Daelyn
Pasarón casi cinco días desde la fiesta de bienvenida.
Desde ese entonces, no he vueto a salir de la cabaña porque siento mucha vergüenza por volver a perder el control de mi don...no, esto no es un don es una maldición. Afrodita aveces viene a verme a dejarme comida, es a la única que permito que ingrese a Orión no lo quiero ver nunca en mi vida. Él tambíen tiene un don porque una persona normal no te toca el rostro y te hace ver unos supuestos recuerdos desagradables.
Supuestos recuerdos que no recuerdo haber cometido. Yo nunca haría daño a alguien menos a mi hermana Crystal, a pesar que no le agrado, nunca tuve pensamietos de querer ahorcarla o empujarla al mar. Mucho menos burlarme de la desaparición de Onie.
Entonces ¿porque siento que esos recuerdos son reales? No lo entiendo. Yo no soy ella. Quiero preguntarle, sé que él tiene las respuestas a mis dudas pero no quiero verlo, no quiero tenerlo cerca. Siento un poco de miedo.
Creí que Orión era una persona amable pero de un momento a otro me muestra otro ''él''. ¿Por qué los hombres que conozco son tan... complicados? Con kalel no puedo comprender sus sentiemientos; me rechazó y de un momento me besa y con Orión creí que era alguien amable porque me llevará al reino Esmeralda a ver a mi hermana, pero luego me acaricia mi rosto y casí me quedo sin respiracion, literalmente.
Creo que no es el momento de pensar en ellos, debo enfocarme en salir de aqui e ir al reino Esmeralda, pero no quiero que Orión me lleve, debo hablar con Afrodita.
Salgo de la cama y me acerco al espejo, ultimamente cada vez que me veo al espejo noto algún cambio, mi cabello lo noto un poco oscuro y tambien que he dejado de usar vestidos de colores calidos por los ''vestidos'' que usan aqui, me siento un poco incomoda usar esto pero son las unicas ropas que usan aqui, lo positivo es que mi cabello largo me cubre como si fuera un abrigo. Es momento de salir de aquí y buscar a Afrodita, al abrir la puerta me sorprendo por el desastre que hay afuera.
-¿Que hice? -pregunto mirando los árboles y caballas destruidas.
-Tú no hiciste nada yo fui el culpable. -su voz me hace sentir nerviosa y asustada.
Orión esta sentado a lado de la puerta, mirándome con lastima.
No le respondo y cierro la puerta.
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Editado: 04.11.2024