Al despertar Malcolm se encuentra internado en una clínica por un golpe fuerte en la cabeza que lo dejo en coma durante seis meses.
-Querido ¿Qué ha sucedido dentro de la Pirámide?-interroga su madre acariciando su frente con cariño apenas abre sus ojos
-¿De qué hablas madre?-arruga su ceño sin comprender nada
-¿No te acuerdas de donde estuviste?-pregunta angustiada
-No-responde con rapidez, su madre ahogo un sollozo y llevo sus manos a la boca por la sorpresa mientras los médicos lo chequeaban y le pidieron que saliera.
Al terminar el chequeo su padre entra con un semblante de preocupación pintado en la cara.
-¿Sabes?-dice su padre llamando su atención- Nos habían dicho que estabas desaparecido-relata mientras observa por la ventana- comenzaron una búsqueda por todo ese territorio y aun así no te encontraron-suspira girando en sus talones acercándose a su hijo- de no ser por tu madre estarías muerto en este momento-dice
-Pero… ¿Cómo es posible?-interroga atónito
-Te vio en las orillas del Río Nilo-dice mirándolo fijamente-no preguntes cómo-se adelanta y continua-porque ni siquiera yo lo sé-suspira
-No estoy entendiendo nada-comenta con sinceridad cerrando sus ojos- siento la cabeza grande-murmura apenas audible aun así su padre logro oírlo
-Dejaré que descanses-se aleja antes de que se lo impida- por ahora tengo que resolver una interrogante-dice y sale de la habitación sin permitir que Malcolm conteste, de igual modo no podía contestarle porque estaba sumiéndose en un sueño profundo por el malestar de la cabeza.