El diario de andrea

El diario

Una mañana nublada, lluviosa y triste, mi padre llevó a mi mamá a un hospital, ¡claro que estaba apunto de darme a luz!, pero mi padre siempre quiso un niño para enseñarle a maltratar mujeres.

Tras doce horas en el hospital, por fin salí de esa barriga enorme que cargaba mi mamá, obviamente mi mamá no me podía vestir así que fue mi padre a vestirme y a arreglarme.

Mis papás siempre peleaban por mí, el le decia "¡Porque no abortasté a aquella mocosa!", ella como siempre tenía que aguantar su mal comportamiento.

Conforme pasaba el tiempo,yo iba creciendo pero también me daba cuenta de que padre tenía, después de cumplir los cinco años, mi padre... se aprovechó de mi, yo no sabía que me estaba pasando, así que seguí adelante, el me amenazó con que si le decia algo a mi madre el nos mataba. ¡Fue el peor día de mi vida!

Cuando cumplí los ocho años de edad mamá me regaló un diario en el cual escribí todo lo que pasaba en mi casa.

Mi mamá descubrió que me estaba pasando y yo reuní valor y fuerza para poder contárselo, en ese mismo día mi madre hecho a mi padre de mi casa, y yo le hice un dibujo de como fue lo que me pasó.

Al día siguiente mi mamá se preparaba para llevarme al colegio y de repente pasó el coche de policía y lo mi mama lo paró, le contó todo y de inmediato fuimos a denunciar , ella le mostró el dibujo, nosotras conseguimos poner la denuncia y hacer que no se acerque a nosotras.

Tras tres años y medio de interrogaciones,días negros y burlas de toda la gente hacia nosotras, por fin dios todopoderoso hizo que nosotras ganaremos todos los juicios y lo metieron preso.

Mi madre se casó de nuevo con un hombre que no conocía pero ella aseguraba que ella si.

A mis quince años de edad empecé a tener depresión y a cortarme las venas porque no soportaba que mi madre me maltratara a su manera, no, ella no me violaba ,solo me gritaba por todo o me pegaba cuando no tenia motivos.

Le pedí consejos a mi única mejor amiga pero no sirvieron.

¡ya estaba harta de todo quería morir!

Un día le pedí dinero a mi amiga pero no le dije para que lo utilizaría, y compré una soga y una pistola.

Escribí una carta de suicidio para mis padres y otra para mi amiga, dejé la carta de mis padres en su habitación y fui a la casa de mi amiga y le dije que asta las tres del medio día que no la lea

Llego el momento de irse de vacaciones para siempre, eran las dos cincuenta y nueve del medio día, mi amiga leyó la carta y de inmediato salió de su casa para detenerme ,pero cuando llegó ya era demasiado tarde para detenerme, ya me había suicidado. Alexandra que era mi amiga empezó a llorar y a echarse la culpa de que ella le presto el dinero, a mis padres les dio igual que su hija había muerto.

Y hasta aquí este diario.

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En el texto hay: el sufrimiento de una ninia

Editado: 25.11.2019

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