Cap 31: Batalla

Plomad: Todo están lis- (explota una bomba y sale humo en la ciudad)

Morad: Plomad, la pelea será en la ciudad

Plomad: (sorprendido) ¡Kurt!

Kurt: a la orden (silva)

Lobos: (aúllan y se dirigen hacia la ciudad)

Plomad: Roger es tu turno

Roger: si, ¡manada, por Yesli y Jhon!

Osos: ¡sí! (se van hacia la ciudad)

Lowie: ¿qué hay de mí?, nunca me lo dijeron

Plomad: tú ayuda a Morad (se va hacia la ciudad)

Lowie: ¿qué debo hacer?

Morad: agarra un arco y vámonos

Lowie: si

……

Kai: no tardaron mucho en llegar (sonríe)

……

Catalina: ¿escuchaste algo Natalia?

Natalia: si y me da un mal presentimiento

Catalina: algo me dice que no vayamos a las clases

Natalia: sabía que los lunes son de mala suerte, vámonos

Romildo: ¿dónde creen que van? (se coloca al frente de ellas)

Catalina: ¿tú no eres el cantante?

Romildo: ustedes me sirven como rehenes y deben quedarse aquí (se va)

Natalia: Analy no vengas (se esconden por unas paredes)

(Suenan las piedras que hacen caer los gigantes y los gavilanes)

Samael: (los mira) ¿por qué?, ¿por qué los gigantes hacen esto?, somos pacíficos…tengo que buscar a Natalia (corre hacia el colegio)

……

Policía: ¡váyanse todos!, ¡nos encargaremos de estos demonios!

Plomad: no, ustedes busquen un lugar seguro

Policía: ¿Plomad?

Morad: escóndanse por favor

Policía: si, gracias (se suben a sus carros y se van)

…..

Kurt: ¿¡dónde estás líder Kai!? (lo busca)

Kai: Aquí

Kurt: (voltea a verlo) sabes que odio que seas de mí misma especie

Kai: genial, pensamos lo mismo

Roger: las batallas entre demonios son afuera del mundo mortal

Kai: oh, también estas tú

Roger: sabes que estoy aquí solo para destruirte

Kai: pero que miedo, ¡gavilanes, agarren sus piedras y lancen!

Gavilanes: ¡sí!

Plomad: ¡todos tengan cuidado! (advierte)

Kai: (se ríe)

(Algunos escapan de las piedras y otros no, Plomad, Kurt y Roger con sus manadas comienzan luchar, mientras con Morad y Lowie)

Morad: hay que luchar

Catalina: ¿Dorad?

Morad: (la mira) ¿qué hacen aquí?

Natalia: estábamos yendo a las clases, pero un demonio nos amenazó de quedarnos aquí