Avalon es un universo que está en otra dimensión, concretamente es la cuarta dimensión, las dimensiones en este universo son: longitud, altura, profundidad y magia. Avalon fue creado por Arkash; dios del tiempo y Freya, diosa de la magia. Estos dos crearon a Melkid, dios de la luz y a Urdentag dios de la oscuridad. Entre ellos 4 crearon una tierra la cual dotaron valores y poderes así como capacidad de autosostenerse. Estos 4 se le denominan como los dioses mayores.
Después de crear la tierra nació gaia; diosa de la vida, crearon a los 4 elementales Athos, dios del fuego, Alessia, diosa del agua, Aldair, dios del aire, y a Atenea, diosa del espíritu.
Las uniones entre estos dioses dieron lugar a más dioses, hasta que se juntó el dios de la maldad; Aramis con Gaia. Dando así al humano. Tuvieron que desterrar lo a una dimensión sin magia puesto que este estaba corrompido por la maldad y buscarían siempre hacer el mal.
Crearon varios reinos a lo largo de Avalon,
En una bosque de robles azules se situó el palacio de freya y a este reino lo llamó Arcadia, tierra de hechiceros. Al inicio de Arcadia freya decidió convertirse en su elemento, se designó al campeón de freya Federico Nigthingale para gobernar Arcadia, éste al tener un reino tan grande debía elegir Archimagos para que gobernasen un sector del reino, siempre estando bajo sus órdenes, así que dispuso sus 4 hijos como duques
Bernardi gobernaba al este, Grimmaldi al oeste, Whithe al norte y Strange al sur.
Los reinos de avalon vivían en paz hasta que la República de ignengard fundada por el dios del fuego atacó a el reino de las hadas y los demás reinos atacaron.
Los cuatro Dioses mayores observaron como los Avalonitas se tacaban entre ellos y habían olvidado el sentido por el cual fueron creados: el amor.
Vieron que aramis transformado en Athos fue el que influenció a ignengard para atacar a las hadas alegando que habían raptado a la reina cuando este la tenía cautiva. Aramis no necesitaba sino obtener todo el poder de la magia
Despojaron a aramis de todo poder y lo enviaron a la cueva de onix para ser custodiado por un dragón. Aramis saldrá en diez mil años para intentar hacerse con todo el poder celestial.
Después del destierro, los dioses mayores pusieron 4 pilares, uno en cada esquina del mundo cada uno con su cristal como símbolo de su amor por el mundo: Arkash el azul, Freya el violeta, Melkid el blanco, y Urdentag el negro. Cada cristal sostiene Avalon y si estos cristales se juntan en un punto y en un solo ser, le otorgará todo el poder celestial. Estos cristales simbolizan la paz y la promesa de los dioses de que no se meterán en los asuntos de los Avalonitas, dejándolos a todos Ser.
Nombraron a un emperador para gobernar Avalon como símbolo de la unión y garantizar la paz, este emperador deberá velar por la unión de las naciones y garantizar que cada reino podrá transitar por sus capacidades.
Todo iba en paz hasta que los herederos de las casas de Arcadia se disputaban cada 100 años quien debía ocupar el trono, los strange vivían con rencor a los White porque el príncipe de White le había quitado la prometida a Sirius, el heredero.
Los White vencieron la guerra y gobernarían Arcadia hasta que el cristal de freya cese de iluminar el camino de los hechiceros.
Anne nació un 19 de septiembre de 1429 en el palacio de Ventalia, marcada como la futura reina de Arcadia.
Cuando una Hechicera de la corte se embaraza, van donde un maestro en adivinación para que este de el día del nacimiento. El día y la hora señada sientan a la madre en trono dentro de un domo de amatista con una abertura corta en el techo, al parir la madre, uno de los dioses de Avalon marca al niño con el poder que está deidad representa, todas las hechiceras pueden hacer magia, pero su marca deica le dará fuerza a los hechizos de este tipo. Cuando el dios marca a la niña, entrará por esta abertura del domo un halo de luz del color del dios, la única persona que puede asistir al parto es la madre por obvias razones y la madrina, esta se encargará de dar fe del dios del recién nacido quemando flores del color del dios y dejando salir el humo por la torre de Hera del palacio de Ventalia.
Por única vez en la historia había nacido alguien marcada por Aramis, era Anne, detrás de la tragedia de un niño marcado por Aramis estaba el desasosiego del hecho de que esta fuera marcada por el dios de la maldad, cumpliéndose así la profecía.
Había algo de esperanza al final de la tragedia. María Beatriz era la segunda hija, fruto del mismo parto. Ningún maestro adivinatorio daba crédito al hecho de que Anne no se haya comido en el vientre a María Beatriz, o a su madre. Incluso al sorprendente hecho de que parecía una bebé normal y no un monstruo infernal como se pudieron imaginar a un hijo de Aramis.
El rey construyó un sector en el palacio, prohibido para todo hechicero, recubierto con placas de ónix y con una única luz natural en el balcón, el cual estaba atravesado por cristal de ónix templado. Ahí encerró a Anne y sólo podía entrar el archimago Félix Valenzuela a enseñarle a la princesa sobre literatura, historia, ciencia, arte y magia. La princesa pensaba que eso era lo normal puesto que no conocía nada mas además de eso, incluso llegó a creer que no estaba encerrada.
La niña del mal creció en su torre de soledad siendo increíblemente buena para la magia y aun así no mostró un solo rastro de oscuridad.
Dominaba a la perfección los hechizos de simulación y la magia temporal, los conocimientos de la magia de lo que no existía físicamente era algo que Anne manejaba como si se tratase de peinar calvos.
“La oscura” como la llamaban en el pueblo no tuvo suerte para la invocación, no podía manejar la extraña temática de cómo generar criaturas a partir de la nada y que estas existieran físicamente, era la viva imagen de lo que después diría un científico “todo aquello que el hombre ignora no existe para el” no era gratuito no saber invocar, ¿cómo esperas crear algo si nunca lo has visto?