CAPITULO XI

Keydrien

El despertador siempre tan eficiente, lo apago y me dirijo a la ducha, cepillo mis dientes y me alisto para el día

Antes de tomar el maletín, suena mi celular

-Mi amor-

Por su tono sé que está cabreada

-Mi vida, ¿Cómo amanecieron? -

-como si te importara-

Me rio, la imagino haciendo puchero

-claro que me importa, ustedes son lo más importante que tengo-

Suspira -estamos bien, muy preocupada, te llamé como 3 millones de veces y no me contestaste, no es justo Key-

-perdona amor, anoche de improviso capté un cliente nuevo, pude pedir el 15% de las acciones porque no ser cliente de la compañía, nos irá muy bien, la empresa perfila un buen potencial-

- ¿seguro que no estabas con una chica? -

Trago grueso

-Linda, ¿Qué te hace pensar eso? -

-no me contestaste las llamadas-

- ¿no pudiste pensar que estaba, no sé durmiendo?, fue un viaje largo-

-una vez me dejaste sola–

Me apuñala el corazón sus palabras, ese fue el peor día de mi vida

-No me contestaste las llamadas y volví a ese día- suspira – olvídalo, no quiero traer errores del pasado al presente, es que aquí sola mi mente tiende a jugarme sucio y ponerme a imaginar cosas que se ven tan reales-

No discuto, no tengo como remendar el pasado y sentirla triste es un recordatorio del hijo de puta que soy

-así es la mente Carmen-

Si ella supiera que estoy pagando con creces lo que pasó ese día

-pero ya, cambiemos de tema, revisé tu agenda, en la noche te diré más o menos que puede llamar la atención, los puntos que entiendo son fuertes y cuáles son los débiles, planearemos estrategias para que sepas por donde atacar duro y certero-

-Eres la mejor empleada del mundo mundial-

-lo sé-

-y lo mejor es que lo haces gratis-

-ayudarte y estar contigo me hace feliz, ese es mi pago, te amo tanto Key-

-lo sé amor, yo también estoy igual o peor que tú de enamorado-

Puedo sentir que está nostálgica, apuesto mil a uno que cerrando la llamada se echará a llorar

-lo lograremos, me dice, pasaremos estas pruebas y serás feliz-

- ¿seré? ¿solo yo? -

-Ya yo lo soy-

Se me nublan los ojos

-vamos, manos a la obra, a trabajar-

-haya vamos-

4 reuniones, me ocupan el día, al salir de cada una recibo mi llamada de aliento y de felicitaciones, Carmen sabe lo que me afecta estar lejos de ella y hace todo lo posible para que yo no me sienta solo y para que la sienta siempre a mi lado, he de confesar que en ocasiones, cuando estoy muy nervioso o cuando me está costando convencer un cliente, ponga las manos bajo la mesa de donde me encuentre reunido y aprieto las manos imaginarias de Carmen, miro a mi lado y la veo sonreír

**

Cansado llego a mi habitación, me baño, estudio los clientes que visitaré mañana y sin cenar estoy tan agotado que duermo, no sé si es el cansancio que me traiciona, pero siento que Carmen me arropa y con Ney entre nosotros me abrasa y se echan a dormir

El despertador, si no fuera porque es mi celular, hace mucho, pero mucho me hubiera desecho de él, aunque no lo culpo por cumplir su labor, pero lo odio

Pido desayuno a la habitación, muero de hambre, me ducho, para cuando salgo están tocando la puerta para traer lo pedido, le doy las gracias al empleado y le paso la propina.

Enciendo la TV, actualizándome de lo que pasa en el mundo, desayuno, me cambio, cepillo mis dientes y

-Aló? -

-papiii-

-hombrecito, ¿Cómo estás? -

-mien-

- ¿estas cuidando de tu madre? -

Escucho a Carmen al otro lado, -te está diciendo que sí con la cabeza, sea cual sea tu pregunta-

-te amo mi bebe-

- ¿me pompaste mi lelado?-

-sí, pero se derritió-

-siiiiiiiii- lo escucho saltar soltando el teléfono y lo toma su madre

- ¿Qué le dijiste que se puso tan feliz? -

-que le compré su helado y se derritió-

-pobrecito, está tan feliz, si supiera-

Me río

- ¿Qué tal amanecieron? -

-como siempre, felices-

Suspiro

-ya debes colgarme lo sé, quiero que tengas un buen día y que sea provechoso, te llamaré al terminar… -