Capítulo 11

4 meses después

New york , United State 2020

Ya han pasado cuatro meses desde que partí de Italia, Positano. No puedo decir que todo es fácil porque a pesar de tener la herencia de mis abuelos, no la he tocado y trabajo para darle todo lo que se merecen los niños y la pequeña criaturita que carga Ariza en su vientre de 34 semanas. Pensé en tocar la herencia que me dejaron mis abuelos para ayudar a Ariza y pues así lo hice le compre una casa y la equipe con todo lo que necesitara. Pero aún no se quiere mudar a su propiedad para no estar sola.

Me ha estado ayudando con el inglés de los niños y ya pueden hablarlo fluidamente y Max me ayuda también en las noches porque trabajo en el bar y llegó a altas horas de la madrugada.

En estos 4 meses Dimitris ha estado queriendo descubrir que tanto escondo y pues se me ha confesado, ahora no solo está detrás de mi secreto sino que también de mi loco ¿no?.

Para aclarar algo que creo que no he hecho, no mantengo a los gemelos en secreto porque me avergüence de ellos, sino que no quiero que tachen a mis niños como unos bastardos y los traten mal, aun son pequeños para sufrir por las críticas de las personas.

Alexiou(Dimitris) ha hecho que desarrolle un extraño sentimiento hacia él, no quería que esto sucediera hice todo lo que tenía a mi alcance para evitar tener este sentimiento hacia una persona ya que tengo dos responsabilidades hermosas que no quiero descuidar. Mi atracción hacia Dimitris fue en aumento constante mientras él hace todo lo posible por conquistarme y lo ha estado logrando pero no se lo he dejado saber.

Dimitris me ha insistido tanto en tener una cita conmigo que termine accediendo, ahora estoy saliendo para encontrarme con él.

Estoy bajando las escaleras cuando mis pequeños celosos me bloquean el camino con los brazos cruzados luciendo enojados porque saldré sin

ellos se ven tan tiernos enojados que no resisto abrazarlos y llenarles sus caritas de besos.

-Estamos enojados mami déjanos seguir con nuestro papel-me dicen riendo , los suelto y toman de nuevo su postura de enojados.

-Para donde vas mami?-me preguntan los pequeños celosos posesivos.

-Me encontraré con una persona bambinis - les respondo aguantando la risa.

-¿Dónde vive ma?- no aguante más y explote de la risa cuando me preguntaron eso.

-Eso ustedes no lo tienen que saber pequeños fisgones- le respondo riéndome, se donde vive Dimitris ya que cuando nos asignaron un trabajo lo hicimos en su pent-house.

Sonó el timbre y los pequeños demonios se miraron entre sí y comenzaron a correr hacia la puerta y trató de detenerlos.

-Niños deténganse ahí ahora mismo- les ordenó fingiendo enojo, ellos al escuchar mi voz se detienen rápidamente y se dieron vuelta con la cabeza inclinada.

-Que les he dicho de hacer eso, ahora vayan a su habitación que la nana les hará compañía en unos minutos- les ordenó.

-Perdón mami, solo queríamos saber con quién saldrás-me dicen antes de dirigirse a su habitación y veo a nana muerta de la risa ya que casi me como las escaleras y los sofás al salir detrás de esos pillos.

Me dirijo a la puerta entre risas y veo a Dimitris con una cara de impaciencia.

-Perdón por el retraso- digo poniéndome seria.

-Descuida no pasa nada, vamos al auto- me dice tendiendome su mano.

La acepto y nos encaminamos al auto, al llegar nos adentraremos en él y partimos a donde me llevará Dimitris.

-Estas muy hermosa, pequeña diosa- me dice con el apodo que me ha puesto estos 4 meses y yo me sonrojo automáticamente.

El trayecto hacia el parque se define en risas, sonrojos de mi parte, halagos y preguntas para conocernos mejor.

Dimitris Pov:

Realmente Artemisa es una difícil, no pensé que alguien me gustaría y me causara curiosidad por conocer todo de esa persona, pero llega ella y cambia mi forma y atrae dandole a mi vida un giro de 180 grados.

No digo que he dejado de querer saber qué es lo que oculta pero ahora me importa mas ganarme su cariño y amor esa es mi prioridad ahora mismo, he luchado mucho para lograr que ella aceptara tenerme cerca y tener ese si que tanto había añorado e insistido para poder tener una cita con ella.

Me sentí feliz el día que me dijo que sí cuando le insistí por última vez salir conmigo.

Ahora me dirijo con ella al parque de atracciones donde será nuestra primera cita, nos dirigimos a las afueras de la ciudad donde se encuentra el parque y no puedo evitar dejar de verla en el trayecto que queda de camino. Llegamos luego de 30 minutos al parque.

-¿A qué atracción quieres subir primero?- le pregunto ya que la veo un poco sorprendida con el lugar, me mira y me dedicó una sonrisa como la de una niña pequeña.

-Vamos al área de tiro- me dice con una sonrisa traviesa y llena de emoción.

Nos dirigimos al juego y gane un peluche para ella y ella decide jugar dos veces ganándose dos peluches de personajes masculinos de Disney. Después subimos a las otras atracciones y en la última atracción decido pedirle que sea mi novia, subimos a la montaña rusa.

-Que hermosa vista- dice ella prestando toda su atención al paisaje de la ciudad.

-Más bella eres tú- comentó tomándola de las manos.

Ella ante mis palabras y acto me mira sorprendida, pero luego su mirada se torna oscura y fría para terminar de apartar mis manos de las suyas de manera brusca.

-No estoy para juegos, ni estupideces Dimitri, así que deja tus bromas conmigo que no caeré en el estúpido juego que quieres usar para llevarme a la cama como las otras estupidas, tengo cosas más importantes que hacer para perder mi tiempo en este estúpido juego-me contesta secamente sin mirarme.

Tomo su rostro entre mis manos -no estoy jugando contigo mi pequeña diosa, de verdad quiero una relacion seria contigo, así que por favor dame una oportunidad para de demostrar que no voy a jugar contigo, pero primero quitame la duda y acepta vale- en eso se escuchan fuegos artificiales y la montaña se detiene en la cima- Mira al cielo, mi pequeña diosa- le digo.