El Omega Que No Quería A Su Predestinado ||yoonmin||

Capitulo 34

Unas risas burlonas se escucharon en cuanto Dasom dio un paso dentro de su consultorio, allí estaba por quien tanto han surgido problemas en el palacio, Ahreum, su hermana, no esperaba su visita.

—Querida hermanita, es un gusto poder verte de nuevo —Dasom noto aquella escabrosa sonrisa de su hermana, era más parecido a una mueca de diversión, una burla ante ella.

—No sé si podría decir lo mismo —respondió Dasom—, sé que fuiste tú la causante de todo esto.

—Es divertido jugar con el destino de algunos, ¿no crees querida hermana? —pregunto Ahreum soltando otra risa leve—, pronto todo dará el giro que debe llevar de ahora en adelante.

—No deberías jugar con el destino, sabes lo peligroso que puede ser para ambos.

Ahreum soltó un suspiro, no se sentía para nada arrepentida, en cuanto la princesa HaNeul obtenga lo que quiere, ella también obtendrá lo que desea y eso será todo, el imperio que está pisando en esos momentos, le pertenecerá en cuanto el príncipe regale al mundo su último aliento de vida.

—Esa advertencia está demás, Dasom —sonrió sin ningún toque de dulzura—, el hechizo funciono.

—¡No sabes las consecuencias que esto traerá!

—¡Claro que las sé! —Dasom frunció el ceño ante las palabras de su hermana—. Si no las sabría, ¿crees qué lo hubiera intentado? Querida hermana, todo está planeado, y no puedes evitarlo.

—Tal vez no pueda hacer algo —frunció el entrecejo—, pero sé que el príncipe JiMin sabrá lo que debe hacer.

—¿Ese omega tonto? Dasom, en cuanto se cumpla el lapso de tiempo, el alfa líder sabrá que tiene que irse con su nueva destinada, y eso sabes que será prácticamente inevitable, el príncipe morirá en cuanto se sienta dolido y separado en totalidad, y el alfa líder de igual forma al saber de su traición a su verdadero destinado, ¡el final perfecto!

Para nada lo es, Dasom sabía que su hermana quería siempre obtener el control sobre el imperio que le había desterrado por completo, nunca pensaba en nada más, quería el total control, y al no poder evitar que el emperador se casará con su destinada, entonces decidió que lo mejor era matar al primogénito, claro que Dasom advirtió al emperador antes de tiempo, y su hermana fue desterrada, pero todo sería distinto ahora.

Ahreum es inteligente, y puede camuflarse de inmediato para no ser vista por los guardias, y así poder ingresar al imperio. Sería fácil, en cuanto el príncipe dejara el mundo, ella no perdería el tiempo, se desharía del emperador envenenándolo y se proclamaría a ella misma emperatriz.

—No permitiré que algo como eso suceda.

—El destino lo dirá —le dio la espalda a su hermana para comenzar su camino a la salida, no necesitaba seguir escuchando a Dasom—, todo a su tiempo, hermana, pero claro, si resulta como lo he planeado, dile adiós a todo esto.

En el palacio no todo se encontraba en total tranquilidad, no teniendo a JiMin al lado, el omega había sentido las punzadas en su vientre bajo y el calor invadir su cuerpo, el celo le estaba atacando.

—Alfa… —JiMin se removía de un lado a otro no pudiendo seguir dormido, se sentía sofocado, con demasiado calor encima, y con su animal interno como un loco, quería ver a YoonGi de inmediato, sabía que prácticamente el alfa líder le había dicho que no lo ayudaría, pero en verdad quería estar con él—. YoonGi.

El alfa líder se encontraba afuera de la habitación del príncipe, había mandado a JungKook a traer las hierbas que ayudarían a JiMin con su calor, pero se estaba tardando mucho, el aroma penetrante del omega llegaba cada vez mucho más fuerte, pero YoonGi tenía que permanecer allí mismo para poder proteger al príncipe en lo que JungKook regresaba.

—¡YoonGi! —de nuevo otro grito de parte del príncipe, YoonGi soltó un suspiro, no quería entrar, si lo hacía JiMin le pediría que lo calmará, y no quería hacerlo.

Su animal interno se sentía mareado por aquel aroma, era obvio, pero solamente los destinados perdían el control cuando se trataba de sus celos, con eso YoonGi podía confirmar que no eran destinados, esas solamente se trataban de mentiras para estar con el príncipe.

Pero ¿por qué el príncipe mentiría de tal forma solamente para estar con él? Todavía tenía demasiadas dudas dentro de su cabeza, y su lobo se removió incomodo al sentir de nuevo el aroma del omega, no lo entendía, era aturdidor, no se había sentido de tal forma antes, y era muy extraño, había estado cerca de otros omegas que a veces entraban en celo, pero el aroma era demasiado fuerte y no podía soportarlo, odiaba los demás aromas, y el aroma del príncipe no estaba siendo una excepción, pero por alguna razón se sentía levemente atraído por él, definitivamente tenía que entender que es lo que estaba pasando con él.

—¡Alfa! —la voz de JiMin, tan suplicante, dejo que YoonGi dejará esos pensamientos para mirar detrás—. YoonGi, por favor...

Y luego se escuchó un suave sollozo de parte de JiMin, lo que alerto al alfa líder, a regañadientes decidió entrar y al ver al príncipe en posición fetal soltando suaves sollozos mientras se tomaba el vientre y temblaba levemente pudo bajar un poco la guardia, por más que sabía que sería incorrecto acercarse, no le hizo caso a su lado racional y camino en dirección a JiMin.




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