Capítulo 56 : El Verdadero Barrio Mágico

El enorme ser de humo con forma humanoide desciende lentamente hacia nosotros, nadie puede evitar asombrarse al observar como se acerca cada vez más, luego de unos segundos toca tierra, cubre todo el coliseo, provocando que cubra los rayos del sol, coloca sus manos y rodillas sobre el suelo en las afueras del coliseo, el público se aleja debido al miedo a lo desconocido, las actividades se detienen por la intrusión del enorme ser, yo sigo apuntando con mi dedo hacia el cielo, luego de segundos de silencio absoluto, el representante Aur comienza a hablar temblorosamente.

– No…no es posible que el Barrio Mágico sea eso. – Aur se centra en mí. – Esto ha de ser obra tuya. – Ahora la atención de los demás esta fija en mí. – Creíste que seriamos timados por un truco barato como este, ya he presenciado tu capacidad mágica y es muy factible que puedas hacer esa cosa que esta sobre nosotros, detente ahora mismo o sufrirás las consecuencias por alterar el ambiente de las actividades de finalización del torneo.

Aur ha caído preso de la desesperación, trata de dar una explicación razonable a aquello que no comprende, por mi parte sigo sonriendo altaneramente, provocando que aumente el desconcierto en Aur, se levanta de su asiento y golpea la mesa con ambas manos, volverá a decir cosas sin sentido pero es silenciado.

– ¡No pronuncies una sola palabra más!

Una voz la cual habla directamente a nuestras mentes es escuchada por todos aquellos que permanecen dentro del coliseo, como un acto intuitivo, levantamos la mirada en dirección del ser de humo.

– Me presento, soy el Barrio Mágico de esta zona, he venido por la petición de aquel joven, ha llamado profundamente mi atención desde el primer día en el que decidió hablar con una de mis Conciencias, es por ese motivo que también anhelaba tener un encuentro con él.

Los únicos que mantenemos la compostura al escuchar esa voz profunda y grave somos Idara y yo, los demás permanecen boquiabiertos al percatarse que esa masa de humo les dirige la palabra, en especial Aur, él se encuentra intimidado desde que el Barrio se presentó formalmente.

– Este jovencito definitivamente posee algo especial, siempre terminas por atraer a los demás, hasta el mismísimo Barrio Mágico ha decidido hacer acto de presencia, esta es la segunda vez en mi vida que puedo presenciar como responde al llamado de un Mago. – Idara me observa sin despegar la vista de mí.

El Barrio lentamente acerca su cabeza hasta el centro del coliseo, está a pocos metros de mí, ambos nos observamos mutuamente, pese a todo lo intimidante que pueda resultar ser, mantengo la calma sin problemas.

– Tal como fue solicitado por tu parte, nuestra plática no será escuchada por nadie más, vendrás conmigo a una zona aislada de toda intervención ajena.

Bajo mis pies aparece un portal el cual me transporta junto a mi asiento, la luz cegadora es muy deslumbrante, mi visión vuelve y puedo apreciar donde me encuentro, estoy en un lugar completamente blanco, el suelo es liso sin impureza alguna, no puedo apreciar el final solo un blanco puro por donde observe, en lo alto del cielo aparece un enrome portal, ingresa el Barrio en todo su esplendor, su mana ha aumentado exponencialmente en comparación de antes, se estaba conteniendo, si hubiera liberado esta cantidad de mana cuando apareció en el coliseo, es un hecho que más de alguno se hubiera desmayado por la presión que emite, puedo soportarlo, los relámpagos de energía son liberados a cada segundo, con ese nivel podría destruir La Tierra sin problemas, pese a todo, de alguna manera no puedo evitar emocionarme, comienza a descender, al mismo tiempo que empieza a perder su forma humanoide, se expande, hasta convertirse una colosal esfera de humo, finalmente se posa en el suelo, su mana sigue aumentando sin control, desde el centro de esa esfera una especie de onda comienza a recorrer todo el contorno que lo conforma, la forma esférica comienza a deshacerse, se contrae al mismo tiempo que diminutos seres de humo son expulsados desde su interior, al cabo de pocos segundos esa enorme esfera ha desaparecido, ahora estoy rodeado por un sinfín de seres de humo mientras yo permanezco sentado en medio de todos.

– Guillermo Domínguez. – Pronuncian todos esos seres al unísono provocando un eco constante. – Te escucharemos, revela el motivo por el cual solicitaste nuestra presencia. – Respiro profundamente, por lo que ha dicho puedo deducir lo siguiente.

– Lo comprendo, así que, en realidad todos ustedes son el Barrio Mágico De Londres, vigilas todo mediante esos seres de humo, mejor dicho, tu Conciencia, de alguna manera todos están conectados, es decir, todos son el Barrio Mágico, y al mismo tiempo, el Barrio Mágico es un solo ente.

No dicen una sola palabra, pero esto lo sospeche desde el primer momento en el que me topé con esa esfera de humo cuando queríamos ingresar a este lugar por primera vez, si el Barrio Mágico posee voluntad propia, debe de demostrarlo de alguna manera, no solo al limitarse en la selección para aceptar a quienes pueden o no entrar.

– Excelente deducción, eres el tercero que puede comprender sin la necesidad de explicar, pero, esa no fue nuestra pregunta. – Respiro profundamente.

– Antes de nada, respóndeme una pregunta. – Todos los seres afirman con su cabeza. – Tú que puedes observar todo lo que sucede en esta zona, ¿posees alguna manera de poder guardar ciertas imágenes o, al menos, revelar a los demás información sobre un determinado suceso?