Capítulo III.

Me levanto de un salto al ver que el reloj de mi habitación marca las 7AM, no pude dormir en toda la noche, luego de terminar de analizar la casa decidí tomar un descanso antes de regresar a la UC, el collar que Evan encontró debajo de la cama del sótano me mantuvo despierto toda la noche ¿Estuvo realmente Eleonor ahí o solo es una coincidencia?

En el fondo sé que es la cadena de Eleonor, podría reconocerla en cualquier sitio pero ¿Qué hacia esa cadena allí con la ropa de chica? Sé que la cadena pertenece a Eleonor pero la ropa no, Eleonor tuviese treinta y dos años hoy en día.

Suspiro y camino hasta el baño para ducharme, el agua fría no es capaz de quitarme las dudas, necesito saber que ocurrió en esa casa todo este tiempo, sobre todo en el sótano.

En menos de quince minutos me encuentro caminando hacia la entrada del UC, no veo a los chicos por ningún lado por lo que deduzco que ya han comenzado a procesar las pruebas, camino hasta el laboratorio donde en efecto ya están Dante y Evan.

─Buenos Días─ digo entrando y tomando unos guantes, ambos contestan y siguen con su trabajo.

La mayoría de las cosas ya han sido procesadas así que tomo el cuchillo con el que asesinaron a Tobías y comienzo a buscar huellas y a simple vista las encuentro, el asesino no tiene mucha práctica y por las huellas deduzco que podemos encontrar al asesino, pero ¿Por qué dejaría sus huellas a simple vista? ¿Quiere ser encontrado por lo que hizo? Nuevas dudas se acumulan en mi cabeza.

─ ¿Damián Villa?─ despliego mis pensamientos a otro lado y observo el hombre en la puerta que me acaba de llamar, el hombre se encuentra junto a Spencer que me observa en silencio.

─ Soy yo─ contesto desviando su atención de Dante y Evan─ ¿Sucede algo?─.

─Por favor acompáñenos─ dice.

Miro a los chicos pero ellos demuestran el mismo desconcierto que yo. Dejo el arma ya procesada sobre la mesa al igual que mis guantes y me acerco hacia Spencer y el otro hombre.

─Soy el oficial Jacobsen Torres, estoy a cargo del caso del homicidio de la familia Villa y me gustaría hablar con usted─ dice.

Asiento confundido, el hombre me mira por unos segundos y comienza a caminar por los pasillos de la UC me quedo frente al laboratorio junto a Spencer.

─ ¿No estaba yo a cargo del caso?─ pregunto.

─ Lo estabas pero los supervisores han decidido retirarte del caso por tu parentesco familiar con los Villa − comienza a decir pero lo detengo con una risa amarga.

─ Tú muy bien sabes que esas personas dejaron de ser mi familia hace años, ¿Esto es una broma estúpida? ─ digo comenzándome a molestar.

─ Lo siento Damián, son ordenes ─ Asiento sin decir más nada y comienzo a caminar tras el oficial Jacobsen. Pero el trayecto se me hace corto, el oficial se encuentra esperándome frente a la sala de interrogatorios, mi mirada viaja entre Spencer y el oficial.

─ ¿Y ahora qué? ¿Soy un sospechoso?─ comento con sarcasmo.

─Es solo procedimiento, usted mejor que nadie debería saber eso─ dice Jacobsen abriendo la puerta que da a la pequeña y fría sala de interrogatorios, miro a Spencer, este aparta la vista y se va, sé que vera el interrogatorio a través de la cámara de gesseell.

─Que sea rápido, no quiero perder mi tiempo en esta estupidez─ comento entrando a la sala y sentándome.

─Bien Damián─ dice Jacobsen sentándose frente a mí con una carpeta entre sus manos─. Puede comenzar relatándome porque tomo la decisión de irse a vivir con su tío Jordan a la edad de dieciséis años─.

─No fue mi decisión irme de la casa─ comento.

─ ¿Puede explicarse?─

─ Mi padre y mi hermano maltrataban a mi madre, ese día él la estaba golpeando y yo quise detenerlo, lo golpee pero el logro noquearme; Cuando desperté en el hospital un oficial me dijo que cuando llegaron a la casa Tobías estaba apuntándome con un arma, Jordan tomo mi custodia y pude salir de ese infierno─ resumo la historia a lo más importante.

─ ¿Por qué no pudo irse antes? Tengo entendido que Jordan intento que se fuera con el muchas veces─.

─No quería dejar sola a mi madre─.

−¿Y porque no se marchó con ella?−.

−Mi madre tenía miedo de que Tobías nos encontrara y nos matara por abandonarlo−.

El oficial se queda en silencio y comienza a sacar unas fotografías de la carpeta, las coloca frente a mí. Conozco esas fotografías, son las del sótano. Yo mismo las tome.

─ ¿Me puede decir que es esto?─ pregunta señalando la ropa de chica, me inclino en mi asiento.

─Eso fue encontrado en el sótano el cual fue editado a modo de ser habitado por una persona─ comento tratando de parecer calmado aunque sé que me preguntara por la cadena.

─ ¿Qué me puede decir de esto?─ pregunta alzando la fotografía de la cadena.

−Ese collar lo encontró mi compañero debajo de la cama que había en el sótano− digo.

−¿No sabe usted a quien pertenecía? ¿Sabía si Tobías tenía una hija o a quien pudo mantener en el sótano? –pregunta.

−Es la última vez que lo repito, corte toda relación con Tobías Villa y los que habitaban en aquella casa hace 16 años cuando intentó matarme, no se a quien pertenecía el collar y no sé a quién pudo mantener viviendo en tan bajas condiciones− digo.