El destino de Melania

CUATRO

Esta mañana abue recibió una llamada de sus amigas para invitarla a comer y de ahí irían a hacer las compras, le dije que fuera sin cuidado y que no se preocupara por mí. La verdad me fue muy bien ya que así pude escaparme de casa por un momento y dar una visita a la biblioteca.

Cada año que vengo a Chapel Hill, visito la biblioteca para llevarme un libro y tenerlo durante mis vacaciones y antes de irme lo devuelvo. Pero esta vez no he venido con ese propósito, he decidido que no hay mejor lugar para buscar respuestas sobre Adrien que un buen libro.

Al entrar a la biblioteca, un olor conocido  me invade, la madera de los estantes y los libros se unen para formar una brisa amena. Me dirijo al mostrador, dispuesta a saludar al señor Parrish, pero en su lugar me encuentro a una dama de cabellos plateados y lentes a media nariz.

―Bienvenida― sonríe de oreja a oreja― ¿podrías dejarme tu nombre en el libro de registros por favor? ―.Tomo el libro y escribo mi nombre, le sonrió levemente y emprendo mi búsqueda.

Camino entre los libreros como esperando que la información salga por si sola, pero es que en realidad no sé por dónde comenzar a buscar.

¿Podría ser en la sección de fantasía?

¿Historia?

Tomo lo primero que veo en historia, pero lo único que encuentro son temas de guerras y la vida en nuestros antepasados. Esto será más difícil de lo que pensé, y ni siquiera sé si estoy lo suficientemente cuerda como para estar indagando sobre este tipo de cosas.

Regreso al mostrador y la bibliotecaria me echa un vistazo por encima de sus lentes.

― ¿Necesitas ayuda? ― baja su periódico y lo coloca sobre el mostrador.

―Quisiera saber dónde puedo encontrar algo― digo― algo que contenga el significado de símbolos― meto la mano en la bolsa de mis vaqueros y extraigo un papel con el símbolo del cuello de Adrien, o al menos lo que logre recordar del tatuaje, se lo entrego y esta lo observa con suma atención.

Su mirada se centra de nuevo en mi y se levanta apresurada de la silla.

―Me impresiona ver este tipo de consultas― cuenta mientras me guía por el pasillo principal―. La gente normalmente viene a buscar historias de hombres lobo y vampiros― ríe por lo bajo.

Llegamos al final del pasillo y damos vuelta hacia un pequeño librero que ciertamente nunca lo había visto. Busca entre los títulos hasta que por fin da con lo que desea.

El libro tiene como título Mitos y Leyendas sobre los símbolos.

«Claro que si Melania», me reprendo mentalmente.

―Tal vez aquí puedas encontrar lo que buscas― me lo entrega y lo tomo agradecida― ¿Se puede saber de dónde sacaste ese símbolo? ―la pregunta me toma por sorpresa.

―Lo vi en una página de internet. ―Es lo primero que se me viene a lamente―. Soy quisquillosa y me gusta indagar sobre cosas nuevas, así que este es mi nueva víctima― levanto el libro y sonrió tímidamente―. Gracia por la ayuda. ― Doy media vuelta y me dirijo al área de lectura.

El libro parece no haberse abierto en siglos. Dentro está lleno de polvo, y las páginas parecen estar a punto de romperse de lo secas que están. Pero eso no importa, vine a buscar respuestas y eso es lo que hare.

Comienzo a pasar las hojas pero lo único que veo son mitos sobre los símbolos de hombres lobo, tribus y brujos, ninguno se asemeja a lo que estoy buscando. Entre más avanzo más me siento tonta, y si en verdad no encuentro algo, dejare todo por la paz y hare como que nada ha pasado.

Doy vuelta a la última página y mis ojos no creen lo que están viendo.

Es lo que estaba buscando y rápidamente comienzo a leer:

 

Personas acreedoras a poderes mágicos vivían en una comunidad a las afueras de Inglaterra. Convivían bajo el mando de la Maestra Mayor, quien a su vez proclamaba la paz entre sus súbditos siempre y cuando no se violaran sus leyes.

Todo transcurría con normalidad en la comunidad hasta que un pequeño grupo de vasallos propuso derrocar a la Maestra con el argumento de que eran espíritus libres y que no necesitaban rendirle cuentas a nadie, esto altero a su señora e inmediatamente los desterró del clan. Los rebeldes abandonaron sus viviendas y junto con ellos otro grupo más que los apoyaba.

Vivieron en completa tranquilidad durante un tiempo hasta que los rebeldes juntaron la fuerza de su poder y atacaron a la comunidad, su ejército se unió a un grupo de brujos malignos y poderosos y juraron acabar con todo aquello que no estuviera de su lado.

La Maestra Mayor no dudo y proclamo el abandono de sus tierras, cada familia tenía la obligación de irse sin decir ni una palabra sobre su destino, y solo estarían comunicados por medio de una señal. Utilizo su magia más poderosa y marco a cada uno de sus súbditos con un símbolo especial llamado Fernweh, este, de igual manera debería aparecer el cuello de sus siguientes generaciones.

Todo fue hecho con el fin de poder distinguir entre sus fieles creyentes y sus enemigos conocidos como Muérganos.

 

¡Pum, Pum, Pum! Mi corazón late sin cesar dando martillazos en mi pecho.

No exagero si digo que me duele la cabeza, pero todo es mi culpa. Debí dejar este tema por la paz, pero es que verme ignorante ante ellos me hace sentir tan vulnerable, y ahora que he encontrado respuestas a todas mis preguntas, tendré que hacerme la indiferente y no mostrar diferencia en mi comportamiento.



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En el texto hay: romance entre humanos y magos, magia y amor

Editado: 21.06.2018

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