CAPÍTULO 15

Maratón 3/3

SYNA

Me encuentro despierta desde hace horas, observando el techo en completo silencio para no despertar a Ulises y Dorian que duermen a mi lado.

Las ganas de llorar no me abandonan pero mis lágrimas parecen haberse agotado.

Miles de preguntas bombardean mi mente. 

¿Porque?¿Quién? Reprodusco sus últimas palabras una y otra vez. ¿Que no confíe en quien? Esto me hace creer que Amaris descubrió algo y que por ese algo, terminaron su vida.

 Pero soy incapaz de unir todos los cabos sueltos. No logro llegar a una conclusión estable, ni entenderlo del todo. Solo se una cosa, y es que esta lucha se está volviendo más real que nunca, que no es un juego, y que inevitablemente no todos llegaremos al final del túnel.

—¿No puedes dormir? —cuestiona Dorian con la voz ronca, pasando uno de sus brazos sobre mi cintura y acercándome a su pecho.

—No puedo dejar de pensar…¿Porque ella? 

—¿Qué crees tú?

—Descubrió algo y la silenciaron por ello.

En algún momento, me quedo dormida entre sus brazos y cuando despierto, ya nadie se encuentra a mi lado en la cama.

Al levantarme voy al jardín y la primera en percatarse de mi llegada es Kassia, quien viene corriendo hacia donde estoy y me abraza fuertemente.

—Lo siento tanto, Sy… —dice en un susurro.

—También yo, cachorra —nos separamos y acomodo su cabello que cae rebelde sobre su rostro —¿Que haces aqui?

—Malcom me dijo lo que ocurrió y...no podía dejarte sola.

Sonrió un poco por sus dulces palabras.

Nos sentamos todos en un círculo sobre el suelo, con Diablo acostado sobre mi regazo.

—Las cosas están mal...muy mal. Mataron a Amaris, la cuestión es ¿por qué? Solo era una anciana —observo al cielo unos segundos cuando comienzo a sentir que mis ojos arden —Al último edificio que fuimos… encontramos algunos cadáveres de médicos suicidas… y creemos que están experimentando también con ellos.

—Dices…¿Que se están volviendo sobrenaturales? —cuestiona Joshu con una expresión contrariada.

—Eso parece y no es bueno, porque ya no nos estamos enfrentando a simples humanos.

—Quizás no sea así.

—Yo sé lo que vi, Merida —observó a Kassia y luego vuelvo a mirarla —Ambas lo vimos.

Pronto los demás olvidan el pequeño intercambio de palabras y continúan hablando sobre lo que creen que está ocurriendo. Cuando nadie la observa ella hace una mueca que no logro comprender, dejándome una sensación incómoda.

Tomo una nota mental para hablar con Dorian del tema pero esta queda en el fondo de mi mente cuando vemos a un grupo de hombres aparecer corriendo entre los árboles.

Uno de ellos dispara su arma a Kassia pero la bala no le hace daño  ya que alcanzo a empujarla. Veo a uno de los hombres intentando cambiar de forma, más este es incapaz de completar el cambio y cae muerto en pocos segundos.

Tyler y Dorian se deshacen de los demás rápidamente y luego, nos quedamos en un silencio tenso que nadie parece atreverse a romper.

—¿Aún crees que estoy mintiendo? —le pregunto a Mérida cuando pasa por mi lado.