El Despertar de las Voces

En la tranquila noche de Naboo, Leia y Luke Skywalker se encontraban en su habitación, sumidos en pensamientos inquietantes. La conversación con sus padres había dejado preguntas sin respuesta, y sus mentes se atormentaban con dudas.

Leia rompió el silencio, con la mirada fija en las estrellas a través de la ventana. "Luke, ¿alguna vez te has preguntado por qué nuestras vidas están tan llenas de misterios? Parece que hay algo que nuestros padres no nos están diciendo."

Luke suspiró profundamente, también mirando al cielo estrellado. "Lo he sentido también, Leia. Hay algo en el pasado que nos están ocultando. Pero, ¿cómo podemos descubrir la verdad sin desobedecerlos? Tienen sus razones para mantener secretos."

Leia miró a su hermano con una expresión decidida. "Luke, somos sus hijos. Tenemos derecho de saber la verdad sobre nuestra propia familia, sobre quiénes somos y por qué todo parece tan confuso."

Luke asintió, comprendiendo la urgencia en las palabras de Leia. "Tienes razón, Leia. Pero debemos ser cuidadosos en nuestra búsqueda de respuestas. No sabemos qué peligros acechan en las sombras."

La preocupación cruzó el rostro de Leia mientras continuaba. "Además, siento que hay algo más grande en juego, algo que va más allá de nuestra familia. ¿Recuerdas las historias de los Jedi y los Sith? ¿Y si esto tiene que ver con eso?"

Luke frunció el ceño, también considerando esa posibilidad. "Es cierto, Leia. Las leyendas hablan de conflictos ancestrales entre los Jedi y los Sith que afectaron a toda la galaxia. ¿Podría ser que nuestras familias estén vinculadas de alguna manera a ese pasado?"

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Los hermanos decidieron buscar respuestas en las habitaciones de sus padres, de una forma u otra tenían que saber que ocurría.

Dos horas después.....

Leia y Luke continuaron explorando la habitación de su padre, Anakin Skywalker, sin saber que su búsqueda de respuestas estaba a punto de llevarlos a un descubrimiento sorprendente. Mientras revisaban sus pertenencias, encontraron una serie de holopelículas antiguas que habían capturado momentos de su juventud.

Luke observó las imágenes con admiración y curiosidad. "Mira, Leia, es padre cuando era joven. Parece tan diferente de la persona que conocimos en Naboo."

Leia examinó las holopelículas, sintiendo que estaban cada vez más cerca de desentrañar el misterio. "Sí, Luke, pero también me hace pensar en lo que perdimos al no conocerlo en ese momento. ¿Quién era realmente?"

Mientras continuaban explorando, Leia encontró una caja de comunicadores antiguos. Uno de ellos llevaba el emblema de la República Galáctica. "Esto es interesante, Luke. ¿Por qué tendría padre un comunicador de la República? ¿Qué conexión tenía con ellos?"

Luke frunció el ceño, contemplando la pregunta de Leia. "No lo sé, Leia, pero podría ser una pista importante. Vamos a seguir buscando pistas aquí y luego iremos a la habitación de madre. Tal vez encontremos respuestas."

Sin embargo, los hermanos Skywalker no tenían conocimiento del pasado Jedi de su padre, Anakin. Ese oscuro capítulo de la historia estaba cuidadosamente oculto por sus padres, quienes habían decidido proteger a sus hijos de ese legado.

Juntos, Leia y Luke continuaron su búsqueda en busca de respuestas en las pertenencias de sus padres, sin sospechar que la verdad sobre el pasado de Anakin Skywalker estaba a punto de cambiar sus vidas de manera irrevocable. La galaxia estaba llena de misterios esperando ser revelados, y los Skywalker estaban dispuestos a enfrentarlos.

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La luz de la luna iluminaba el tranquilo jardín de la casa de Anakin Skywalker y Padmé Amidala en Naboo. Los susurros de la brisa nocturna se mezclaban con el fragante aroma de las flores mientras Anakin y Padmé se sentaban juntos en un banco de piedra.

Anakin miró a su esposa, su mirada llena de preocupación. "Padmé, nuestros hijos están cada vez más inquietos. Han comenzado a hacer preguntas sobre nuestro pasado y las verdades que les hemos ocultado."

Padmé suspiró, con la mirada perdida en las estrellas que adornaban el cielo nocturno. "Lo sé, Anakin. Siempre temí que llegara este momento. Pero teníamos que protegerlos, mantenerlos a salvo de la verdad sobre nuestra vida antes de venir a Naboo."

Anakin asintió, recordando los peligros y las sombras que habían enfrentado. "Tienes razón, Padmé. Pero no podemos seguir ocultándoles la verdad. Nuestros hijos merecen saber quiénes somos y por qué decidimos vivir esta vida en Naboo."

Padmé tomó la mano de Anakin con cariño. "Lo sé, Ani. Pero también debemos ser cuidadosos con lo que compartimos. La galaxia ha cambiado, y no sabemos qué peligros acechan."

Anakin contempló la idea durante un momento y luego habló con determinación. " Podemos darles información de manera gradual, solo lo que necesiten saber para comprender nuestra decisión de vivir  en Naboo."

Padme: "Eso podría ser lo mejor, Anakin. No necesitan conocer todos los detalles de nuestro pasado y las guerras que enfrentamos. Solo lo esencial para entender por qué elegimos este camino."

Anakin asintió, aliviado de haber encontrado un enfoque intermedio. "Entonces, encontraremos la manera de contarles la verdad de manera que comprendan los peligros que enfrentamos, pero también la razón por la que elegimos vivir esta vida tranquila en Naboo."

Mientras conversaban bajo la luz de la luna, Anakin y Padmé acordaron una estrategia para manejar la creciente curiosidad de Leia y Luke, protegiendo ciertos detalles de su pasado. La galaxia seguía llena de misterios, pero su familia seguiría siendo su prioridad.

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