Recuerdo abrir los ojos y encontrarme dentro de un coche a toda velocidad. Nos dirigíamos por la carretera, todo estaba oscuro, llovía como nunca antes. Mire hacia un lado y ahí estaba ella, en el asiento del conductor, bastante desarreglada y tensa, La observaba confundida cuando volteó a verme.
- ¿Estas bien?
- ¿Cómo crees que puedo estarlo? Me encuentro muy mareada, no entiendo nada. - le grité desesperada- ¿Podrías explicarme qué sucede?
-Ya habrá tiempo para contarte todo, pero ahora necesito que te calmes y estés atenta para reaccionar a cualquier cosa que pueda surgir, nuestra vida depende de eso.
Su mirada irradiaba temor, duda, desesperación. Entré en pánico, quería preguntarle que sucedía, a donde íbamos, porque la prisa, de donde veníamos, que buscábamos o de que escapábamos. No tarde mucho en resolver este último misterio, aunque para ese entonces solo fue por deducción y todo gracias a los rayos que iluminaban por un momento la zona. Una camioneta nos perseguía y parecía alcanzarnos, se encontraba a pocos metros de distancia y Stacy parecía estresarse aún más presionando con fuerza el acelerador, afirmándose al volante muy rigida, intentando no perder de vista el camino. Mire hacia los lados, no veía nada más que árboles y árboles, miles de ellos.
Mi mente se encuentra muy confusa, dirijo la vista hacia el policía que me escolta.
-Lo siento, no puedo continuar.
¿Quieres tomar un vaso de agua?
-Si por favor, necesito solo un momento.
El detective fue muy amable conmigo, pero sinceramente me deja sin fuerzas recordar esa noche, aun siento como si hubiese sido ayer.
Pasados 20 minutos ellos regresaron, no estaba lista, pero si quería resolver el caso necesitaba hablar, exprimir mis recuerdos tratando de no olvidar ni un solo detalle.
- Tranquila, no queremos que te presiones. Si quieres continuamos mañana
- No! -grito- quiero hacerlo ahora, -realizo una pequeña pausa- necesito hacerlo. -mi voz cambia bruscamente, con un aspecto calmado pero muy triste, casi al punto de llanto.
El detective Nichols acomoda su silla, toma su boligrabo y comienza a apuntar realizando un gesto de aprobación, parecía estar esperanzado con mi relato.
-Muy buen, continúa
De repente una extraña figura se atravesó en el camino -sucedió tan rápido que no pude reconocer que era- y fue cuando, al intentar esquivarlo, ella pierde el control del auto y volcamos.
-Desde ahí mis imágenes son un poco borrosas, pero intentaré explicar lo mejor posible.
Recuerdo haber despertado cubierta de sangre, atrapada entre los fierros del auto, estaba muy mareada y no podía ver nada. Intenté incorporarme con las pocas fuerzas que me quedaban y tratar de liberarme. Al alejarme pude ver al auto en el que iba totalmente destruido, había sido un gran impacto, pero para mí fortuna llevaba el cinturón de seguridad puesto. En ese momento comencé a desesperarme, intenté buscar a Stacy entre los fierros, revise cada parte, sin encontrar rastros de ella, de algo estaba segura y era de que iba a encontrarla, en lo posible, viva.