6. El reencuentro

-Hola Candace- saludo Peter- Hola...- dudo por unos segundos.

-Chase- dije yo.

-Si, Chase- dijo Peter- ¿Tienes un segundo? Necesito hablar contigo- dijo.

-No puedo, en este momento estoy en una cita con Chase.- dije indiferente girándome hacia Chase, en sus ojos se veía que estaba molesto, pero se quedo tranquilo mirando la escena.

-Por favor...- dijo Peter, había algo suplicante en su tono, y algo triste en sus ojos café. Mire en la dirección de Chase, con un sutil gesto de manos dio a entender que estaba bien. Le di una sonrisa de disculpas y seguí a Peter hacia la terraza.

-¿Que pasa?- pregunte mas bruscamente de lo que quería. El pareció notarlo.

-Se que nunca me he comportado contigo como tu querías que lo hiciera. Pero....- no lo deje terminar.

-Esta bien, no tienes porque. Ya te disculpaste por mensaje, estabas borracho, lo entiendo.- Me gire hacia la puerta pero tomo mi mano.

-No, Candace. No es eso... Bueno si, pero hay algo mas.- dijo la suplica inundaba su voz. Asentí dando a entender que prosiguiera.

-Tu me...- esta vez fue alguien mas quien nos interrumpió.

-¿Candace?- pregunto Chase asomándose solo un poco por la puerta.- Sam necesita que vayas al departamento.- dijo.

-¿Ahora?- pregunte, justamente cuando Peter me iba a confesar algo. Me tendría que quedar con la duda. Asintió.

-Ahora- dijo. Asentí a el y le hice un gesto dando a entender que ya iba, se dio la vuelta y se marcho.

-Lo siento...- me disculpe con Peter - En otra oportunidad sera- le di una pequeña sonrisa y me gire yendo por donde segundos antes había visto ir a Chase. Al hacer esto divise a la cita de Peter ahora de pie pero de espaldas a mi dirigiéndose a la terraza y desee haberlo tratado como en realidad me sentía, ocultando lo que siento por el. Baje las escaleras corriendo y pase junto a el final de estas cuando tomaron mi brazo.

-¡Heyyy! Calma...- dijo Chase. Sonreí.

-Lo siento yo...- sacudí la cabeza- no importa, ¿vamos?- asintió y nos dirigimos al estacionamiento.- ¿No sabes por que Sam me necesita con tanta urgencia?- pregunte, removiendome en mi asiento, incomoda. Nego con la cabeza.

-Ni idea. Solo me dijo que te necesitaba allí- se encogió de hombros dando a entender que no lo entendía. Ahora eramos dos. Me quede callada el resto del viaje al departamento. No pude evitar pensar en la chica que estaba con Peter. Repetí una y otra vez la conversación en mi mente tratando de entender el rompecabezas que había en mi cabeza. Cuando no logre entender nada finalmente me rendí y salí de mi nube de pensamientos. Habíamos llegado a la puerta del departamento y no me había dado cuenta. Chase toco la puerta. Al tercer toque se abrió. Todo estaba oscuro, la única luz era la del sol que se filtraba por las ventanas.

-¿Que ray....- comence.

-¡SORPRESA!- gritaron Sam, Kate y Emma. Mi confusión aumento.

-¿Huh? No es mi cumpleaños....- dije mirándolas incrédula.

-Nop- dijo Sam sonriendo.

-¿Entonces?- pregunte impaciente. Todas se hicieron a un lado y lo vi parado en medio de la sala de estar con su típica sonrisa de "me creo el rey del mundo" y maletas junto a el. Su sonrisa creció cuando vio mi cara. Mi boca estaba abierta pero ninguna palabra salia.

-Oh por...- Salí corriendo y me tire en sus brazos para un cálido y apretado abrazo, el dio unas vueltas conmigo aun en brazos y yo reí. Cuando por fin se separo de mi y me bajo al suelo, volví a abrazarlo-¡Estas aqui,Estas aqui!- exclame.

-Estoy aqui- dijo West. Algunas cosas habían cambiado, pero seguía siendo el mismo chico que conocía tan bien. Tenia la voz mas profunda, y habían tatuajes discretos en sus definidos brazos.

-Pero.... ¡aghhh! ¿Por que? ¿Cuando? ¿Como? ¿DONDE?- me derrumbe en el sofá. Aun no podía creer todo. El rió, con su voz profunda y se sentó junto a mi. Tomo mi mano en la suya.

-Esta bien Can. Estoy aqui. Llegue hoy de mi viaje desde Europa y quise darte la sorpresa.- dijo tranquilizándome. Sonreí. Estaba aqui, en serio lo estaba. Chase carraspeo. Me incorpore de un salto.

-Oh si... West el es Chase, nuestro vecino. Chase el es West, mi mejor amigo de toda la vida- le guiñe un ojo a West. El sonrió y estrecho la mano de Chase, en ese saludo tan común que solo los hombres saben.

-Hola amigo. ¿Así que este es el tan mencionado Chase?- pregunto West con una sonrisa divertida. Le di un codazo discreto agrandando los ojos.- Un gusto conocerte- la sonrisa de West se ensancho.- Bueno... Me gustaría quedarme a platicar mas pero debo mudar mis cosas a mi nuevo departamento.