Sara
De mi boca no salia absolutamente ninguna palabra, estaba en shock.
-Disculpa si te abriré una herida pero de verdad tenía curiosidad de conocerte, más que curiosidad estaba entusiasmado de conocerte, de conocer una parte de mi familia que no conocía.
-Ehh... bueno, ¿hola?- salude ya que no sé me ocurrió nada más que responder.
-Creo que no es un bueno momento, si deseas podríamos quedar otro día cuando te sientas preparada...
-No no, discúlpame solo estoy un poco perturbada. Hace no muy poco conocí a tu padre.
-Nuestro padre- me corrigió.
-No quiero ser mal educada contigo, solo que no considero que él sea mi padre. No sé si sabes que paso entre tu padre y mi madre. Pero antes pasa, que no te voy a dejar afuera- bromee. El entró y observo todo con evidente curiosidad, hasta que vio la fotografía de la ecografía de mi bebé que se encontraba en la mesa al lado de la puerta principal.
-¿Tienes un bebé?- preguntó tomando el marco que contenía la fotografía.
-No, mi embarazo es reciente, estoy de 4 semanas- respondí emocionada.
-Seré tío- susurró. Me sentí un poco incomoda con su comentario pero lo deje pasar ya que se veía una persona con la mejor intención posible de establecer un lazo conmigo y no quería ser dura con él. -Yo quería saber si existe una posibilidad de conocernos, que me permitas conocerte y que tengamos un vinculo, más allá de nuestro lazo sanguíneo. Porque muchas veces el lazo sanguíneo con otra persona no establece la relación que debes tener con tal- dijo y yo asentí en acuerdo.
-¿Tu hablaste con tu padre sobre que vendrías a verme?- pregunte sentándome en el sofá.
-Él mismo nos dijo que tenía otra hija fuera del matrimonio, a mi hermano y a mi. Creo que yo me lo tome mejor que mi hermano, ya que él esta muy resentido con mi padre por su infidelidad hacía nuestra madre. Piensa que es tu culpa el que hayas arruinado nuestra familia- comentó e hizo una mueca.
-Yo no elegí ser hija de Charles- me excuse.
-Lo sé, y eso me enojo de la reacción de Magnus porque te responsabiliza . La responsabilidad fue de nuestro padre y bueno, de tu madre supongo.
-Estoy de acuerdo contigo, pero no estoy lista para establecer una relación con Charles pero si me gustaría conocerte y que me conocieras, sólo que no me gustaría que supieran que nos estamos viendo. No me interesa lo que piensen de mi, pero no quiero que personas que no me conocen me critiquen y más ahora que estoy muy sensible- suspiré y pase una por mi camisa.
-Como te sea más cómodo para ti. Pensé que cuando te comentara quien era yo me cerrarías la puerta en la cara- rió.
-Como me lo dijiste antes, no tienes la culpa de nada de lo que sucedió.
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Ya llevaba aproximadamente media hora esperando a Maddie. Habíamos quedado en un café que quedaba muy cerca de donde vivía por lo que no podía entender como es que se tardaba tanto.
Finalmente Maddie apareció con unas ojeras que no eran normales en ella. Estaba tan preocupada de mi que me sentí realmente mal de no haberme dado cuenta que ella también no lo estaba pasando muy bien.
Me pare de inmediato cuando se acerco a mi y la abrace apretándola contra mi. Cuando la solté pude ver que ella había comenzado a llorar. Era una pésima amiga.
-Cariño- gemí.
-Hola- susurró. Con cuidado me senté en la silla y tome su mano por encima de la mesa.
-¿Que te sucede?- pregunté preocupada.
-Yo no había querido decirte, porque se que ya lo estas pasando realmente mal en este momento como agregarte otro problema.
-Pero eres mi amiga, todo lo que te sucede me importa. Me siento fatal al ver que tu también no te estas sintiendo muy bien.
-¿Como te ha ido con Hector?- pregunté y sople mi caliente café.
-El fantasma de la inseguridad ha aparecido nuevamente. La ex esposa de Hector lo esta buscando y quiere regresar con él, lo único que le dice es que ella aun lo quiere y que sería bueno para Violeta el que sus padres estuvieran juntos nuevamente.
-Maddie.
-Ya no sé que más hacer para soportar esta situación- sollozó y rápidamente me acerque a ella y la abrace -Lo único que hace cuando va a buscar a Violeta es reprocharme que yo no soy la adecuada para Hector y que Violeta ya tiene madre por lo que no debería estar con él ¡pero jamás he intentado quitarle su lugar! Me encanta ir al parque con Hector y ella y poder jugar toda la tarde. Realmente amo a esa niña.
-¿Que es lo que dice Hector al respecto?- pregunté y seque sus lagrimas con un pañuelo que había sacado de mi bolso.
-Yo no le he comentado todas las estupideces que Úrsula me ha dicho cada vez que estoy con ellos en casa y ella va por Violeta. Ella llora cuando Úrsula va a recogerla, Sara y me dijo que la maldita de su madre lo único que hace es encerrarla en un cuarto oscuro y tratarla pésimo. Violeta solo tiene cinco años ¡como es que la puede tratar así!
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Editado: 17.08.2021