Cap 85

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Luis Mejia  
su poder había madurado y ahora no era como solía ser en el pasado, podía ver  
las cosas desde otras perspectivas muy diferente a como lo hacía antes, en otras  
palabras pudo ver más allá de sus ojos es como si hubiera despertado de un  
sueño.  
Todos en el cuarto quedaron paralizado ante lo que habían visto estos no creían  
nada de lo que les había contado, pero al ver todo lo que paso estando ellos  
presente no podían seguir negando la posibilidad de que todo fuera cierto. Antes  
de partir Ringo se despidió diciendo pase lo que pase no intervengan en esta  
guerra a menos de que sea necesario, les aseguro que haré todo lo que este en  
mis manos para detener esta disputa sin fundamento no voy a permitir que los  
dioses, los héroes y los demonios revivan lo que sucedió hace cientos de miles de  
años. 
En ese mismo instante Ringo levanto su espada y dividió la barrera dimensional  
que se paraba el reino entre el cielo y la tierra del resto del mundo para entrar en  
el que ahora sería su nuevo hogar, para impedir la muerte de Malaquías, ese fue  
el último día en que Ringo fue visto por última vez como un humano, para ese  
momento ya habían pasado 494 años desde que Ringo había obtenido sus  
poderes gracias aquel deseo que había pedido y que le fue concedido. 
Para cuando llego al mundo entre el cielo y la tierra, ya era demasiado tarde  
Malaquías estaba muerto y los sobrevivientes proclamaban como nuevo líder de  
facción a Zen quien dio el golpe final, mientras Ringo entraba al mundo dividido  
por la ideología de unos cuantos por alcanzar el territorio de los dioses  
desterrados que una vez les perteneció por mandato del anterior dios padre de  
todos, les dijo: mi nombre es ringo, he venido a reclamar lo que por derecho me  
pertenece, el cual es retar al líder de la facción de los héroes por el trono y  
derecho a gobernar, derecho que me fue otorgado desde el momento en que  
forme un vínculo con este mundo al encontrar la entrada para llegar aquí por lo  
cual Malaquías líder de facción me arrebato el brazo derecho y ojo izquierdo para  
que no pudiera sostener la espada sagrada Gran y ver la brecha dimensional que