EL amor.
Cosa de locos, que buscan usar sus imaginaciones más allá de la vida y crear una emoción que pueden darte vida y quitarla en un segundo, haciendo que tu muerte sea más del alma que de la carne. Lo triste es que lo sabes y lo sabías desde antes que tus chances son como el infinito pero en ambos lados de la moneda, dándote el refugio de un quisas mientras de comes vivo, pero eso es cosa del amor, asi de loco puede llegar a ser amarte.
Hay veces que creo que solo pasa con los que quieren salir de este universo, porque el amor puede crearte esa paraíso que los religiosos siempre han predicado, dejando que tu corazón deje de latir pero que al mismo tiempo estás más vivo que nunca, es como si ella con su presencia me de vida, sus ojos negros como la noche silenciosa, que solo me invita a su paz, lo se hay cosas que no se pueden explicar, la ciencia de las emociones no siempre tienen respuestas, y el amor es una de ellas.
Hay amor porque dueles, como dueles, con ganas de solo decirme que no debo aferrarme a ti, porque al final siempre hieres, aunque regreses una y otra vez, ya está prescrito lo que pasara, solo que a mi tonto corazón eso le importa poco, porque el cree que amarte es una de las aventuras más peligrosas que existen, y nadie a inventado protector para el corazón, así que el 99.9 por ciento de los jugadores tienen chances a quedar destrozados internamente, con poca probabilidad de volver a amar, pero al final como todo peligro adicto como el alcohol, llamando al consumo de eso que llaman amor.