NARRA KAIL
Su esbelta figura sobre sentada sobre una piedra, iluminada por el sol, la hacía ver a un más hermosa, en su cara se veía una sonrisa tranquila y tremendamente bella, intente acercarme un poco para que me persiviera pero un conflicto interno se apoderó de mi, mi lobo intentaba huir al lado contrario de ella mientras que algo más dentro de mi me obligaba a ir con hacía ella.
De repente una voz macabra dijo entre risas de una manera que me helo la sangre.
—te encontré Elisabeth
—…que?
Sentí como lo cuerpo cambiaba en contra de mi voluntad, mis huesos se rompían y re acomodan de una manera aún más dolorosa de lo que fue mi primera transformación a lobo, mi pelaje ahora era mucho más oscuro y para mi mal infortunio no podía tomar el control, intente luchar contra aquella conciencia que me impedía tomar el control pero era imposible, mi lobo tampoco contestaba, estaba completamente atrapado en mi propio cuerpo que se movía a voluntad propia.
Aquella conciencia me dejó ver lo que sucedía, era mi preciosa mate, estaba asustada, al parecer estaba hablando con su loba ya que estaba distraída y aún no notaba mi presencia.
—oye niño lindo,¿Quieres ver algo divertido?
—de que estas hablando? Déjame tomar el control AHORA MISMO «podía sentir la rabia naciente en mi»
—hoo pobre Kail, ahora mismo verás lo que haré
Acto siguiente estaba sobre aquella chica, en sus ojos podía apreciar el terror por el que estaba pasando, acercó la nariz a su cuello y me deleite por su exquisito aroma.
—ella huele demasiado bien... «lamiendose los colmillos»
—que estas haciendo? ¡¡Alejate de ella!!
—¿No crees que deberías jugar un poco más?
Saco a relucir los colmillos frente a ella, podía sentir su terror, podía escucharla rogar por ayuda, pero no podía controlarme, el estaba tomando total posesión de mi cuerpo, sentí el sabor de hierro en mi boca,
—¡NOO!, ¡PARA TE LO RUEGO!, ¡MORIRA!
—si ella muere, yo seré libre.
Veía su sangre esparcida por todo el pasto a su alrededor, el seguía con los colmillos clavados en su cuello viendo como en sus hermoso ojos se apagaba la luz de su vida lentamente.
—POR FAVOR DETENTE, TE LO RUEGO, TE LO IMPLORO, ¡¡QUE ALGUIEN ME DETENGA!!
Sentía como bajo mis patas ella iba perdiendo cada vez más la fuerza, su esperanza de vida, de la nada una luz apareció delante de nosotros.
—¿Qué crees que estas haciendo criatura asquerosa?
—tu, a quien crees que llamas criatura asquerosa?, eres sólo una ninfa insignificante.« dijo utilizando mi voz»
—es suficiente, si no paras ahora ella morirá.
—y tu crees que me importa si muere o no?
—tal vez a ti no te importe pero ella, es quien será mi maestra así que lárgate.
Con un movimiento de su mano, las plantas al rededor empezaron a enrollarse entre mis patas, me atraparon, me sentía severamente agradecido al ver que aún estaba aquella hermosa chica respirando, si algo le pasará, perdería toda esperanza en mi vida, ella es mi luna y mi luz más preciada.
Sentí poco las ramas me apretaba cada vez más y más sobre todo mi cuerpo.
—al parecer no tienes total control sobre ti..., muy bien, sólo me desare de ti.
La ninfa, señaló un lugar detrás de mi, he inmediatamente las plantas que me sujetaban empezaron a desplazarse a la dirección que ella indicó, cada vez se veía más y más lejos, una tenue luz se veía a lo lejos, espero que ella este bien.
Al poco tiempo las plantas dejaron de moverse, al contrario estas subieron y un tallo se incrustó en mi boca obligándome a morder la.
—eres un idiota Kail
—que muerda estabas haciendo?, ¿Querías matarla?
— Jajajaja después de ver eso ¿Aún lo preguntas?
—eres un...
Me sentí débil, todo daba vueltas y vueltas, mis ojos pesaban al mismo tiempo que sentí como las plantas me saltaban gradualmente.
—procura no morir, esto te pasa por idiota
—de... que estas hablando? «dije aún mareado»
—esa plantas que mordiste no es cualquier planta, tiene potente sustancias que inducen a una parálisis temporal y desmayos, ahora bien, mira abajo
Bajé lentamente mi cabeza para no caer y para mi gran sorpresa me encontraba en el borde de un precipicio a punto de caer
—¿Qué mierda?
Intente de un paso a tras pero las plantas me estaban empujado, querían lanzarme por el precipicio para que muriera, estaba a medio centímetro de perder completamente el control y caer, Lo malo es que ese tallo me dejó muy débil y perdido, no puedo pensar bien, me siento acorralado además de que estoy a punto de morir.
Sin más que poder hacer, me deje caer por el precipicio, el aire en mi cara a gran velocidad me impedía respirar, además de unas ligeras gotas de agua queechar chocaban contra mi cuerpo.
Cerré mis ojos esperando a caer al fondo del precipicio y morir pero este no llegaba, una gran precisión pasó justo minutos antes de caer y me tomo en brazos cargándome, una hermosa chica de cabello plateado con ojos tan rojos como la sangre
—vaya, yo que vine a buscarte por que supuse que estabas perdido y te encuentro cayendo por un precipicio, que interesante cita
—tu...¿Quién eres?¿De que esta hablando
—vaya, cierto, tu no me conoces, es un placer soy la hija de aquella tipa loca que conoces. «dijo alzando sus hombros restandole importancia»
—espera entonces tu eres la hija de Julia?
—sipi
Me quedé en shock por un momento y no era por la hija de julia si no por el sabor metalizado en mi boca, la sangre de mi mate aún estaba en mi boca, ya de humano, aún tenía ese sabor en mi lengua y colmillos, pase lentamente mi mano por mío labio inferior.
—oye estas bien?
—yo.... ¿Qué hice?
Me desmorone, caí de rodillas al suelo bajo la atenta mirada de aquella chica, aún que realmente eso era de menos ahora, yo casi mate a mi mate , MI MATE, aquella con la cual comparto, la cual debía de proteger a toda Costa, yo casi la mató, aún tenía de su sangre eny mi boca y ropa, mis manos con ese olor característico de ella, me quedé atónito.