Capítulo 22: Decisión

Luego de que recibimos la noticia de que Lara dejaría el trabajo para poder hacer lo que a ella le gusta, Gorge empezó a buscar personal para cubrir el hueco que ella había dejado, han pasado dos días desde que se marchó, en estos días que pasaron también he estado pensando en aquella oferta, me emociona mucho pero... ¿Podré hacerlo bien?, no me da miedo fracasar, lo que me causa es frustración, sé que hacer algo mal es parte de la vida, pero sinceramente es algo que no quiero aceptar, no sé por qué pero no puedo hacerlo.

—Rayos... ¿Qué les pasa a estos tipos? ¿no quieren trabajar o qué?

Ahí va de nuevo, Gorge se está quejando otra vez, así estuvo todo el día de ayer, al parecer no hay tantas personas que les guste la idea de ser detective.

—Relájese señor, va a envejecer más si no lo hace.

Tomé más confianza con Gorge, creí que ya era hora, llevamos creo que... un mes trabajando juntos, creo que, es más de un mes, ya ni lo recuerdo.

—Es tan difícil, no puedo encontrar a nadie que quiera trabajar como detective... además si tú también te vas, las cosas se me complicaran más de lo normal.

Ese es el problema, pero debo decir que él es un poco ambicioso, pese a que hay bastante gente aquí él quiere tener personal de sobra, pero también creo que tiene razón para pensar así.

—Por ahora, no he decidido nada.

Su mirada cambio hacia mí, es una mirada penetrante.

—Deberías hacerlo, el tiempo se acaba, si quieres perfeccionar estas habilidades deberías ir a un lugar donde aprendas más, y ese lugar es con ellos.

No puede decir que no tenga razón, pero no es como que uno pueda cambiar de lugar de trabajo, así como si nada.

—Creo que ya me he acostumbrado a estar aquí.

No puedo pensar en cómo me ira allá.

—Deja de pensar como lo haría un viejo, eres joven puedes hacerlo, deberías aprovechar cualquier oportunidad para aprender, de eso se trata la vida, incluso yo que soy viejo si aprendiendo cosas.

Si él lo dice, siempre he aceptado los consejos de las personas mayores, ellos tienen más experiencia en la vida por lo que se me hace imposible ignorarlos.

—Ve a casa a descansar y a pensar, hemos terminado por hoy.

Tome mis cosas y me fui de la oficina, comencé a caminar por la ciudad, nunca hice esto, pero se siente increíble, familias sonriendo, gente feliz... creo que... esto podría ayudarme a decidir si quiero ir o no... creo.... Que puedo priorizar mi felicidad, creo que a lo que se refería Gorge es a que llegados a una cierta edad lo único que quieres es estar tranquilo y no arrepentirte de tus acciones, y si tienes familia, te asegurarías de garantizar su felicidad... o algo así.

—Qué difícil es la vida.

Murmure, es la primera vez que digo algo como eso, pero es cierto la vida es algo difícil de entender, puedes ser la persona más amable del mundo y te pueden pasar cosas horribles, también puedes ser la persona más horrible del mundo y ten pueden pasar cosas bonitas... la vida es inentendible, pero cuando era pequeño escuche la frase "la vida no es para que la entiendas, es para que la vivas" una frase digna de cualquier libro...

—Tienes razón...

Escuche a alguien decir eso, voltee para ver de quien de quien se trata y... no lo conozco.

—Pero, la hace interesante, ¿no lo crees?

Es un hombre que no conozco, me senté en el columpio sin saberlo ya que estaba pensando demasiado y este tipo apareció de la nada, que miedo, aunque lo que dijo... puedo decir que es verdad...

—¿Quién eres?

No pude evitar hacer esa pregunta.

—Un gusto, me llamo Tuyan, ¿y tú?

Que nombre tan extraño, pero parece un buen tipo.

—Me llamo Yoan, también es un gusto para mí.

—Bueno, me gustaría quedarme a conversar un poco más, pero tengo que empacar, me ha llegado una oferta de trabajo y no la puedo rechazar.

¿Coincidencia? Ya me ha pasado con Lara, pero ¿dos veces? Es demasiado raro para mí, pero... tal vez él pueda ayudarme...

—¿Y tu trabajo actual? ¿lo dejaras?

No nos conocemos, pero no he preguntado nada fuera de lugar.

—Pues... si, la oferta es mucho mejor, ahora que soy joven puedo priorizar la experiencia, después cuando sea más viejo priorizare el dinero, puede que me arrepienta, pero quiero ser feliz.

Esas palabras son todo lo que quería oír, ahora ya sé que es lo que hare.

—Dicho esto me voy, ¡adiós!

En ese momento llame al número de la tarjeta que me habían dado en aquel momento.

—Hola, ¿con quién tengo el gusto de hablar?

—Soy yo, Yoan, me interesa la oferta....

Al día siguiente empaque mis cosas, para partir, mañana me iré, ahora tengo que pensar.... ¿Qué es lo que hare con mi hermana? Si bien puedo enviarle dinero en lo que mama llega, pero no he recibido ningún correo ni mensaje de ella, lo que puede significar que... ¡ella olvido que dijo que vendría! Bueno quitando eso, ellos dijeron que me pagarían el viaje y la estadía, por un mes, que es el tiempo que me probaran si no, ellos me pagaran el tiempo que trabaje y luego tendré que salir de allí, espero cumplir con sus expectativas.

—Oye, mamá envió una carta.

¿Quién hace eso hoy en día?

—Pues léela para saber qué es lo que dice.

Espero que sean buenas noticias, y espero que no se haya olvidado de venir.

—Aquí dice; Queridos hijos lamento informarles que olvide que tenía que visitarlos y sin saber me gaste el dinero que era para eso, por lo que deberán juntos hasta nuevo aviso.

Esto tiene que ser una maldita broma... creo que esta es una de las razones por la que me fui de casa a los diecisiete años, pero bueno no tenemos más remedio que hacer lo que dice... ¡Si como no, esa mujer cree que es fácil convivir con mi hermana, pero es todo lo contrario, a duras pena logre que dejara de ensuciar todo mi departamento! Pero... la pregunta ahora es ¿tendré que llevarla? La respuesta es más clara de lo que parece.