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Luis Mejia
El líder de la facción de los héroes no estaba dispuesto a permitir que la tierra y
los humanos pasaran por todo lo que tuvieron que pasar en el conflicto anterior
donde se perdieron muchas vidas, que no pertenecían a los héroes ni a los dioses
y ángeles, si no de la facción de los humanos, Ringo era un líder de facción
poseía unos poderes monstruosos, aun así no había sido entrenado para la guerra
lo que sabía, lo había aprendido en medio de la batalla que sostuvo en contra de
Malaquías y Belio, por ese motivo, había decidido entrenar para dominar por
completo su espada y sus poderes. A diferencia de los demás miembros de todas
las facciones él no tenía experiencia en batalla, no sabía cómo utilizar sus poderes
correctamente, pasaba los días entrenando solo en un lugar alejado, sabía que de
nada serviría tener un poder monstruoso sino sabía utilizarlo correctamente, un
día sin que se lo esperaran, -----Gunter quien había sido condenado a custodiar
una de las puerta que conectaba el mundo heroico con la tierra, pidió a Baldra que
le permitiera dejar su puerta para ayudar a Ringo a dominar sus poderes y
espada sagrada, --------Baldra sabia lo importante que sería que lo ayudara, Ringo
tendría que estar en las mejores condiciones para la batalla, por ese motivo le
permitió abandonar su deber de custodiar la entrada.
Con la autorización del máximo comandante, se dirigió al lugar donde estaba
Ringo, al llegar se inclinó mostrando respeto hacia él, pidiéndole que le permitiera
ayudarlo en el entrenar para así pagar por sus pecados, ringo, aceptó la ayuda,
lo primero que implemento Gunter para su entrenamiento fue, enseñarle los
principios básicos que los dioses les enseñaron en el pasado durante su
entrenamiento para la guerra que se avecinaba, lo primero; canalizar y controlar
su poder sagrado para evitar que los expulsara de golpe en un solo ataque, a
partir de ese momento lo más importante para él, era que aprendiera a
manipularlo y controlarlo a la perfección sus poderes sagrados, así pasaron varios
días en donde le daba indicaciones de cómo conseguirlos, hasta que por fin
entendió como era que tenía que hacerlo, para controlarlos a la perfección y poder
usarlos a voluntad, después de haber sufrido heridas ocasionadas por su propio
poder, causando un dolor, sufrimiento más allá de lo imaginable, y derramar su