⸸13⸸ Arte Budú

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Aurora

Bajo del auto y entro a mi aquelarre para ver como estan practicando mis alumnos. La verdad yo sé que ganaran la batalla y seremos el aquelarre dominante entre todos los demás, justo como lo llevo planeando desde hace casi doscientos años. Entro y veo a profesores enseñando las artes del budú en los estudiantes destinados a pelear a finales de noviembre, aunque por las desintegración de el Consejo esto sea mucho antes. 

Cuando llego a mi oficina resivo una llamada al telefóno y decido contestar

—¿Hola? —pregunté mientras contesto

—Hola Aurora —reconocí la voz muy rápido, era el líder del aquelarre Zelta, Eliphas 

—¿Qué ocurre, a qué se debe tu llamada? 

—Escucha Aurorita, nuestro consejal a fallecido y ni sabes que encontramos... Un muñeco de budú, te imaginas la desconfianza que nos genera eso, espero que tengas una buena excusa o dejaremos de ser aliados y nos volverémos rivales

—Escucha no tengo tiempo par amenazas jovencito, en todos mis doscientos cuarenta y seis años nadie me ha amenazado, bueno de momento no puedo probarte nada pero dime que podría hacer para ganar tu confianza otra vez y que no hagas algún atentado ante mi gente

—Eso es muy fácil, ataca a las brujas blancas —entonces colgó el teléfono y yo no sabía que hacer

Debo proteger a la gente de mi aquelarre pero no quiero ser la primera en atacar. La descición que debo tomar es muy importante y entonces escojo lo correcto. 

Lo que tengo planeado es algo por lo que talvez mucha gente me odie pero lo haré de todas formas. Me levanto de mi escritorio y me dirijo a donde las chicas están pasando clases y tomo un registro, como hay veinticinco veo el registro y elijo a la chica que tiene la peor calificación de la clase, Estefanny. Entro al salón y le digo que la quiero ver en el ático en media hora, ella acepta y yo me voy de ese lugar.* Subo al ático y dibujo un pentagrama en el piso con pólvora y pongo una vela de color gris en cada punta de la estrella y tomo un libro de origen Zelta y mientras escucho que Estefanny sube las escaleras pongo una silla en medio del pentagrama, ella me mira de manera extraña y cuando se comienza a ir porque nota mis intenciones yo uso una palanca y cierro la puerta.

—Eh... disculpe pero quiero irme —dijo ella un poco alterada

—Escucha Estef, esto es por un bien mayor, te reviviremos en un par de meses cuando todo se normalize otra vez, y no sentirás pasar el tiempo. ¿Aceptas?

—¿Qué tengo que hacer?

—Sientate en la silla y cierra los ojos — Estefanny siguió mis sencillos pasos y yo comenze a ejecutar el plan

Entonces tomo el libro y digo una palabra en arameo para comenzar el ritual, derrepente la pólvora empieza a brillar y el fuego de las velas empieza a subir, yo tomo el libro y empiezo a golpearla brutalmente con el libro hasta que derrepente toda la habitación se vuelve negra y veo como derrepente Estefanny pone los ojos en blanco y su piel se vuelve extremadamente pálida, sus uñas se volvieron negra y su pelo comenzó a aclararse a un tono rubio yendo para el blanco

—Bueno esto fue rápido —dijo un ser extraño del cual solo escuchaba su voz —Dime Aurora... —él soltó una pequña carcajada —¿quieres otro favor?

—Sí, este será el último

—Bueno cumpliste tu parte, ahora... ¿Qué deseas?

—Quiero poder, pero no para mí, sino toma una porción de poder y repartelo en todas las personas que se encuentran aquí

—¿Y por qué?

—Eliphas quiere que ataquemos a las brujas blancas

—Bueno, esta vez acepto como las anteriores veces. Pero tendrán una manera para atacar. Hazle un honor a las raíces del budú y manda a este ser en contra de ellas

Él puso una imágen en mi cabeza junto con un conjuro para que esas bestias ataquen a las estudiantes de Raixincub

—Está bien, ahora vete

—Suerte Aurorita

Todo volvió a la normalidad y el pentagrama de pólvora con las velas desapareció, entonces tomé el cuerpo de Estefanny y lo metí en un tanque con formol. Luego bajé y escribí el hechizo en una hoja para no olvidarlo, luego voy donde las demás y les explico todo lo sucedido desde la llamada de Eliphas, en varios rostros veo descepción pero al menos tengo el apoyo de todas. Todas hacemos un círculo a media noche y recitamos en una voz el hechizo que me fue dado mientras pensamos en Raixincub, unos minutos después un zombi sale de el centro del círculo y me mira fijamente a mi.

—¿Dónde? —pregunta él en un tono muy desgastado y ronco

—A la academia de Raixincub — el zombi sigue las órdenes y sale de la casa para dirgirse al destino junto con otros de su tipo que comienzan a salir de la tierra