POBRE REBECA

El regreso de Dante después de aquel viaje tuvo un gran impacto, a ojos de todas las chicas se veía más hermoso “Mira que bello se ve” “está más hermoso” “se ve lleno de luz”- eran las frases que se escuchaban alrededor de toda la empresa y en cuestión de un día la frase “Dante saint regreso más perfecto y hermoso”  retumbaba en cada rincón de la ciudad, pero no exageraba  Dante había regresado y trajo consigo una belleza inigualable, ese bronceado lo hacía ver tan sensual y su nueva sonrisa ladina que deslumbraba, el rubio mantenía ahora un aura tan encantadora que parecía un arcángel. Realmente levantaba suspiros a su paso. Volvió y más hermoso tienes que verlo, ven rápido aún ella no llega-mediante  una  llamada aquella  recepcionistas decía con tan fulgor y emoción a alguna persona detrás de la línea  - sí, tiene un  bronceado MMM, te derretirás al verlo ven ya- aquella mujer sin duda hablaba del señor Dante pero ¿a quién le decía todo aquello?, quizás solo era una amiga, no olvidemos que a pesar de ese frío temperamento él era uno de los chicos más codiciados de la ciudad y que muchas mujeres matarían por tener su atención, aunque ya tenía pareja, muchas seguían detrás de ese hombre y de su dinero. Ese día Dante rápidamente quería actualizarse con todo lo que tenía que ver con respecto a la empresa, por lo que se sumergió tanto en eso que no se dio cuenta que hora era. Ya iba siendo las 3 de la tarde el rubio en todo el día solo había tomado un café y jugo, su vista era sumergía en aquellos papeles hasta que su móvil sonó “estoy cerca, te llevare a comer algo, y Dante no es una pregunta te espero abajo” el rubio no pudo reír al leerlo pero antes de poder responder un nuevo mensaje llegó “15 minutos abajo”. Ahora me da orden-dijo para sí mismo pero leo quien estaba con él alcanzó a escuchar e hizo un gesto que el rubio tradujo  como una pregunta a lo que este negó moviendo su cabeza sin dejar de sonreír –vamos Jade viene por nosotros – al decir aquello leo entendió lo que pasaba ,mientras que a la empresa D&H una despampanante mujer entraba y se aproximaba a la recepción, los hombres allí presentes no ocultaron su mirada llena de asombro no se bien  si era porque se veía hermosa o porque para la época la vestimenta no era muy apropiada o común está lucía un gran sombrero rojo y un vestido que arrastraba, sus senos frondosos que dejaban solo un poco a la imaginación y unas gafas negras, al principio saber quién era fue turbio e inquietante , aunque su tono de voz y la confianza con la que se dirigió a  Amanda la recepcionista, nos aseguraba  dos cosas 1. fue con quien la joven habló y 2. esa era rebeca. ¿Dónde está? –su voz chillona era inconfundible  e insoportable y ese ego de diva solo podía ser ella -señorita Rebeca-   los susurros por parte de los empleados no se esperaron “ahora tiene nuevo look” “quizás ha visto mucha películas” “si sabe en qué época estamos” estas  eran algunas de las frases que decían,  más sin embargo a  Rebeca sólo le interesaba llamar la atención de donde llegaba sin importar como cuando solo con ser el centro de atención del lugar ella se sentía feliz y en  la  cima. Las puertas se abren y dos guardias ingresas detrás de ellos venía caminando Jade cual Diosa que no deja de brillar, dejando de lado a la despampanante mujer las miradas se enfrentaron a esta morena –“qué hermosa” “jamás la había visto con pantalón”  “tiene un cuerpo hermoso” los comentarios no pararon al paso que está caminaba  acercándose a la recepción sin darle ninguna atención a la mujer a su lado, quien la miraba de pie a cabeza asombrada por aquella  nueva forma de vestir, eso y los comentarios que no paraban hicieron que el rostro de Rebeca se pusiera rojo del enojo e ira –“con razón el señor se enamoró de ella” “es hermosa”  “hacen una pareja divina”-  más sin embargo al repararla pudo ver   ese anillo en su dedo era el toque exacto y el mismo que  anunciaba el compromiso entre la joven pareja  y fue el toque especial que hizo a rebeca enloquecer, ella  colocó su mano derecha sobre el hombro de Jade y la empujó. -Siempre supe que eres una ramera de lo peor, solo quieres el dinero de Dante –aquellas palabras hicieron que la morena tomará en cuenta a la mujer de rojo y la mirara hasta notar cierta familiaridad. ¿Rebeca?-dijo aún insegura y con un tono apacible que sonaba más como burlón o que rebeca así lo sintió y se acercó a la morena con sus ojos enrojecidos del rencor  hacia esta Di la verdad nunca haz amado a Dante – los gritos de la mujer alarmaron a toda la empresa y un murmullo que divulgaba una discusión entre Jade y rebeca llegó a los oídos de Dante quien ya venía rumbo a la recepción, al llegar puede ver a Rebeca insultando a Jade lo que lo hizo molestar más  al rubio quien quiso intervenir pero leo le detuvo –Jade puede espera- Dante miró una vez más y Jade se veía tan calmada que quiso dejarla resolver por sí sola aquel tema ,pero aquella tranquilidad se vio alterada al ver como la mujer golpeada a Jade , los guardias corrieron hacia Rebeca pero la morena los detuvo levantando su mano ¿Estás contenta? – dijo y caminó hacia Rebeca con tal altura e imponencia que esta   retrocedió- no temas –pronunció la morena y su voz se escuchaba segura y fuerte  -me has insultado y golpeado, haz intentado difundir rumores sobre Dante y sobre mí, los cuales no funcionaron, te has hecho víctima y victimaria con aire de pena y lastima pero  al verte así vestida indica que ahora buscas parecerte a mí ¿o me equivoco?– aquel comentario quizás fue el más todos rieron en ese momento incluso la morena que trato de no perder la compostura- que tu no creas en mi amor por Dante no significa nada, entiéndelo de una vez, no eres nadie porque así lo quisiste, te vendiste una vez por dinero, alardeas de tu gran vida, pobre y vacía. Dante no espero más y se acercó rodeando desde atrás la cintura de su mujer– solo necesito que alguien crea en mí para llegar lejos y se feliz y ese alguien es Dante- dijo la morena con mucha  confianza  mientras  que el rostro de Rebeca se hizo rojo de fulgor y sus ojos estaban marcando el gran odio que sentía por la morena que no dudó en lanzarle una bofetada a esta pero Dante levantó el  brazo  para protegerla  y el golpe lo recibió este, quien miró fríamente a Rebeca, aquel sujeto desprendía hacia la mujer el aura más escalofriante  y sin decir ni una palabra giró  dando la  espalda  a rebeca quien fue agarrada por los  guardias sacándola del lugar. No puedo sentir más orgullo –dante volteo a su mujer y sus grandes manos fueron a esas mejillas para dejar un suave beso en sus labios, calmando así el cuerpo y corazón de la morena, porque aunque no lo notaron Jade temblaba del terror no era de naturaleza tan salvaje suponemos por lo que con aquel abrazo quería que se sintiera segura. Por la noche mientras que Leo, Dante y Jade disfrutaban de una cena y una charla muy amena, Todo aquel espectáculo se expandía por las redes como un virus mortal dejando a Rebeca tan abajo desprestigiando no solo a esta, sino a su esposo y todo el corporativo, los rumores y comentarios sobre  el poco respeto y amor hacia su esposo y su locura  por buscar a un hombre comprometido, era el título de cada búsqueda o charla ¡PUEDES TOMAR, MAL GASTAR MI DINERO, ROMPER Y HASTA TENER MILES DE AMANTES PERO EN LA PRIVACIDAD, ESTO REBECA ME DEJA COMO EL HOMBRE MÁS IDIOTA Y CUERNUDO! –gritaba el viejo dentro de la habitación  mientras lanzaba a su paso todo lo que hallará al tiempo que  rebeca lloraba no por miedo sino por odio a jade y la humillación vivida - te lo dije tonta mujer –esta vez se acercó a ella y su mano agarró fuerte el cuello de Rebeca- ¡JAMÁS SERÁS COMO ELLA! ¡MALDITA LA HORA EN QUE ME CASE CONTIGO!- Gritó la mujer con tanta fuerza que el viejo sacó su mano y golpeó el rostro de está  por primera vez, la mujer parecía en shock jamás se había imaginado aquello, pero el viejo le tomó del brazo y lanzó sobre  la cama subió sobre ella y sin más empezó a subir aquel vestido y quitar las bragas, Rebeca entre  sollozo suplico a su esposo parar pero este hizo caso omiso a sus súplicas y la penetro de una estocada, la mujer sintió un dolor quizás era la falta de lubricidad, aquel viejo no se contuvo y esa noche golpeo y mordió a rebeca mientras la hacía suya. Ya  al amanecer cuando Rebeca despertó  miró a su alrededor estaba sola giró su cuerpo un tanto adolorida   para levantarse e ir a la ducha, al salir solo se colocó la salida de baño  y lentamente fue a la puerta pero al intentar abrirla le fue imposible y empezó a gritar. VIEJO ABRE ABRE- decía  mientras golpeaba la puerta, había pasado más de una hora  hasta que por fin esta se abrió y el esposo de Rebeca junto a sus dos guardias estaban de pie frente a Rebeca.   ¿Qué pasa esposa? ¿Acaso te sientes sola? –decía en tono de burla y el junto a sus guardias entraban, esta vez traje amigos para la diversión – Rebeca entendió aquellas palabras e intentó cerrar la puerta más uno de los guardas la empujo, haciendo que esta los mirara esta vez con tanto miedo que sus pupilas se agrandaron  y retrocedió pero  Luis uno de los guardias la logra sostener  agarrando con fuerza a esta de los brazos la colocó justo frente del viejo , quien mantenía una risa frívola y maliciosa, mientras miraba el cuerpo marcado de su mujer.