Me quedé parada ahí como estúpida. Era imposible. Después de tantos años y aún así me parecía que era la misma mujer que se había ido hacia casi 9 años de esta casa. Por mi culpa.
-¿Alexia?
Me limité a asentir. No tenía ni idea de qué hacía ella aquí. Dëni había muerto hacia ya varios meses y hasta ahora ¿se dignaba a aparecer?
-¡Mamá, hay una mujer en la puerta!- Tasha gritó.
Maldita sea.
Lo que menos quería era que Janine la viera ahora. Tal vez era más prudente que Daniel hablara con ella primero.
Los tacones de Janine resonaron en la madera y se quedó parada a mi lado. Observó a Corine con cuidado hasta que cayó en la cuenta.
-¿Puedes decirle a papi que venga Tasha?- Tasha salió corriendo al comedor- Adelante.
-Gracias.
Corine entró cargando una pequeña maleta y observó con cuidado la casa.
Todo estaba distinto desde que ella se había ido. Janine cambió la decoracion después de que las gemelas nacieron. Esta ya no era su casa.
-¿Asi que tu eres Janine?- preguntó Corine, con un toque de sorpresa o algo asi- Charlotte me habló sobre ti hace mucho tiempo.
La juventud de Janine estaba en toda su apariencia. Aunque Corine se conservaba bastante bien de todos modos.
-¿Qué ocurre cielo?
Daniel se quedó petrificado cuando vió a su ex- esposa. Janine se encogió de hombros pero sabía que no estaba bien.
Podía ser una visita cordial o no, pero era claro que no le hacía gracia que esta mujer se apareciera aqui.
-¿Qué haces aqui?- el tono de Daniel era seco, inexpresivo- ¿Dónde dejaste a mi hermano?
Auch. Golpe bajo.
Corine sólo bajó la vista y no dijo nada ante este comentario. Creo que estaba consciente de que fue un gran error y acto de traición haber cambiado a Daniel por su propio hermano. El querido tío Dom. Era un bastardo. Jamás me había caido bien.
-No he venido a pelear, sólo queria verla y dejarle flores y claro, saber cómo estaban ustedes.
-Creo que será mejor que lleve a Tasha a su cuarto.
Janine tomó a Tasha y la llevó rapidamente por las escaleras. Asi que me fui al comedor. Lena y Emma seguían ahi platicando con Nina.
-Querida parece que viste a un fantasma- Emma me miró preocupada- ¿Qué pasó?
-Corine está en la sala con papá.
Lena puso los ojos como platos y dejó la taza a medio camino.
-¿En serio?
-Si.
-¿Y qué es lo que quiere?
-No lo sé tía, sólo dijo que vino a verla, a Dëni.
¿Por qué hasta ahora?
¿Por qué no el dia del funeral?
¿Por qué esperar tantos meses para venir a ver la tumba de su única hija?
Incluso, aunque conviví más o menos un año con ella en esta casa, me seguía sientiendo incómoda. Corine se había comportado como una perra cuando yo llegué a formar parte de su familia y eso jamás lo iba a olvidar.
Jamás iba a olvidar a las personas que me maltrataron de cualquier forma posible y la lista se iba haciendo más larga.
Decidimos quedarnos un rato en el comedor pues tal vez no era bueno interrumpir la plática a la cual, Janine se había unido. Me moría de ganas de saber que quería pero hubo algo que me sacó de esos pensamientos.
Comenzó a llover. Por un momento creí que sería la típica lluvia de estos meses pero no. Fue como si una gran tormenta se descargara aqui precisamente. Se escuchaba horrible. El sonido de la caída de la lluvia en el techo era terrible y por un momento pensé que se vendría abajo.
No se podía ver nada y los truenos y relámpagos no tardaron en aparecer. Era algo un poco siniestro.
...
Y así pasaron dos horas y la lluvia no cedió. Eran casi las 6 de la tarde y estabamos todos en la sala.
-Necesito ir a casa o mamá me matará.
Lena se había pasado casi media hora tratando de llamar a su madre pero la señal era un asco y no lograba localizarla.
Yo tenía a Tabitha en brazos pues eran algo miedosas y no querían estar arriba solas. Me tenía tomada de la mano y apretaba muy fuerte cada vez que un trueno sonaba o un relámpago iluminaba el cielo ya casi nocturno.
Al cabo de un rato se quedó dormida al igual que Tasha. Y Corine no dejaba de mirarlas, y era por una obvia razón.
Tardamos casi un año en darnos cuenta que las niñas eran muy parecidas a Dëni o mejor dicho, idénticas.
Siempre pensé que por eso se llevaban tan bien con Dëni y eran tan cercanas. Se parecían a Daniel. Era muy gracioso que no tuvieran nada en común con sus madres.
Corine tenía un semblante triste y las miraba casi con admiración. Me preguntaba por qué no tuvo más hijos. Aún era joven y capaz. Por supuesto no podia preguntarle eso.
-¡Anthony!
Lena se levantó de un salto cuando por fin su hermano le contestó.
Fue hacia la ventana para tener mejor señal y aun asi era difícil hablar con él.