Hay días donde puedes respirar tranquilamente, puedes reposar tu cabeza sobre una almohada y dormir cómodamente..
Pero esos días se vienen a bajo cuando llega algo que se llama "recaida" sí, tal como la palabra lo indica, es otra caída, a tus miedos, a tus tormentos, a ese pozo profundo en donde no puedes respirar, en donde la oscuridad te asfixia y consume tu energía y tu vitalidad..
Pensamientos de muerte te persiguen, te endulzan los oídos y de repente piensas que esa sería la única forma de acabar con todo ese tormento.. ya no ríes, ya no sientes placer por comer, ni siquiera comes, todo te da miedo y ya no duermes y si duermes es sólo para tener otra jodida pesadilla y despertar más cansada.. esa cama te tiene atada, te encadena y se hace pesado intentar levantarse.. respirar cuesta y se hace cada vez más pesado.
Pastillas, tras pastillas, tras gotas y un poco de agua.. en eso consiste tu estabilidad, en eso consiste la única forma que tienes para que el aire que respiras al menos sea un poco más ligero..
Quieres escapar, quieres desaparecer..
Ya no quieres vivir, pero a la vez quieres vivir.. hay una batalla interna tuya..
Y muchas veces vencemos y salimos del pozo una vez más..
Vemos el sol, respiramos con tranquilidad y nos vamos a dormir con calma, abrazando nuestras vidas por al menos un poco más de tiempo..