Capítulo 3

Después del desayuno cada uno fué por su lado,los padres de Aron y Alex fueron otra vez a la sala a charlar,al parecer pasaban mucho tiempo allí,demasiado. Emili que iba a ir al shopping con sus amigas, estaba por irse pero le llevaba tiempo arreglarse,o más bien hace tiempo a propósito,le gusta que los demás la esperen, así que mientras la vienen a buscar me la imagino haciendo tiempo mientras baila tontamente arriba en su habitación.

Me senté en la escalera,mientras jugaba con el celular por si aparecía Rubén de visita. Sentí una molesta presencia cuando levanté la vista del celular Aron quien estaba apoyado en el marco de la puerta de la sala, parecía que había acabado con su parte y salió de allí, me estaba mirando.

— Bonita pulsera dijo mientras miraba mi muñeca — No sabía cómo la veía tan bien desde esa distancia y tampoco sabía si lo decía enserio o me estaba molestando.

— Gracias — mi voz sonó sin ganas.

Incómoda fingí mirar mi celular y tontear en él.

— De nada — me sonrió  por alguna razón esa sonrisa me molestaba,esperaba que después de esa conversación sin sentido se fuera pero en su lugar se quedó allí.
Alguien baja desde el piso de arriba y interrumpe lo que sea que estuviera pasando allí.

— ¿Qué hacen? — La voz de Luisa sonaba molesta, y caminaba meneando el cuerpo hasta  posarse  casi frente a mí, pero desde donde se paro nos veía a ambos inquieta esperando claramente una respuesta.

Al menos la incomodidad de antes desapareció.

—Charlamos— Aron que no la miró ni una vez contesto por educación

—No creo que mirarse el uno al otro sea charlar—  Irritada por su escenita de celos no pude permanecer en silencio.

—Nos estabas espiando,se nota que no tienes vida — antes que dijera algo me levanté y fuí hasta mi habitación aunque en el camino pude oír que en voz baja decía algo,afortunadamente no lo oí,seguro era algún comentario tonto para sacarme de quicio,a veces parecía que la mayor era yo y ella la menor.

La paz de mi habitación era irreal,me hacía sentir que estaba en otro planeta,hasta que la angustia de anoche cayó sobre mí al recordar la forma en la que se actuó Rubén por una simple tontería. Hoy no me llamo en todo el día,estuve ocupada en el desayuno y lo loco de tener a está familia tan extraña en mi casa que lo olvidé.

Lo único que haría el sería ignorame de ahora en adelante.
Aún no logro entender ,no puede ser que se halla enojado por las últimas tonterías que hablamos, ¿se enojo por qué hable mal de Virginia?, pero el ya sabe que me desagrada...
Y cuando finalizó la llamada no me había dado el tiempo de reaccionar.

La siguiente semana comencé el segundo año de la universidad,todo iba bien hasta el momento en que mamá me llevo con su volkswagen jetta rojo y se detuvo en las puertas de mi propia muerte,no sabía que el único lugar en todo el mundo que me gustaba se transformaría en una pesadilla.

Desde el comienzo,el primer jodido día me cruce a Rubén que me ignoraba,iba de la mano con Virginia,al parecer me perdí de muchas cosas en pocos días.Las clases afortunadamente transcurrieron con normalidad,nos dieron mil deberes para la siguiente semana,mientras me dirigía a la biblioteca para pedir los libros que me faltaban mi hermana paseaba con sus dos mejores amigas,el grupito de una neurona le habíamos apodado con Rubén.Pasaron cerca mío y al verme se rieron a carcajadas demasiado fuerte y molesto para mí gusto.

A cuarta hora salí fuera del salón y ahí estaba el con su cabello castaño y sus ojos marrones que podían atravesar te con la mirada de manera que se daba cuenta cuando mentias Él hablaba con un grupo de personas incluida su nueva noviecita.

No le llevo mucho notar que había una obsesiva chica mirándolo desde el otro extremo del pasillo,lo mire tan fijamente con la mirada como pude casi sin pestañear, sabía que irradiaba enojo,por primera vez en días me dirigía la mirada y entonces supe que estaba realmente ofendido,se fue y me mire en el reflejo de la vitrina,mi cabello era un desastre sin duda pero mis ojeras eran de otro mundo.

Las siguiente semana fue similar a la anterior incluida la visita no deseada de la familia que no parecía irse más de mi casa.Los últimos días continuaron así,hasta que acorrale a Rubén en la salida y el solo me puso una excusa y salió huyendo de mí,y eso continuo así una y otra vez,ya no estaba enojada,estaba triste,le mandé un mensaje por whatsapp:

Malia:
¿Podríamos hablar y solucionarlo de una vez? Necesito a mi mejor amigo😭

Rubén:
Claro,nos vemos donde siempre,hoy a las 15hs 😉

Ah genial,me habla como siempre,ahora parezco una loca que hace drama de todo cuando el que es un drama queen es él y después dicen que las mujeres somos complicadas.Después de haber tenido un día largo mi estómago rugía, parecía que sabía muy bien que pronto comería la mejor pizza del mundo.

La pizzería no quedaba lejos de la universidad,era en plena avenida 18 de julio,mientras iba caminando,pasaban multitud de personas,algunas iban corriendo y otros no tanto pero todos estaban en su burbuja ajenas a todo pero pendientes de ellos mismos.
Entre en el local varias mesas estaban ocupadas,fuí hasta la mesa cinco,allí se sentaba el ser mas egoísta de todos y me sonreía como un niño inocente que rompió un juguete.
Me cruce de brazos mientras lo miraba seria conteniendo las ganas de darle un cachote. Como puede ser ¿ me ignora por más de una semana y ahora hace como si nada?

—Necesito que me expliques ya mismo que parásito se apoderó de tu cerebro si es que queda algo ahí dentro —me senté sin ganas mientras mantenía la mirada del homo sapiens que se hallaba frente de mí.

—Bueno,lo voy a resumir antes de que me golpees, el otro día me enoje mucho contigo,entre que hablaste mal de Vir y me trataste como si fuera poca cosa de hombre —intenté no reírme del apodo que le puso a su noviecita, pero no fue fácil, tenía muchos apodos que se me hubieran ocurrido para ella pero nunca ese.