El Libro de las Especies

45-El Elfo Oscuro

Grimm creía que la porfiria le había enseñado a sufrir, pero no fue nada comparado a la agonía de curarse, la poción de las hermanas Giraffer lo dejo postrado del dolor, sentía que su esqueleto se derretía.

 

-¡Se suponía que iban a sanarlo!-les reclamo Divine.

-¡Lo hará!-dijo Dionicius, oculta tras su gemela-pero toma tiempo, ha estado enfermo toda su vida.

-¿No podemos darle algo para el dolor?-pregunto Aredia.

-Cualquier químico en su sangre interferiría con la poción-dijo Deméter.

-¡Algo natural, entonces!

-“Señoritas, por favor”-pidió el Wyrm en la lámpara.

-Una infusión de valeriana, se la traeremos.

-¡Buenas!-cuando ellas salieron, Nosk se asomo por la puerta-¿es mal momento?, traigo a Holly para su cita de juegos.

 

Nosk se había dado una pausa como buscador, en su última salida se había sentido tan ansioso que abandono antes de empezar, estaba con el rollo de que no se perdonaría perderse los primeros pasos de su hija asique esperaría hasta entonces, Malquiur, que aun miraba a la niña Holder con aprensión, le prevenía sobre la posibilidad de que fuera una distracción diseñada adrede, catorce años se le podían ir volando si no se prestaba atención; en aquella ocasión había dejado a Holly con los Vezel, ella y Gritten hicieron tan buenas migas que ahora la llevaba cada semana.

 

-Está bien, déjala-dijo Divine, secándose el llanto-dejémoslos en el salón.

-“Gritare si pasa algo”

 

Pusieron a los bebes en un corralito, Gritten estaba nervioso por el estado de su padre pero si amiguita se ocupo de animarlo, aunque callada era sumamente expresiva.

 

-Yo estaba en un nido-Aredia les conto sobre un sueño que había tenido la noche anterior-con dos polluelos tan grandes como yo, uno era rojo y no dejaba de pegarme, el otro era purpura y estaba como triste, decaído.

-¿Qué crees que signifique?-pregunto Divine, sentada cerca de la puerta de la habitación por si Grimm le llamaba.

-No estoy segura, quisiera que el cerebro no se pusiera metafórico con estas cosas…supongo que el pájaro rojo es Candela, la duda es porque yo no le estaba devolviendo los golpes.

-¿Y el otro seria Maika?, ¿Por qué estaría triste?

-Técnicamente sigue casado con ella, eso deprimiría a cualquiera.

-Ha hecho un muy buen trabajo, aun sin el grimonio-Aredia le chito y miro afuera, Deméter regresaba con el té y se quedaron callados hasta que se lo hubo dado a Grimm y volvió a marcharse.

-Tenga cuidado, nadie más que los que ya saben deben enterarse de que no tenemos el libro, las criaturas se asustarían y algunos irían a unirse al enemigo.

-Como Grechen y tus amigos.

-Grech estaba asustada, y los chicos…-suspiro-encontré una carta de Tiso en su casa, cuando fui a buscarlos y supe que se habían ido, si tan solo hubiéramos sabido antes que Meirily los había contactado.

-¿Qué decía la carta?

-No mucho, se disculpaba y nos suplicaba encontrar una solución, no puede dejar a Tamer, está convencido de que el señor Malcon dejo morir a su hermana porque era un orco.

-¡Pero Maika no sabía sobre eso!, yo lo ayude en ese caso, hizo todo lo que pudo pero llegamos tarde por minutos, no fue su culpa.

-A quien se debe convencer es a Tamer y no hay como contactarle, yo ni siquiera se sobre ese caso.

-Fue hace unos cuatro años, Maika recién comenzaba como detective pero ya se había granjeado cierta reputación con un par de trabajos bien hechos, aun no tenía esa política de no involucrarse en problemas que involucraran muertos pero si lo evitaba, Ethel y yo lo convencimos de echar una mano porque la policía no llegaba a nada.

-¿Cómo es que estaban ustedes en eso?

-Yo estaba haciendo un seguimiento de la historia, era un asunto espantoso que esperaba impulsara mi carrera: ocho jovencitas de color, de entre once y quince años, secuestradas y asesinadas, las encontraban en lotes baldíos o basurales con flechas sobre la espalda.

-¿Flechas?

-Encajadas de forma posterior porque la causa de muerte solía ser un disparo al corazón, el asesino también les marcaba con un hierro, como al ganado, con la palabra Hobolpott, que nadie sabía que quería decir, acabo siendo un nombre para el asesino.



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En el texto hay: especies sobrenaturales, detective, magia

Editado: 18.02.2019

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