La reconciliación con Celeste ha traído alivio en mi interior, me ha hecho sentir de maravilla, esa noche logré dormir como nunca antes lo había hecho: mi cuerpo al fin pudo relajarse, perder la tensión que había acumulado, los huesos de mi espalda se acomodaron en cuanto me recosté provocando un crujido. Había comido más de lo pensado, y, deseado, mi estómago se quejaba, no debí de haberlo hecho puesto a que las náuseas se apoderaban de mí con cualquier movimiento, me había adaptado a comer muy poco. ¿Hacía cuánto tiempo que no comía una hamburguesa como aquella? De tan solo pensar en lo que sería la cena me asqueo.
Joder, estaba deliciosa, exquisita, fue un manjar para mi paladar el simple hecho de probarla, claro eso pensé en su momento. Para distraer nuestras mentes nos hemos quedado en una sala hasta muy tarde mirando películas variadas por la computadora de mi amiga, cuando el sueño nos atacó fue cuando dijimos basta a nuestra maratón de películas sobre vampiros o demonios, no cruzamos palabra alguna durante estas, tampoco necesitábamos hacerlo para comprendernos. Algunas pequeñas risas o comentarios acerca de la película llegamos a intercambiar, no obstante, solo se oían los diálogos de la película.
Noté que a pesar de habernos amigado, la distancia estaba entre nosotras, una distancia que debía de sanar con el tiempo o terminaríamos lastimándonos sin quererlo, nuevamente.
Me he quedado profundamente dormida, Morfeo me arrastró a un complicado e inexplicable sueño, un sueño que me ha atrapado y negado a dejar salir de allí, los sentimientos fueron reales, sofocantes y hasta aterradores.
El cielo se había tornado rojo, la luna lloraba sangre empañaba el agua con esta, ya no era potable en ninguna parte del mundo; así como la primera plaga que Dios ha enviado a Egipto reclamándole al faraón que dejara ir a su pueblo luego de cuatrocientos años de esclavitud.
Pero esta vez la plaga era mucho peor, traía consigo energías negativas, odio, rechazo e inclusive terror. Las diferentes estatuas de Jesucristo derramaban sangres por las falsas heridas producidas ante el castigo que el hijo de Dios ha tenido que soportar por nuestros pecados, su rostro mostraba terror ante la revelación de aquella criatura tan vil que había ascendido del mismísimo infierno, la amante de Lucifer.
Una princesa de porcelana moría en los brazos de aquel pelirrojo, la sangre pura y al mismo tiempo maldita de esa princesa se revelaba contra ella y salía a borbotones de su garganta. Por un momento aquel que la sostenía le había parecido un ángel, en sus últimos alientos la joven sonrió plácidamente antes de dejar de respirar. Su vestido blanco estaba manchado de sangre, sus cabellos de oro, largos como una cascada habían perdido el brillo y su cuerpo se había vuelto liviano.
La princesa de porcelana había muerto al fin.
Entonces, todos los vampiros se percataron de algo, de alguien que despertaba de su eterno sueño, la sensación era aterradora, daba escalofríos, el aire se había vuelto pesado, era difícil respirar, los animales se inquietaron hasta el punto de enloquecer, los murciélagos del cementerio donde se hallaban volaban desesperados para reunirse con su ama.
Y allí, resplandeciente, hermosa hasta el punto de parecer una criatura de otro planeta, estaba ella, sus alas de murciélago se plegaban con total elegancia tras de sí, su melena larga rojiza como el mismísimo fuego del infierno se blandía con elegancia a su alrededor, sus ojos rojos brillaban. Si no fuese por las sensaciones que la mujer daba, podría comparársela más bien con el ángel más bello enviado por Dios a la tierra y no por la antigua amante de Lucifer, la primera mujer que se ha revelado al Creador según los creyentes: Lilith, la madre de los vampiros.
El sueño quiso decirme algo, la sensación de que algo más se oculta tras la historia de Angelique se incrementa conforme indago en mis sueños, ¿Y si realmente no hubiera una sola Lilith en el mundo? Quiero decir... Tal vez la Lilith de la cual siempre me han estado hablando era una segunda Lilith, la Lilith de mi sueño era diferente Angelique, la tan nombrada Lilith también. La pregunta de Red no deja de taladrar mi cabeza, ¿Realmente Lilith está en mi interior?
Los libros sobre vampiros no han de decir mucho, solo hablan de un animal que convirtió en puros e impuros, ¿Y si esos libros mienten? ¿Si solo dicen lo que muchos quieren hacer creer? Lo he estado pensando bastante, releyendo una y otra vez aquel libro que mi hermano me ha prestado, pero no le encuentro lógica alguna, ¿Por qué solo a ella le ha pasado que en su despertar se descontroló y convirtió a todos en puros e impuros? Aquí hay gato encerrado, no he escuchado que nadie en su despertar haya hecho tal cosa, ¿Y si realmente me han estado mintiendo con respecto a Lilith original también? ¿Por qué me mentirían sobre Lilith? La corte ocultará la verdad, sospecho de ellos, después de todo Amadora ha estado hablando de dos personas con Red.
¿Y si la corte ha querido manipular a los vampiros al igual que a mí, mintiendo con tal de volverse poderosa?
¿Qué esconden sobre ella? No descansaré hasta saber la verdad de todo y darla a conocer, simplemente es estúpido, ¡Ilógico que el vampirismo surja por una persona descontrolada y más que nada que una niña vampira nazca del vientre humano! En este caso y según lo sé, debería de ser un damphiro como Celeste y Fabrice.
He sido estúpida al créeme todo aquello, pero quienes han sido más estúpidos por caer en esta trampa y mentira han sido los demás vampiros. ¿Realmente Lilith y los vampiros tenemos relación con la iglesia? Hay cosas que no encajan en la historia de esa mujer, me siento como si estuviera hablando de dos personas total y completamente diferentes al llamarla "Lilith" a Angelique, eso se debe a que también existió una, la original que nada se sabe de ella, ¿Y si realmente lo que dice la iglesia ha sucedido y esta persona ha sido una reencarnación de ella?