Capítulo 24

B + A
Alec
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– Espera – freno a una cuadra del instituto y mirando como Meg baja la ventanilla aguardo en silencio – Continua no quiero llegar tarde – encogiéndose en su asiento mi hermana mira por la ventanilla, pero sé que algo le pasa.

– ¿Por qué me hiciste detenerme? – pregunto aun sin arrancar el auto necesitaba saber que le pasaba a mi hermana.

– Si no haces nada estúpido te lo diré – con solo decirme eso ya me estaba preparando para romper piernas, pero para que me dijera lo que pasaba asentí de todas maneras are algo estúpido – Percibí el aroma de Conor y otra loba que no es Valerie, se me hace difícil reconocer quien es, pero no es de nuestra manada – apretando mis puños en el volante arranque el auto manejando despacio. Cuando un lobo encuentra a su mate y este es humano su esencia cambia por lo que su aroma es más fuerte. Lo que atrae a otros lobos algunos de manera agresiva y otros que buscan otra cosa. Por cómo se puso Megan me hace pensar que no están atacando a Conor.

Al llegar al aparcamiento del instituto visualizo a Conor hablando con una pelirroja y la sangre comienza a hervirme. Desde lejos veo el tatuaje en la muñeca de la chica confirmando que es una loba, pero me está dando la espalda. Megan se percata de la situación, pero antes de que pueda detenerme yo ya estoy avanzando hacia su novio. La pelirroja se va saludando con la mano al chico que le sonríe y sin girarse hacia mi desparece entre la multitud. Apretando mi puño golpeo la cara del chico que cae al suelo y su boca pierde sangre.

– Alec eres un animal – mi hermana me empuja para luego agacharse a ayudar al chico que esta algo mareado – Esto no era necesario – habla de mala manera mi hermana y su amiga me pecha al pasar y ayuda al chico también.

– Sabes las reglas Megan y el idiota de tu novio ya debería conocerlas – hablo mordiendo cada una de las palabras y conteniéndome para no partirle la cara al chico que no entiende muy bien nada.

– ¿Qué pasa aquí? – cruzándose en mi campo de visión Froy me separa del muchacho y las dos chicas que se alejan con un muy confundido humano.

– Ese humano estaba con otra loba muy sonrientes, a ella no la logre ver, pero sé que no es de nuestra manada. Ya sabes las reglas Froy – comento con rabia pasando una mano por mi pelo y conteniendo las ganas de ir a romperle la cara a ese chico.

– Amigo debes calmarte primero, entiendo que intentes proteger a tu hermana, pero debiste primero hablar con el chico, aun no conoce las reglas – las palabras de Froy no lograron hacerme bajar la guardia, pero si me hicieron pensar en frio.

– Tienes razón, gracias amigo – chocando las manos con Froy me alejo de el para ir a mi auto por mis cosas. Las pocas personas que me vieron pegarle al chico se giraron para seguir con lo suyo.

En mi auto tome aire intentando bajar toda esa furia contenida, me resulta difícil pero lo voy controlando. Al salir del auto el incidente del estacionamiento ya parece agua pasada y veo a Bailey bajar de su coche. Cuando gira su mirada chocolate choca con la mía y la veo sonreír mordiendo su labio inferior para luego ir hacia dentro del instituto. Por instinto la sigo hasta que ella se detiene frente a su casillero y yo me detengo apoyando mi mano en el casillero que esta alado suyo.

– Hola gatita – murmuro sintiéndome en completa calma al estar cerca de Bailey.

– Hola Bann – girando un segundo su rostro a verme la veo sonreír – ¿Que te paso en la mano? – sus ojos se abren en grande al ver el enrojecimiento de mis nudillos. No había notado nada, pero Bailey parece ser muy observadora y tomando mi mano entre sus dedos fríos la observo.

– Tuve un problema con el novio de mi hermana – alejando mi mano de las suyas la escondo en los bolsillos de mis pantalones. Se me curara en un rato no es nada, pero por la mirada de Bailey sabía que me diría algo por actuar como un idiota.

– ¿No te parece más sencillo hablar antes de golpearlo? – girando de nuevo a su taquilla Bailey continúa sacando sus cosas con normalidad. – Entiendo que algunas veces la furia nos ciega, yo misma le partí la nariz a Ashley cuando lastimo a Angie y no me arrepiento. Supongo que tus razones para pegarle al novio de tu hermana son igual de buenas que las mías cuando le pegue a Ashley – cerrando su taquilla Bailey apoya su espalda contra la superficie de metal y me mira con sus ojos chocolates. Interrogantes de querer saber la verdad y un poco más.

– Actué meramente por instinto animal quizá haya sido un error o tal vez no. De lo que estoy seguro es de que aún no estoy listo para ver a mi hermana crecer de golpe. Ella es tan madura a veces que me hace pensar que ella es tres años mayor que yo y no al revés. Solo intento protegerla y mi lobo interno la sigue viendo como una frágil cachorra, pero desde hace mucho tiempo que Meg dejo de ser frágil – bajando la mirada me siento un hermano posesivo, pero eso no es lo que quiero que Meg sienta.

– Escucha es normal que tengas miedo porque Megan crezca y se va a equivocar, pero eso es algo que tiene que pasar sola. Debe aprender por si misma ciertas cosas y no siempre estarás para evitar que se lastime, pero si puedes estar para ayudarla a levantarse. Yo no tengo hermanos, pero están mis padres y ambos no me prohíben nada, pero siempre están cuidándome. Se que tu haces lo mismo por tu hermana, eso es lindo – de improviso Bailey toma mi cara con sus dos manos y me hace mirarla. Antes de que pueda decir algo ella me beso haciendo que todo lo que estaba pensando se esfumara.

Bailey
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El timbre vuelve a resonar en toda la casa mientras estoy bajando por las escaleras. La insistencia de la persona del otro lado me irrita con solo tocar el timbre una vez basta para que baje a abrir. De mala gana abro la puerta encontrando del otro lado a Alec quien me sonríe con mucho entusiasmo.