Sae De era un omnivoro, lo aprendio al pasar el tiempo. Aunque solo puede comer algunos tipos de carne.
Crecio bastante bien y durante estos años se ha enfocado en sobrevivir a aquellos peligros que siempre estan presentes.
Si bien crecio con poco cuidado, puede decirse que sabe sobrevivir...
...
Pero esta vez, todo comienza con una misteriosa y peligrosa raza.
Una de las razas que se encuentran sobre muchas y pocas veces tenian depredadores.
Al tener tanto poder, los dragones formaron un imperio donde gobiernan aquellos con la sangre capaz de cambiar su dragón.
La familia imperial, con la capacidad de volver su cuerpo en un dragón europeo y uno asiático. Es la linea de sangre mas pura en los dragones.
Esta familia esta formada por cinco integrantes, el emperador nombrado Roat Ju, la emperatriz Yei Mei, el principe heredero Laionel, el príncipe imperial August y la princesa imperial Raelmi.
Laionel era el que heredaria el titulo de emperador una vez su padre se lo otorgará y siendo el siguiente al mando del trono tenia que estar informado de todo. Sus estudios se centraban en plantas, bestias, el imperio y debe saber pelear.
Pero ahora no sabe a donde se dirigen, solo sabe que es una prueba de caceria.
Tenia 10 años lo que lo convierte en un dragón completamente listo para cazar.
Llegaron al lugar y se le explico lo que debia hacer...
Se podria decir que era parte de las bestias mas inteligentes, pero hasta él mismo se confundió por su misión de buscar una presa en un lugar como este.
Pero no sabia si podia negarse asi que opto por encontrar algo rápido y matarlo.
Volaba de forma rapida mientras observaba todo en busca de algo interesante, pero no espero ver un niño recogiendo lo que parecian hierbas.
Penso en atacar, pero algo en él lo detuvo y lo incitó a acercarse. Cuando quizo hacerlo, pudo observar mejor al niño.
Tenia su cabello en blanco y negro, su piel era clara, llevaba un pedazo de tela gastado a modo d capucha.
Se acerco de forma silenciosa hasta estar a su lado.
— Hola — Saludo de forma amable.
El niño volteo asutado y salio corriendo dejando atras un monton de hierbas arrancadas.
Laionel fue tras él — ¡Oye! ¡Espera, no era mi intención! — Aquel niño era muy rapido, pero al final él tenía mucha más ventaja.
No hizo falta correr tan rápido para alcanzarlo y cuando estuvo apunto de agarrarlo, el niño cambio su forma metiendose a un hueco en un árbol.
Laionel se agacho para verlo.
Era un conejo, uno lindo. Su pelaje era manchado y se podria decir que se veia esponjoso.
Una sonrisa se formo en su rostro y extendio la mano tratando de tocarlo, pero el conejo se alejo.
— Puedes salir, no voy a dañarte — Explico Laionel.
El conejo se nego y al ver como insistía en tocarlo decidió morderlo, pero fue un error... sus dientes terminaron lastimados.
Una pequeña risa se escucho desde fuera — ¿Estas bien? — Pregunto Laionel.
Sae De quizo volver a intentar, pero esta vez resultó peor.
— Mi piel es demasiado gruesa — Dijo a forma de burla.
El conejo solo se alejo resignado y esperando a que se valla de ahí... pasaron varios minutos y seguia ahi e igual de insistente.
Laionel queria sacar al conejo asi que decidio ganarse su confianza.
— ¿Tienes hambre? — Preguntó sin tener respuesta — La hierba que estabas comiendo se veia algo seca... — Esperaba otra no respuesta, pero esta vez si la hubo.
— Es lo unico bueno que pude encontrar — Sae De respondió sin querer dar muchos detalles.
— Pero ahi un monton de hierba verde y fresca, ¿por que no la comes? — Laionel observo su alrededor.
Sae De no quizo contestar y guardó silencio.
Laionel se levanto mientras sacaba a relucir sus alas — Ire por algo de comer — Sus pies abandonaron el suelo — Quedate aquí — Se fue tan rapido como llego.
Sae De realmente no se iba a quedar ahi solo esperando a qu llegue y lo devoré asi qu salio del hueco rapido y regreso a la hierba.
La hierba parecia intacta y queria comerla, pero miro la hierba verde... casi no se acerca ahi por que esa hierba era muy alta y le daba miedo que hubiera un depredador acechando.
No suele comer la hierba corta que hay aqui, sabe a tierra así que es mejor comer hierba alta, pero es peligroso.
... Decidio acercarse con cuidado y probar un poco, pero justo cuando llego fue tomado por el cuello.
Sentía garras y la respiracion pesada de un depredador.
Sae De tomo rapido una rama que estaba en el suelo y golpeo a su oponente.
Al ser soltado, se dio la vuelta mirando a un lobo con forma humana.
— Sabes pelear — El lobo sobo su cabeza y sonrio dejando ver colmillos — Estoy tan hambriento — Dijo en un tono tan desagradable.
Sae De apreto la rama — ¡Ni te atrevas! — Considerando que el lobo estaba hambriento podria estar muy debil... o muy agresivo.
Vio al lobo gruñir y sintio sus dos instintos pelear entre si debatiendo si escapar o pelear.
No tuvo tiempo de decidir cuando el lobo se abalanzó, por suerte reacciono rapido y lo golpeo en la cabeza.
Sae De miro caer al depredador y penso que era su victoria, fue un error ya que el lobo se levanto y lo volvio a tomar por el cuello.
Sae De quizo golpearlo, pero sintió como era asfixiando.
— Sueltame... — Respiro con fuerza — Maldito perro sarnoso — El agarre en su cuello aumentó de fuerza y estaba a punto de quedarse inconsciente.
Fue soltado de forma rapida y su agresor chillo de dolor.
— Largate — Escucho la voz del niño y con una vision borrosa miro como la espalda del lobo estaba completamente quemada dejandola al rojo vivo.
El lobo se nego a dejar su presa y volvio a su forma de bestia mientras gruñia.
Sae De iba recuperando la vision y cuando lo hizo, vio como aquel niño arrojo una llamara de fuego que quemo al lobo.
Se sintio mal al escuchar sus chillidos, pero tan rápido como comenzo a quemarse salio a buscar una fuente de agua.
Laionel se acerco a Sae De preocupado — ¿Te encuentras bien? — Miro su cuello viendo marcas de garras — Ese tipo te hizo mucho daño — Toco el cuello de Sae De ganándose una mirada aterrada.
Retiro su mano — Perdoname — Hablo culpable.
Por unos segundos el silencio goberno, hasta que Sae De se animo a hablar.
— Gracias... — Miro a Laionel — Tu me salvaste —
Laionel sonrio — No tienes que agradecer nada — Menciono nervioso.
— Me llamo Laionel — Se presento moviendo su cola de un lado a otro.
El hibrido rio un poco ante el comportamiento del chico — Hola Laionel, yo soy Sae De—
Editado: 06.12.2024