Don't Mess With Her

Capítulo 05 - Matthew cabeza hueca.

 Mackenzie

-¡Matthew Smith! ¡Date por muerto!-Grité a todo pulmón para que me escuchara en cualquier parte que esté.

¿Qué pasó?

Pues, el muy idiota decidió que su venganza sea tirarme un balde de pintura rosa Barbie en la entrada del internado.

Pero es que yo lo mato.

De esta no se salva.

Nadie a ganado una guerra contra Mackenzie Miller.  Él no va a ser la excepción.

Supongo que le gusta la guerra. Pues yo voy a hacer que esta guerra sea su peor pesadilla.

Mi venganza va a estar dividida en 3 partes. No lo voy a dejar descansar, y no le va a dar tiempo de devolverlas hasta que yo haya terminado con mis venganzas.

Matthew Smith se va a dar cuenta que no hay posibilidades de que él gane esta guerra.

Porque esta la va a pagar caro.

-No puedo creer que se atreviera a hacerme esto.-Exclamé entrando cuando a Annie a la habitación.

-Yo tampoco, pensé que con la advertencia que le di iba a terminar con las bromas.-Admitió.

-¿Le advertiste?-Le pregunté confundida, ella asintió.

-No lo sabía.-Aseguré.

-Lo hice el día que me pidió disculpas, ese mismo día me pidió que lo ayudara con la venganza en contra de ti. Obvio le dije que no.-Confesó.

-Que fiel eres, estúpida-Le sonreí, ella rió.

-Eres mi amiga, no te puedo traicionar así. Además, no quiero terminar calva.-Reímos-¿Qué le piensas hacer?-Preguntó.

-Ya verás, solo te diré que va a pagar muy caro su atrevimiento. Muy caro.-Sonreí maliciosa.

-Esa sonrisa no me gusta-Admitió mirándome preocupada, se quedó pensando y luego se sobresaltó.-Se me olvidó contarte que ayer un chico que se llama Chase te llamo a tú celular mientras dormías, dijo que era muy importante.-Mencionó.

-¿Por qué no me lo dijiste antes?-Le pregunté en tono reproche mientras cogía mi celular para marcar el número de Chase.

-No lo sé, se me olvido.-Rodé los ojos-Voy a la cafetería con Matt mientras tu hablas con tu Amor-NoAmor.-Reí.

Annie se la ha pasado todos estos día refiriéndose a mi amistad con Chase como Amor-NoAmor.

Está loca.

Mis pensamientos son interrumpidos por la voz de Chase al otro lado del teléfono.

Llamada Telefónica

-Hola Chase, Annie me dijo que ayer me llamaste. Dijo que era importante, ¿Para qué era?-Le pregunté curiosa.

-Ah no, nada.-Contestó nervioso. Es obvio que esta mintiendo, yo conozco como nadie a Chase y sé perfectamente cuando miente.

-Chase, sé que me mientes. Dime que me querías decir.-Insisto.

-No te estoy mintiendo Mack.-Odio cuando me mienten.

-Chase tú más que nadie sabe lo que pasa cuando me mienten.-Le advierto.

-¿Qué me vas a hacer? ¿Me vas a hacer una de tus venganzas?-Me retó. Él era la única persona en el mundo al que no le daban ni un poco de miedo mis venganzas.

-No. Pero si no me quieres decir eso, no me vas a decir nada más. Adiós.-Corté.

Fin de la llamada telefónica

Odio que Chase y yo nos molestemos, pero tampoco le voy a permitir que me mienta en la cara.

Bueno. No es exactamente en la cara.

Pero es algo parecido.

Nunca nos enojamos el uno con el otro. Jamás.

Me recuesto en la cama y empiezo a pensar en la venganza en contra de Matt.

Ya quiero verle la cara cuando empiecen las venganzas, De seguro esos sus ojos van a reflejar fuego de la rabia.

Sus ojos.

Esos ojos tan hermosos.

Espera, ¿Qué?.

Mackenzie, tú lo odias. Tú no puedes pensar que tiene ojo lindos.

Cierto.

No puedo.

Sácate eso de la cabeza.

Aparte de que es un idiota total.

Un idiota muy guapo.

Mátenme.

.

.

.

-Oye Mack, ¿Qué vas a hacer este sábado?-Me preguntó Annie.

Los sábados son nuestros días "Libres". Son los días en donde podemos salir del internado. Podemos ir de fiesta, de compras o al cine. Podemos hacer cualquier cosa, pero sin salir de la ciudad y tenemos que llegar a dormir al internado ya que a las 7:30 am del domingo van a pasar revisando cada habitación.

El sábado pasado me quedé en mi habitación comiendo galletas y viendo películas. No me dieron ganas de salir. En cambio Annie se fue a una fiesta con Matthew y sus amigos.

-No sé, supongo que lo mismo que el anterior.-Respondí.

-¿Es en serio?-Me preguntó Annie, asentí-Liam me invitó a una fiesta, dijo que te invitara, ¿Quieres ir?-Me preguntó, Me encogí de hombros.

-No lo sé, lo voy a pensar.

-Mack, el sábado pasado me dijiste lo mismo y no fuiste.-Se quejó.

-Lo sé, pero esta vez te prometo que si lo voy a pensar.-Aseguré.

-De acuerdo, ¿Me quieres contar porque estas tan seria?-Me preguntó.

-Es por Chase-Rodó los ojos-Hoy cuando lo llame nos peleamos, pero fue por una estupidez. Él me estaba mintiendo y a mi no me gusta que me mientan. Entonces le dije que si no me iba a decir la verdad mejor no me decía más nada y le corté.-Le expliqué.

-Siempre estás hablando de ese tal Chase. Ya es hora de que por lo menos se digne a visitarte, creo que de tanto que me hablas de él lo conozco más que él mismo.-Río.

-Es que lo quiero mucho.

-Pues entonces háblale y resuelvan las cosas-Dijo obvia, puse los ojos como platos.

-¿Acaso estás loca?, él es el que me tiene que llamar a mi.-Contesté indignada, rodó los ojos.

-Dios, pero que chica más orgullosa.-Se quejó.

-Yo no soy orgullosa.-Mentí.

Eres muy orgullosa.

Ya lo sé.

-No, claro que no.-Dice sarcástica.

-Hola Annie-Saludó Matthew a Annie mientras se sentaba en nuestra mesa.

Chico mas confianzudo.

-¿Quién te dijo que te podías sentar?-Le pregunté mirándolo desafiante.



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En el texto hay: adolescentes, bromas, guerra

Editado: 29.01.2024

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