Me disculpé con las personas de la cafetería por el ruido que estábamos haciendo y también me disculpé con el chico llamado John por haberlo "acosado". Terminaron las clases y me dirigí a casa. Fue un día bastante agotador de alguna manera.
—Hija ¿cómo te fue?— preguntó mi madre.
—No estuvo mal— respondí con una risa nerviosa.
Lo que quería era ya acostarme.
Mientras leía en mi cuarto escuchaba cómo mis padres se decían piropos; el amor de mis padres era el que yo más respetaba y admiraba, si alguien los veía se notaba a simple vista que ellos se amaban de una manera tan intensa y pura. Yo soy su única hija, y nunca me ha interesado tener un hermano ni a ellos tener otro hijo, mis padres me han enseñado tantas cosas y yo he sido muy feliz desde que tengo memoria, hemos pasado muchos momentos inolvidables como familia, yo amo la vida que estoy teniendo.
8 meses después...
Bueno, mi vida sigue siendo maravillosa, tengo a los mejores padres, a las mejores amigas y al mejor novio de todos, y que no falte el mejor historial académico. Falta muy poco para terminar 4to semestre y ya sólo me faltará un año para terminar la preparatoria, qué felicidad, así es.
Hoy es un día común en el que se hace un pequeño baile de convivencia en la prepratoria. Mis amigas y yo nos estamos arreglando en mi casa.
—Beca ¿pasará por tí Brayan?— preguntó Silvana.
—Puede ser, no me avisó— respondí seria.
—¿y eso?— preguntó María Fernanda.
—...
—Basta chicas, no es momento para hablar de eso— respondió Kareli.
—Exacto, no la presionen— dijo Ximena.
—Bueno, cambiemos de tema. ¿Llevarán a alguien al baile?— preguntó Ximena emocionada.
—A mí me invitó un chico de otra clase— respondió Silvana alegremente.
—¡Vaya! Eso es genial Silvana ¿aceptaste, cierto?— preguntó Kareli sonriente.
—Por supuesto que lo hice— respondió Silvana con tono algo egocéntrico.
—Yo iré con James, el que está en mi clase— dijo María Fernanda.
—¡¿James!?— gritaron las tres sorprendidas (Kareli, Ximena y Silvana).
—Ehh, hablas del famoso y guapísimo James Johnson ¿verdad?— dije.
—Ese mismo– respondió Fer.— Al parecer le intereso.
—Suertuda— dije contenta.— y tú Ximena ¿con quién irás?.
—Estoy pensando invitar a un chico de otra clase— dijo algo tímida.
—Vaya ¿quién es el afortunado?— preguntó Kareli con tono de carrilla.
—John Adams— respondió.— ¿lo conocen?
No podía creerlo, era el John de hace 8 meses, pero bueno, no sé por qué debería importarme.
Terminamos de platicar y de arreglarnos para dirigirnos a la fiesta, Brayan no pasó por mí lo cual se me hizo muy raro.
En la fiesta...
Mi novio no se presentó a la fiesta, no tenía idea del por qué, habíamos acordado venir juntos. Me sentía mal y no me estaba divirtiendo. Fer, Kareli y Silvana estaban con sus parejas, al parecer a Ximena no la aceptaron pero no tardó mucho en conseguir a alguien con quien bailar; en cambio yo, tenía que serle fiel a mi bello novio, así que mejor salí a tomar algo de aire fresco.
—Hey— escuché una voz de hombre detrás de mí. Era John Adams.
—¿Estás sola?— preguntó.
—Si— respondí.
—¿y tus amigas?— preguntó extrañado.
—Están con sus parejas— respondí.
—Ya veo— dijo.— Una de ellas me invitó a bailar pero no acepté.
—¿Por qué?— pregunté.
—No es mi tipo— respondió y sonrió.
—¿En serio? Entonces, ¿qué tipo de chicas te gustan?— pregunté intrigada. No sé por qué había preguntado eso, no debería importarme.
En ese momento, me arrinconó a la pared, me miró y me sonrió de una manera coqueta.
—Mmm ¿por qué te importa qué tipo de chica me gusta?— preguntó y en ese momento acercó su cara a la mía.— Acaso ¿te gusto?— me susurró al oído.
—¡Hey! Qué te pasa— dije y lo alejé. Rápidamente me volvió a arrinconar de nuevo y me dio un beso en la mejilla.
¡¿Qué rayos está pasando!?. Pensé.
Continuará...