Prólogo

Esa noche el me besó como nunca antes lo había hecho y sentí sus manos recorriendo todo mi cuerpo y ardi pero no ardi sola, él ardió conmigo. Sabes no me pude resistir, como iba a hacerlo sabiendo que él quería esto de verdad, realmente queria que pasase, lo sentí. Y si ya sé, lo prometí, pero no pude alejarme necesitaba eso, realmente lo necesitaba. Porque sabía que ese sería nuestra despedida y nuestro final. Y aunque no fue un final feliz ni de cuento de hadas quería que se quedase con ese recuerdo de mí y que sintiera lo que realmente yo sentía por él. Que supiera que yo lo había entregado todo en esa habitación y que en verdad lo amaba como nadie más podría hacerlo jamás. Por un momento sentí que lo tenía para mí y que podía perdonarlo, que todo podia ser como antes pero me acordé de todo el daño que me había echo y salí corriendo hacia el baño, él me siguió y entonces me desarme delante de él y él solo me abrazo y me dijo que todo iba a estar bien pero eso no es lo peor, no. Le dije que viniera conmigo que lo cancelaria todo, que no dejara que me vaya, que si él decía que me quedara lo haría. Pero claro él no acepto y en ese instante me di cuenta de que todo esto había sido una ilusión que no habia manera de arreglar lo que se había roto...