silvina, arrastrando a Abigail, se detiene justo en medio y dice

 

-Boludos-

 

Y sigue su camino hacia la parada.

 

Papiro la mira retirarse, mientras que el grupo de Juan Pablo se dispersa ...

 

-Che Pablo, esa chica...la morocha..-

 

Juan Pablo se detiene y le dice

 

-Esa chica para vos es el Papa Juan Pablo segundo-

 

-inalcanzable....- dice Papiro sin sacar los ojos de Silvina.




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