Voy apilando los papeles que faltan, por hoy conseguí no tener reuniones. Si ya termino por aquí, debo seguir con los planes de Max.
Debo admitir que después de que Max se fue, mi trabajo no cambio. O mejor dicho, si lo hizo,era trabajo que a veces conseguía apaniguar de tanto en tanto, con ayuda de mi amigo y colega, y aun así, no había disminuido. Se había hecho mas constante.
Despegue la mirada de la computadora por unos segundos para masajear mi cien, pero llama mi atención el leve bullicio fuera de mi oficina. Hasta que esta se abierte abruptamente golpeando el otro lado de la pared, por Wilkins.
"Maldito idiota" pensé.
-¡Señor Wilkins! ¡No puede pasar, el señor esta ocupado! ¡SEÑOR!- Ya medio gritaba, por las inefectivas suplicas de mi asistente, la Señora Williams.
Pero el sujeto solo la hizo a un lado con su brazo, cuando ella se interpuso en su camino. Realmente, era una mujer de edad avanzada pero sus habilidades hablaban por ella, y su personalidad en base a toda persona que compartía con ella era una clara forma de decir que trataba a todos tan cortes mente como le gustaba que la trataran a ella, así fuera dentro o fuera del área laboral. Sin mencionar que tanto para Max y yo, era una muy sabia mujer de la que podíamos disponer.
-Esta bien, Bibian. Yo me encargo. -
-Maldito desgraciado, que demonios es esto?- Me grito, mientras se acerco a mi escritorio y estampo el sobre a mi escritorio.
Para confirmar mi sospecha, desdoble la hoja y era precisamente la carta de despido que había hecho a hacer a Will.
-No puedes hacer esto!, le he dedicado mi vida a esta empresa. - Dijo furioso.
Yo levante mi mirada del papel a el junto con mi ceja arqueada. "Su vida?" si no fuera porque Max tenia un ojos puesto en algunos empleados con los que creía debía suponer que vendían información a la competencia, ya ni estaría aun en mi presencia.
-Señor Wilkins, primero que nada intente respetar al personal. - Dije con gran tranquilidad. El solo suspiro sin importarle.
Claro, al sujeto nunca nadie le importo en la empresa.
Pero ahora, solo le deje dar paso a su insolencia, cuando creyó oportuno andar a su antojo.
-No puedes hacer esto, se que has vendido las acciones de la empresa. A quien crees que pertenece todo esto? - Realmente el sujeto, creía que aun despedido podía andar con su típico aire de superioridad. -He sido un empleado de "Las familias" por largo tiempo, que crees que dirán cuando les informe que has "regalado todo"? -
Para ser sincero, me había molestado, pero tampoco le di es gusto de hacérselo saber. Aun que no supiera hasta donde era que se había hecho con esa información, tampoco creía que seria un total secreto, al fin y al cabo las acciones iban a ser de evidencia para muchos.
-Señor Wilkins, no dudo que allá sido un buen elemento en la organización, pero "Las Familia" se han hecho de información de lo que dice, y por ende de sus acciones para con la empresa y sus "otros socios" a los que ha hecho beneficio de los datos que les fue suministrando.- Con cada palabra le transmitir mi desinterés en su amenaza y, aun así, que su persona no representaba una amenaza.
De hecho, dentro de la "Organización" a la que el llama "Familias", daban continuas amenazas para que "los perros no se fíen de la cadena media floja, sino pendientes a romper sus cuellos".
El sujeto, claro, no me temía, y no tenia porque, pero parecía aun mas molesto con su intento fallo de molestarme. Después de todo pareció envidiar mi puesto y la cercanía que compartía con los dueños.
-Maldito!, has llevado este lugar a la ruina, y espero que también la tuya. -
Con una sonrisa decidí terminar el asunto. -Pues si no tiene otros asuntos mas importante, ya puede retirarse, Señor Wilkins. - Y con eso dicho volví a lo que me concernía a terminar.
En ese instante, escuche como tomaba devuelta su hoja de despido y la arrugaba en su puño. Esta pendiente de su presencia en caso que fuera a hacer alguna otra cosas que no sean simples palabras, pero en ese mismo instante fue que golpearon la puerta de mi oficina y solo entraban. El único, ademas de Max, era Will que tenia permitido pasar cuando sea.
Wilkins observo a Will aun mas molesto, y por mi parte, ya cansado de esa discusión.
-Disculpa, no sabia que aun estabas ocupado. -Dijo Will, sin sentirlo realmente.
-Esta bien, ya terminamos aquí. - Afirme con seriedad.
El tipo me dio una ultima mirada y se retiro, con un fuerte portazo que hizo que la puerta volviera a abrirse.
Will por su parte la cerro, con una leve mirada de resignación pero no agrego mas al asunto.
-Jo, tenias razón.- dijo dejando unos cuantos papeles y unas fotos algo borrosas tomadas seguramente de algunas cámaras de seguridad de locales o de vías publicas.
Examine solo lo necesario las fotografías, confirmaron a quienes sospechaba pero también algo difícil pero no improbable de creer. "Los mismos sujetos, pero con un "extra"" pensé, "Demasiado sencillo".
-Ya es tiempo.-
-Si, aunque también hubiera sido bueno que nunca hubieran sabido de ella.-
-Pero aun si no supieran, no cambiaría lo que es Joseph.-
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Editado: 24.10.2019