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Luis Mejía
setenta por ciento de su poder demoniaco para poder derrotarle, al ser uno de los
más fuertes entre la elite, la lucha entre estos dos continuo
--- Mientras que Malacon se enfrentaba a Rimuto y Malaquías y los estaba superando, en el combate que sostenían.
--- frigo el décimo y Kirama el octava estaban
arrasando con los soldados que se encontraban a su paso, ninguno de los 7
héroes restantes habían instaurado batalla contra ellos estaban ocupados
salvando las vidas de los que podían. En la lucha que llevaba ya 40 días donde
más de 900.000 mil soldados aliados habían muerto y un 1.000.345 soldados
enemigos; el suelo nuevamente estaba teñido de sangre pero a diferencia de la
vez pasada los soldados de las nuevas generaciones no se inmutaron ante esa
cruel realidad, su único propósito era luchar y sobrevivir a esa guerra sangrienta
para volver a casa con sus seres queridos la lucha continuaba los soldados
seguían muriendo.
hasta que llegó el momento de pelear de Fei la última líder de facción de los tres ejércitos que a un no había logrado ver a su rival, para
cuando lo vio ella tenía la firme voluntad de luchar y sin darse cuenta he
inconscientemente a pesar de demostrar ser una mujer fría y dura de corazón, en
lo más profundo de su ser, sentía miedo por lo que podía pasar, ahora tenía una
razón más poderosa para sobrevivir a esa guerra, ese temor la debilitó al dejar de
ser aquella guerrera que no se inmutaba ante nadie perdió la serenidad y frialdad
que la caracterizaba que la había mantenido firme y con vida hasta el momento.
--- al verla finco el primer conquistador la enfrentó con todo su poder los ataques
que le propinaba eran brutalmente violentos pero no lo suficiente para matarla, Fei
era demasiado poderosa para él además contaba con un arma que le permitía
atacar con gran liberta la cual era una lanza muy poderosa y diferente a la que
utilizaba para entrenar, al haber sido creada para sus especificaciones como ser
vivo y como guerrera, al haber destruido todos los prototipos que habían sido
creados para perfeccionar su verdadera arma de combate en los enfrentamientos
que sostuvo mientras entrenaba para ser una líder de facción adecuada para el
título: que tenía en uno de sus extremos dos media lunas que se cruzaban en uno
de sus extremos, en su parte inferior que estaban unida al bastón lo cual le daba