El infiltrado ingles (enlazados3)

Veintitrés

Ian
 


Inicialmente Alice me parecía una chica muy hermosa y me atraía montones, pero ahora estoy viendo su versión real, cuando uno conoce una persona, la trata a diario, te empiezas a enamorar y eso me esta pasando.

Su familia es excepcional, buenas personas capaces de desprenderse de lo material con tal que su semejante esté bien, entendía a Julia cuando habla de ellos con tanto fervor y agradecimiento.

Hoy es un día especial, Alice había hecho un negocio excelente, la Joyería con quien lo hizo es la principal competidora del conglomerado, hacer ese negocio nos abrió puertas hacia nuevos clientes. La invite almorzar cerca para no demorarnos, pero antes subió donde Franco Damiani, esa llamada no me gusta, pero ocupo mi lugar y la espero abajo con Adriano.

A los minutos baja con el rostro rojo, sus ojos destilaban rabia, ella no se da cuenta, pero sus expresiones son como un libro abierto para mí, cuando nos ve se relaja y nos sonreímos, Adriano tomó su rumbo y nosotros el nuestro, llegamos en completo silencio y yo me atreví a pedir por los dos, no quise preguntar ni cómo le fue ni que le paso, ella sola me hizo preguntas y dedujé que de eso le hablo Franco. Después de dejar saldado sus preguntas nos dedicamos a almorzar, comimos mas bien yo comí de todo un poco, ella se reía de verme comer.

De regreso al conglomerado nos dividimos, ya que ella tenía cosas que hacer con la señora Gina, nos despedimos en las afueras de este. Esperando el ascensor me topo con Franco, viene conversando con una de las chicas que labora en el piso de administración, al verme se cuadra cual modelo de revista, siento que me escanea de pies a cabeza, ahora entiendo más las preguntas que me hizo Alice.

Al llegar a mi piso, Mary la secretaria está acomodando unos folios, la saludo y le preguntó si Adriano está en su oficina, asiente y me deja pasar, al entrar está hablando por teléfono y tomando café, me enfoca y me hace señas que me siente y lo espere

- Aja ¿Te apetece un café? ¿Qué te trae por aquí? – niego –

- Óyeme, Adriano ¿el conglomerado tiene código de vestuario? – frunce el ceño –

- ¿Quién te dijo eso? – me relajo en la silla –

- Solo contéstame – bufa-

- No hay un código de vestuario como tal, los empleados manejan sus uniformes proporcionados por la empresa, los de la Joyería llevan un uniforme totalmente diferente y en la escuela, pues ya tu sabes

- Mmm ... ¿entre directivos? – deja el café a un lado y me queda mirando –

- ¿Qué pasa Ian? – niego –

- Nada ... escuche por ahí ese comentario, te pregunto porque tal vez no me visto acorde – se carcajea –

- No, no hay, viste como quieras, yo ando vestido así porque aja me acostumbre y me resulta fácil por las reuniones y eso

- Entiendo, en otros temas ... Alice hizo un negocio con la Joyería "UNOde50" quiero que veas los términos del contrato

- En serio ... mándame los documentos con Mary, al término de la jornada te los envió de vuelta – asiento y salgo de la oficina –

El resto de la tarde me enfrasque en mirar los datos de la fundación, antes de salir tenía en mi escritorio los documentos del negocio que hizo Alice, con un post-it de Adriano que me decía "la saco del estadio" "esta todo en orden" me sonrió y procedo a salir del conglomerado.

Estando en las puertas del conglomerado noto que Adriano sale con Mary, estos algo tienen, sin más volteo hacia el conglomerado y desde una de las ventanas me observan, no sabría decir con qué finalidad, pero tendré cuidado con él.

De la empresa hasta el apartamento es relativamente cerca, pero entre mi presupuesto debía meter la compra o alquilar un auto, necesitaba movilizarme mejor en la ciudad, al llegar al vestíbulo del edificio, me entregan una enorme caja, según los guardas de seguridad lo trajeron una empresa de envíos internacionales, veo la tarjeta y el remitente es Octavio, así que le pido ayuda a los chicos para subir hasta el apartamento.

Dentro de la caja hay de todo, hay cosas personales, para decorar la casa y lo mas grande es un horno, me alegra que piensen en mi y mas en este aspecto; hay varias fotos familiares, una del matrimonio de mi hermana, otra en Grecia y una donde estoy con Kailam, me detengo en mirarlas y en extrañarlos.

El horno venía con una nota, en parte decía algo así "para tus fabulosos panecillos" el resto de la noche me la pase instalándolo, una de las fotografías iba para el despacho que tengo en el conglomerado. Siendo bastante tarde recibo un mensaje de texto indicándome que mañana hay reunión de gerentes de área, debía estar puntual y temprano.

Llego súper temprano, Mary me recibe con una sonrisa y le solicitó que haga un pedido al restaurante más cerca, he llegado sin desayunar y sin comida no funciono. Media hora después nos indican que la reunión comienza en 15 minutos, ya a estas alturas ya el desayuno llego y esto saciado, ya que Mary tuvo la gentileza de pedir doble porción a todo, creo que me esta empezando a conocer.

La reunión fue avances en todos aspectos y secciones del conglomerado, mi área no fue expuesta por llevar poco tiempo al mando del este, me dedique a ver la dinámica entre las áreas. Al término de la reunión Fabricio se queda conversando con Adriano, al salir me topo con Franco Damiani, para mi fortuna tomamos el mismo ascensor

- ¿Town? ... ¿ese es tu apellido verdad? – noto que vamos solos en ascensor –

- Si claro – se queda pensativo –

- Si eres hermano de la esposa de Octavio ¿porque no llevas su apellido? – no pretendo darle muchas explicaciones, le contesto lo básico –

- No somos hermanos de sangre, nos tratamos como tal – se ríe con desdén –

- Me vas a disculpar lo que te voy a decir, pero no se – chasquea la lengua – tienes algo que no me gusta, se que mi familia te aprecia mucho y aja, pero yo no – le sonrió igual –




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