El regresó de la villana

La temible villana de ciudad Origen estaba de regresó, estando el sol a punto de ocultarse por ése día, lista ella para acabar con el superhéroe, pero...

Ella se encontraba flotando, con sus brazos cruzados y su ceño fruncido mientras veía como encima de ése edificio, el "héroe", colocó un puesto de besos gratis.

"Besa al atractivo héroe gratis y como recompensa, se hará tu novio."- decía el letrero del puesto de besos.

La mujer, dio un suspiro profundo mientras cerraba sus ojos y se cubría el rostro con ambas manos.

¿Dónde quedaron los verdaderos héroes?

Ése tipo no era un superhéroe de verdad, sólo era un super tonto con superpoderes y un bobo disfraz que era super resistente, nada mas.

-¿Qué se supone que estás haciendo, idiota?- preguntó la villana, no siendo capaz de entender como es que todavía no derrotaba a ése tipo.

Cierto, poderes excesivamente injustos de héroes.

-Como ves, mi reina, un puesto de besitos gratis con todo y recompensa.
Para su suerte, usted es la primera y única en la fila, así que cuando quiera, empezamos.- respondió el héroe, moviendo sus cejas de manera coqueta mientras sonreía.

Sus trucos de conquista, eran únicos y como nunca los usó en nadie antes, no fallando, significaba que eran métodos infalibles.

Ser irresistible era tan cansador y más sí le sale de manera natural como a él.

-¡Se supone que tenemos que pelear! ¡Tu para proteger a la ciudad y yo para apoderarme de ella!- gritó la pelimorada, rodeando sus manos con energía oscura.

El héroe se cruzó de brazos pensativos y movió la cabeza con duda.

-Como que éso es lo habitual en nuestra rutina de enemigos jurados.
¿Y sí para variar cambiamos las cosas y en lugar de una pelea a muerte tenemos una pelea a besos?- preguntó el hombre, moviendo nuevamente sus cejas de manera coqueta y le mostraba una gran sonrisa.

Ser tan seductor como él, no era tarea fácil ya que le sale por naturaleza, cosa que le es muy peligroso, pero por suerte, con su amada reina lo podía usar ya que ella era muy fuerte.

Reina Sombra levantó un puño, listo para ser usado directamente en la cara del héroe pero cerró sus ojos y se calmó.

Debía controlar su enfadó, una mujer joven como ella no tiene que preocuparse por cosas tan tontas como un hombre infantil, cosa que es de cada día para cualquier mujer en el mundo.

-Vamos mi reina, sé que deseas un besito mío.
Muchas colegas jóvenes mueren por sólo una sonrisa mía pero no me importan ellas, yo prefiero las mas maduras como usted, sólo a usted.- dijo Guerrero Solar, guiñeando un ojo mientras reina Sombra quedaba en shock.

¿En cierto punto le acaban de llamar vieja, a ella, una mujer de eternos 22 años (dejen que se mienta a ella misma)?

-¡Ahora sí que te mató!

Y los ciudadanos vieron una inmensa explosión en la cima de un edificio, levantando las miradas para ver como la adorable villana perseguía al gran héroe, lista para acabar con su vida pero él sólo iba sonriendo y lanzando pésimos piropos.

Por un momento creyeron que pasaba algo malo, pero sólo era ésos dos jugando, otra vez.

La villana que le lanzaba bolas de fuego oscuras al héroe que las esquivaba todas como sí estuviese bailando, se dio cuenta que las personas parecían ya no temerle, enojadose aún mas.

-¡Por tu culpa las personas ya no me tienen miedo! ¡Muere, muere, muere!- gritó reina Sombra, lanzando bolas oscuras una tras otra, sin parar mientras volaba a toda velocidad.

Al héroe, que le encantaba presumir de su power up, recibió cada ataque con sus brazos extendidos y una gran sonrisa, sin recibir dañó alguno.

Cada ataque que ella le daba, era una muestra de afecto para él.

Hora del gran final.

Guerrero Solar se detuvo en medio del cielo de golpe, no alcanzando la villana a detenerse a tiempo, chocando con él y siendo abrazada.

La mujer levantó la mirada algo aturdida y abrió sus ojos como platos al ver al sonriente héroe que la tenía rodeado con sus brazos.

-¿No lo entiende, mi reina?
Ni yo y ni nadie puede odiarte por que eres... perfecta y te amamos.- susurro el héroe, viendo como a su amada se le ponía todo el rostro rojo como sí fuese una remolacha.

¡Era tan hermosa y él estaba tan enamorado de ella!

Reina Sombra agachó la mirada para que ése tonto no vea su sonrojo, mientras intentaba liberarse.

-¿Qué no lo entiendes, tonto héroe?
Yo soy la villana, la supervillana que quiere apoderarse de toda está patética ciudad y derrotarte.
No quiero ser amada o aceptada, quiero que me odien mientras yo me rió de su sufrimiento.- dijo ella, sintiendo como los últimos rayos de sol imulinaban su rostro.

Éso era muy vergonzoso y estaba segura que ése super tonto lo sabía.

-¿Sí? Felicidades, mi reina, ya te apoderaste de los corazones de todos los habitantes de esta ciudad y me tienes totalmente derrotado de amor.
Eres tan mala por hacer que te querramos tanto y no querer corresponder a nuestros sentimientos, tu, villana.- susurro el héroe, sintiéndose felíz por abrazar a su amada sin que ella se enojé (ella lo tenía envuelto en fuego oscuro pero él ni lo sentía)

Se nota que cada vez va llegando más y más al corazón de la villana con sus super encantos.

-Oye, cabeza de papa, ¿cuánto tiempo mas planeas seguir aprovechandote de la situación?
¡Ya sueltame para que pueda romperte la cara a golpes por ser tan molestó y atrevido!- gritó reina Sombra, intentando liberarse, sin éxito mientras el héroe sólo sonreía con sus ojos cerrados.

Sip, ella estaba totalmente enamorada de él y cada vez se notaba más.

Quizás no tuvo sus besitos, pero tuvo un cálido y voluntario abrazo, y al que diga lo contrario, sin autógrafo por mentiroso.