Bendito Horóscopo

El profundo amor que una vez compartí contigo, se disolvió milagrosamente como un cubo de azúcar, la espina que tengo clavada en mi pecho escondido duele cada vez más, creo que ya no debo creer en esos tontos horóscopos, me pregunto qué sucedería si nos fuéramos muy lejos, ¿eso bastaría para ser feliz? Mis recuerdos son siempre hermosos, pero no me alimentan, no llenan mi estomago esta noche debería ser triste, me pregunto por qué, no estoy derramando ninguna lágrima, ya me lo imagino.

Olvidarte ha sido mi mayor reto en la vida, recordar lo que vivimos y saber que lo dejamos atrás, pensar que ya no habrá momentos como esos, dejar de soñar contigo, olvidar que nuestros signos zodiacales decían que éramos el uno para el otro, al parecer una vez mas el universo fallo, así como el fin del mundo en el 2012. Pero tonto yo al creer en ese estúpido de Walter mercado una vez más… si ya me había pasado antes.

Pero no tengo la culpa de caer una y otra vez, la verdad siempre pensé que eso era cosa de chicas, y un día me puse a leerlo de curioso y casi sentí que me espiaban, decía todo lo que yo pensaba y como me sentía, bueno al menos eso pensé hasta que fallo la primera, segunda, tercera, cuarta, quinta, ahh… bueno el punto es que no creo en eso de los horóscopos nunca más, porque siempre termina todo mal, y ya estoy harto de fracasar en el amor.

Eso de que somos compatibles, solo funciona con los softwares de las computadoras, yo no soy una máquina, como va la gente a ponerse a esas vainas, la verdad ni lo comprendo, no tengo idea de lo que pasa es sus cabezas, ¿pero que va quien soy yo para juzgar?... en eso entra una chica al Café donde escribía este poema y me pregunta, crees en los signos?... eh Yo oh si claro, soy Capricorniano y tú.