El prejuicio de tu mirada

Cap 2

Enserio si digo que soy una antisocial es porque lo soy, o sea que necesidad de fastidiarme el día, porque simplemente no podía ser un día normal, dónde termino mi turno, me cambio y me voy feliz como una lombriz a mi apartamento a descansar . Pero no! Aquí estoy con un dolor horrible de cabeza, en una habitación que no es la mía y con ganas de matar a alguien. Bueno por lo menos tengo mi ropa. 


Me levanto y observo a mi alrededor y me doy cuenta que es una habitación bonita, tonos oscuros y un aroma rico, es… cómo mentolado. Mientras observo, en esas la puerta se abre he ingresa el tipo de mirada rara. 
-que me hicieron, que hago aquí? – le digo con tanta molestia. 
- Me llamo Bellamy Castiblanco (Belamy) y ….


- y que mierdas me importa eso, tengo cara de que me interese? – veo que alcanza a sonreír de medio lado, pero rápidamente vuelve a su estado normal- haaaa vaya, veo que le causa gracia- miro rápidamente la habitación y no están mis cosas. 


- señorita si tan solo se dejara hablar. 
- que lo deje hablar? Me secuestra porque si sabe que esto es un secuestro y me pide calma? Que es tonto o que?  
- usted no está secuestrada. 
-no? -niega con la cabeza – entonces me largo- me dirijo a la puerta pero él me agarra el brazo – si no quiere que le empareje la otra mejilla es mejor que me suelte- lo miro directo a los ojos y me acuerdo  lo que pasó como si pasara en cámara lenta . 


>>Te lo advertí – alcanzó a rozarme la mejilla pero yo fui más rápida y de un solo zarpazo (bofetada) le dejé marcada mi mano, no me malinterprete no suelo ser agresiva pero me sentí asustada. El tipo y los demás quedan como en shock y aprovecho eso para soltarme y emprender mi huida. 
Corro lo más rápido que puedo, pero toman mi hombro y me giran, empuño mi mano tomo la estabilidad que puedo con mis pies y con todas mis fuerzas lo golpeó en el pecho, eso hace que, el que me tomó caiga unos metros a tras .  
Otro que trato de sujetarme no dejo que se acerque y le propino una patada que lo hace caer al igual que yo por el impulso que tomé, me levanto rápido pero siento una mano en mi cabeza y con ello mi cuerpo se debilita y lo último que veo es al tipo de ojos oscuros>> 


-Tengo curiosidad de que tipo de criatura eres – lo miro como si estuviera loco- lo digo por tu fuerza, es decir quien te enseño a pelear porque nadie había derribado a mi seguridad de esa forma…. No eres humana- lo último lo dice en susurro pero lo alcance a escuchar.


- no soy humana? Entonces que soy? A ver ilumíname- me alejo del tipo porque de cierta forma me pone nerviosa y más bien me siento en una silla que tiene por ahí. 
-quien te enseño a pelear? 


- veo y aprendo – le resto importancia, la verdad es que soy buena en el combate cuerpo a cuerpo y más mi contextura me ayuda a ser un poco intimidante. 
Soy de piel oscura, curvas pronunciadas, es decir no soy flaca soy lo que llaman ahora una mujer curvi con estatura de 170, cabello crespo súper largo y por más que lo corte crece y mis ojos color azul como el mar, supongo que debido a una condición genética o algo así. 
- que hago aquí! Ya lo he preguntado dos veces – lo miro molesta. 


- soy el dueño de este hotel – bueno eso no me esperaba – requería de sus servicios pero simplemente decidió comportarse como….


- Perdón? Usted señor mmm….- me hago la desentendida con su nombre y no lo dejo que responda- Beto Casa blanca- frunce el seño con total molestia y me causa gracia -quiere voltear los papeles? Y hacerme ver cómo una loca agresiva? Si claro lávese las manos y haga ver esto- giro mi dedo - cómo algo sin importancia, cuando claramente vulneraron mis derechos. 


- y pensar que me la recomendó Jazmín como una señorita de buenos modales, calmada y buena trabajadora – doña jazmín pero…- solo quería ofrecerle un mejor empleo pero ahora tengo mis dudas. 


- tampoco es que lo quisiera. Tanto drama para ofrecer un empleo mejor? Boba no soy y usted cree que porque me desmayé con lo que sea que me hizo al poner su mano en mi cabeza lo olvide,  pero no! señor Beto yo me acuerdo de todo, de todo- me acerco y mi dedo toca su duro pecho, este hombre debe ejercitarse mucho- le voy a dejar algo en claro señor, yo Nina López no soy de nadie y mejor me largo porque usted no me agrada y si quiere despídame me da igual! 

 




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