Sentimientos de papel

Alex

-¡Quita tu viejo trasero de mi!-grita Sam desde el suelo, retorciéndose como si un demonio poseyera  su cuerpo, tratando desesperadamente de liberarse del peso del viejo, que lo aplasta contra el suelo usando únicamente el poder de la gravedad y de pesar más de 93 kilos, inmovilizándolo por completo. 

-Si lo hago vas a lanzarte contra Morgana, y no puedo permitírtelo.-responde el viejo totalmente apacible, mirando al cielo, el cual comenzaba estaba nublado, por lo tanto nos hacía imposible determinar la hora sin la ayuda de un reloj. El ambiente estaba húmedo, lo que provocaba que los cabellos de Sam se pegaran a su rostro sudoroso por los intentos de liberarse inútilmente del viejo, quien apenas se movía por los movimientos de Sam. Suelto una carcajada seca, ganándome una mirada curiosa del viejo y una de Morgana, totalmente nula de emociones.

-Por favor.-me burlo, cruzándome de brazos.-Como si Morgana necesitara de la protección de cualquiera de nosotros.-fijo mi mirada en los ojos del viejo.-No seas ridículo y déjalo ya.

El viejo se limita a mirarme fijamente antes de encogerse de hombros y simplemente levantarse de Sam, quien se levanta con rapidez y se aproxima precipitadamente hacia Morgana, quien ni siquiera si inmuta de la rabia que irradia cada centímetro del cuerpo de Sam.

-Retráctate.-le escupe Sam, deteniéndose a unos centímetros de su rostro. Morgana lo mira fijamente, sin ningún atisbo de reacción al comportamiento de Sam. Se limitaba mirarlo indiferente, como si lo que tuviera enfrente no fuera más que una vieja película que había visto ya mil veces. 

Morgana no va a ceder, y tanto yo como Sam lo sabemos. Ella es una bruja de renombre en nuestro mundo, una de las pocas sobrevivientes de la masacre de los Juicios de Salem y la caza de brujas por toda Europa, aunque mucho de su vida y qué tanto más ha vivido esta mujer sigue siendo un completo misterio. Sin embargo, las historias contadas con su nombre en ellas son siempre sobre guerras, batallas y heroísmo a lo largo de la historia de la humanidad, relatando versiones jamás antes conocidas de los mismos hechos que te enseñan en el colegio como la historia del mundo, con una percepción totalmente diferente. Aunque si lo piensas, no es nada fuera de lo común, solo el sistema manipulando los hechos a su antojo para que veas lo que ellos quieren ver. 

Son pocos los licántropos que se han topado con Morgana o cualquier otra bruja en persona, y el número de licántropos que cuentan su experiencia a otros es aún más pequeño. Las brujas que existen viven en completo aislamiento de cualquier contacto con el exterior. Todos sabemos dónde encontrarlas, pero nadie quiere hacerlo, a excepción de algunos idiotas que piensan que es divertido ir a molestarlas. Ninguno de esos idiotas regresa para contarnos la gracia. 

Los licántropos sabemos que somos poderosos, pero también conocemos nuestros límites. Es por eso que pensar que Morgana necesita protección, es lo más estúpido que alguna vez pudo haber pensado el viejo. Al final, no es ella quien necesita que la protejan, sino Sam que todavía le falta mucho por aprender de su mundo, mucho más del nuestro, como que jamás se le debe ordenar a una bruja qué debe o no hacer...

Cosa que está a punto de darse cuenta él solito. Quizá debí haber dejado que el viejo lo aplastara contra el suelo...

"Eres un niño." le responde de vuelta Morgana, luego de permanecer en silencio mucho tiempo. "Todavía tienes tantas cosas que aprender, pero eres muy listo, así que no te tomará mucho descubrirlo."

-Si, lo soy.-le responde de inmediato Sam, resoplando con fuerza.-Sé que soy muy listo, y por eso también sé que lo que dijiste de Elvira no es verdad...

"¿Ah, no?" le interrumpe Morgana, ya con un tono de molestia en la voz. Eso no es bueno... "Exactamente ¿Qué no es verdad?"

-¡Todo!-le grita Sam. El viejo y yo nos tensamos a la vez en el momento en el que Morgana crispa su boca en una leve mueca de fastidio. Se está enfadando...-¡He crecido a su lado todos estos años, tú la conoces desde hace un par de días, eres incapaz de ver las cosas como son...!

"No" exclama Morgana, resonando tan fuerte en nuestras cabezas, que los tres quedamos aturdidos. "Tú no eres capaz de verlo, porque piensas exactamente igual. ¿En serio están tan seguros de que Tara no se fue por su propia voluntad? ¿Qué no había una razón detrás de todo y que no solo es un secuestro o manipulación por parte de Kenneth Sloan? ya saben que Tara es una licántropo ¿Por qué se quedaría aquí sabiendo que ella no es una de ustedes?"

-Porque somos su familia..

"Sigue mi pregunta." le vuelve a interrumpir Morgana "Y por eso es que me niego a llevarlos con nosotros. No comprenden algo tan básico, y no puedo arriesgarme a que en vez de ser un apoyo solo sean un estorbo en todo esto."

Sam traga con fuerza con frustración, llevándose las manos a la cabeza antes de salir caminando lejos de allí, en dirección opuesta a la casa de Elvira, lugar dónde suponía yo que él se dirigiría. Supongo que tanto él como Elvira necesitan pensar en las cosas que Morgana les dijo por su cuenta. Ella tiene razón, ambos son muy listos, así que a pesar de que no entienden lo que Morgana les está diciendo, lo harán.

Sin embargo, no puedo evitar sentir compasión por ambos...

"Sé lo que piensas" dice de repente Morgana. Le lanzo una mirada al viejo, preguntándome si también está escuchando, o si Morgana solo está hablando conmigo. Por su actitud tranquila mientras maldice por no tener un cigarrillo a la mano, deduzco que no está escuchando. "La honestidad es el valor más problemático que existe. Todos la consideran virtud hasta que les toca escuchar verdades que prefieren no saber." 

"Pudiste haber tenido un poco más de tacto." Me limito a pensar, sabiendo que Morgana escucharía. Su risa resuena dentro de mi cerebro como si tuviera una bocina dentro de mi cabeza.