Han pasado muchas horas y aún no me creo que haya sobrevivido.
Ojalá pierda los recuerdos, me da igual empezar de nuevo, pero quiero olvidar todo esto.
Jamás he visto tantos utensilios de tortura juntos, tantos productos, pinzas, secadores, toallas, navajas, colores, aceites...
Si tuviese derechos, ya habría perdido la cuenta del número de veces que me ha violado Ary en estas siete horas.
Obviamente hubo bajas, varios de mi pueblo han caído. Algunos han dejado a sus hijos aquí conmigo, esto...
Ni la tercera guerra mundial sería tan cruel.
Ya no soy visco por esa parte, pero he sido cortado en muchos trocitos. Ary vuelve a limitar mi pueblo hasta sus hombros, pero no sé.
Hemos sufrido tanto que todos hemos quedado inconscientes y ahora no sé si estoy en una cabeza o en un jardín.
Vuelvo a notar el pegote, el olor fétido a alcohol, soy ¿verde y blanco? Esta chica no aprende, no madura, estoy harto.
¿A quién se le ocurre pintarse media cabeza de un color y media cabeza de otro color?
Al menos, el bigote y la barba han muerto. ¡Bendita sea!
Y al cepillarse sus dientes, la baba parece más feliz. Aunque algunas siguen suicidándose en ese proceso.
Por lo demás, la chica planea mudarse. Judith dijo algo de irse a otra ciudad. Yo, ahora prefiero ordenar mis pensamientos y asimilar lo ocurrido.
Pero creo que ella aún no se ha dado cuenta de que...
Tengo mis "pies" grises.
Editado: 16.11.2019