El Ojo De Ender

17 | Presos

—Deberías dormir.

—No puedo... —repuso Clara con los ojos vacíos.

Antony apretó los labios y dio un profundo suspiro.

—Creo que yo tampoco.

Ambos permanecieron en silencio por un rato más, y Clara abrazó sus rodillas mientras veía a Aurora vendada y dormida en su camilla de la celda. De vez en cuando, Antony disimulaba hacer cualquier cosa mientras veía a Clara. Su cabello ya no estaba tan brillante como antes, sus ojos tampoco.

—Sé que me estás mirando. —Antony se ruborizó—. No necesito mis sentidos agudos para darme cuenta...

—Lo siento.

—No te preocupes...

Sin palabras, Antony se recostó en su cama y se cubrió con la manta que le habían dado. Todavía tenía en la mente la posibilidad de que ella no estuviese siendo cien por ciento honesta, pero verla tan deprimida le hizo dudar si lo que pensaba era cierto. Después de todo no tendría sentido que ella estuviese engañándolos ¿Qué razón tendría ella para querer dominar el mundo con una legión de endermans? ¿Quién en su sano juicio pensaría que eso es buena idea?

—¿Tú... sabes algo sobre mi caso? —Le preguntó Clara, sacándolo de sus pensamientos. Antony se percató de que ya había empezado a dormirse.

—¿Tu caso?

—Debieron contarte información sobre mí antes de que nos empezaran a perseguir.

—Ya entendí —Antony sonrió—. Creí que te referías a un caso médico.

Clara rio un poco.

—Si hubiese sido eso no tendría que preguntar. Sé perfectamente lo que tengo.

—¿Amnesia? —preguntó Antony. Clara hizo un ademán con las manos, afirmando lo que su compañero le había dicho—. Pues tienes suerte de que tenga un poco de información sobre ti aquí.

Antony sacó de su inventario un papel y lo desenrolló.

—Clara Meadow, gene...

—¿Qué?

La sonrisa que Antony tenía en su rostro desapareció lentamente y aclaro su garganta.

—Nada... leí mal —repuso antes de continuar—. Edad: 21 años, Sexo: Mujer, Altura: 1.61... 

—¿Qué sucede?

—Había olvidado esto por completo...

—¿Qué cosa? —preguntó intrigada.

—Tu domicilio.

—¿Cómo se te pudo olvidar algo así?

—Lo siento, jamás leo los reportes más de una vez, solo lo hago cuando necesito la información.

—¿Y qué acaso no necesitamos esa información? ¿Cuál es la dirección?

—Es en la capital.

—Tienes que estar bromeando.

—Me temo que no.

Clara se recargó en la pared y cerró los ojos, tratando de soportar el dolor en su tobillo.

—Da igual... no podemos hacer nada ahora.

Antony enrolló el papel y lo guardó en su bolsillo.

—Supongo que tienes algo de razón, aunque no es mi forma favorita de procesar las cosas —repuso con resignación.

—Lo siento, es solo que en este momento no puedo ver como algo bueno podría salir de esta situación.

—Entiendo, no te preocupes.

Clara soltó un pequeño gemido de dolor y cerró los ojos con fuerza tratando de soportarlo.

—¿Estás bien?

—Sí, estoy bien.

Él observó como trataba de controlar su respiración. Advirtió que cerraba sus puños con fuerza, probablemente por el dolor. Entonces se acercó para ver su tobillo.

—Está torcido... —dijo él

—¿Qué?

—Tu tobillo está torcido... ¿No es cierto?

—N-no, solo es un...

Clara guardó silencio, y se ruborizó antes de asentir ligeramente.

Después de acomodarse frente a Clara, el renegado le quitó el calzado con cuidado, provocándole algo de dolor.

—Lo siento.

—No te preocupes.

 Antony analizó la herida y le preguntó a Clara qué tanto le dolía cuando lo tocaba o movía.

—Está algo hinchado... —dijo él antes de rasgar un trozo de su capa y vendar su tobillo con cuidado para inmovilizarlo—. Tendremos que alzarlo para reducir la hinchazón un poco.

—E-está bien...

La acostó gentilmente en su camilla y le alzó su pierna, manteniéndola en alto usando una agujeta que ató en unas cadenas que colgaban del techo.

—Esto es para bajar la hinchazón. Tardará en sanar, pero quizás pueda pedirle una poción de regeneración a los guardias después, cuando pase alguno.

—Gracias.

—No es nada.

—¿Cómo sabías que estaba torcido? —preguntó.

—Ya había tratado con un tobillo torcido antes.

—¿De quién?

—No recuerdo bien. Pero tenía un pie incluso más pequeño que el tuyo —repuso con una sonrisa.

—Ha de haber sido un niño —dijo Clara con una tierna sonrisa.

—Sí... creo que era un niño... o una niña. No recuerdo.

Se sentó al lado de Clara, y observó a Charlie y Aurora. El rostro delicado y aparentemente inocente de la chica bruja, le daba a Antony una extraña sensación de familiaridad y ternura.

—Clara.

—¿Sí?

—¿Conoces bien a Aurora?

—En realidad no... Solo sé como Charlie y ella se conocieron.

Entonces, Clara le contó al ex-guardia como se conocieron. Antony no dijo nada.

—¿Por qué preguntas? —inquirió Clara al ver que su compañero no daba ningún comentario al respecto.

—Por un momento me pareció que... olvídalo —dijo antes de acostarse en su camilla de frente a la pared.

De pronto, Clara sintió mucha curiosidad por Antony, pero prefirió no preguntar más y cerró los ojos...

—¿Qué quieres? —preguntó Day en seco sin ninguna expresión facial, pero Tobi sabía que estaba molesta

—¿Qué quieres? —preguntó Day en seco sin ninguna expresión facial, pero Tobi sabía que estaba molesta.

—Deja que te lo explique.



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En el texto hay: amor y misterio, accion aventura y drama, minecraft

Editado: 07.02.2023

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