Grecia, Kolonaki
01 Agosto 2017
Dimitris Alexiou Georgiou
La vida es un desastre y más cuando tienes unos padres que no sirven para nada.
Me despierto con el solo pensamiento de que, por culpa de la vida que mis progenitores decidieron tener, solo por plata, poder y un reconocimiento internacional, he perdido a mi hermana por un mal acuerdo que tuvieron con un narco de alto rango y por no aceptar lavar su dinero tomó represalias.
Ya han pasado dos años desde aquel trato que hicieron mis padres mal, que le costó la vida a mi pequeña hermana.
Me ducho, me cambio y salgo a despejar la mente ya que hoy es el aniversario de muerte de mi hermana, desde aquel día todo mi mundo se apagó y ahora soy el Dimitris al que hasta sus padres le tienen miedo.
Llegó a la tumba donde se encuentra mi hermanita.
-Isabella, no sabes cuanto me arrepiento el no haber estado contigo en esos momentos para poder evitar que te fueras de mi lado hermanita, ya mi vida no tiene luz, ni esperanza, me he convertido en una persona sin rumbo, ni dirección, cuanto daria por volver a verte aunque sea por un momento, escuchar tu voz y tu sonrisa- le digo recostado en su tumba, hasta que siento como caen gotas de lluvia en mi rostro.
Cierro los ojos y me sumerjo en la inconsciencia mientras llueve más duro cada segundo que pasa.
Siento como unas manos pican mi rostro, hasta que decido abrir los ojos. Cuando despierto no puedo creer lo que veo, solo lloro como hace tiempo no lo hacía.
Miro el dulce rostro de mi niña de rizos dorados y su bella sonrisa.
-Ogrito ¿Porque te culpas de lo que sucedió? , no tienes que culparte por algo que ni siquiera sabrías que sucedería- Me dice mi pequeña.
-No sabes cuanto me culpo el haberte dejado y no poder protegerte en ese momento, sino me hubiese alejado de la vida de nuestros padres y dejarte con ellos y no llevarte conmigo, aun estuvieras conmigo , alegrando mis días con tus sonrisas- le digo llorando abrazando su cuerpecito.
-No tienes que cargar con una culpa que no te corresponde hermanito, he venido a verte porque vi que estabas en un mal camino y sabes que me prometiste que no serias como nuestros padres y estas haciendo lo mismo que ellos- me dice sonriendo con lágrimas en sus lindos ojitos esmeralda.
-Hermanito es momento de que dejes de culparte y comenzar a vivir la vida de una manera mejor y saludable, dejando de hacer las cositas mal hechas y haciendo lo que realmente querías hacer con tu vida- me dice acariciando mi rostro- ¿Sabes ogrito?, he llorado contigo cada vez que tomas mi foto y me pides que te perdone, que te perdone por no protegerme de esos matones, pero hermanito no me escuchaste cuando te decía que no tenías culpa de nada, que fuiste, eres y seguiras siendo un excelente ogrito para mi.
-Ya es momento que dejes de culparte y cumplir tus sueños, no quiero seguir viendote triste o en esas carreras ilegales, donde estaba desesperada pidiendo a nuestro padre de los cielos que no permita que te hagas daño le rogaba por tu vida, porque desde que me fui solo has hecho cosas que no son buenas ni para ti ni para mi, ya que estoy contigo en todo momento- me dice.
-No sabes cuánto extraño jugar contigo a la princesa y el ogrito, o cuando me despertabas con besitos o me dabas cachetadas ya que no quería levantarme, extraño todos los momentos que pase contigo, porque me dejaste solo princesita, te necesito denuevo conmigo- le digo llorando y abrazando su cuerpo.
-Ogrito, solo vine porque pedias verme y yo estaba triste viendo como dañabas tu vida- me dice - debo volver al cielo, recuerda que te amo ogrito, no me olvides por favor y recuerda que siempre estoy contigo aunque no me veas- me dice y yo estoy llorando ya que no la veré más- promete que reconstruirás tu vida, te contaré un secretito, no debes decirle a nadie, vendrán momentos agradables hermanito y tendré sobrinitos- me dice con una sonrisa traviesa y yo estoy confundido.
-Issi pero ni novia tengo para darte sobrinitos, hermosa- le digo.
-Lo que hoy no entiendes, lo entenderás mañana hermanito, ya es hora de irme, te amo Dimi, no lo olvides jamás, sino vendré y te dare muchas cachetadas y le daré una patada a tu amiguito jum- me dice media enojada.
-Sabes que no te olvidaré jamás Issi, yo también te amo mi dulce princesita y pegale a cualquier que se te acerque¿si?- le digo con los ojos cristalizados y una sonrisa.
-Ni así dejas de ser tan celoso ogrito, pero prométeme que ordenaras tu vida y serás una mejor persona ¿lo prometes? por el meñique- me dice mi angelito.
-Lo prometo mi lindo angelito- le respondo llorando ya que se irá de nuevo al cielo.
-Te amo Dimi, adios ogrito- Se despide con una tierna sonrisa y sus ojitos cristalizados.
-Te extrañare mi chiquita, también te amo princesita mia. -
Despierto con un dolor en la espalda y miro todo a mi alrededor, veo que ya es de noche y me fijo en la hora dándome cuenta que ya son más de las 11 de la noche. Me levanto de la tumba de mi hermanita y me dirijo a mi pent-house.
Al llegar me ducho para quitarme la ropa mojada e investigó universidades en USA.
Encuentro una en New York, Columbia University fue la que más llamó mi atención, envío mi solicitud y luego de eso veo departamentos o pent-house cerca de la zona al encontrarlo, lo compró y comienzo a organizar todo para la mudanza.
Espero que les guste, no olviden votar y dejar sus comentarios.
#5047 en Thriller
#2699 en Misterio
#20745 en Novela romántica
#3601 en Chick lit
secretos dolorosos, violaciones y embarazo, misterio amor-odio
Editado: 19.11.2021